CAPÍTULO 18

¿Será posible sobrellevar el estrés de la escuela?

“Estaba bajo tanta presión en la escuela que a veces no sabía si llorar o gritar.” (Sharon)

“El estrés no desaparece cuando creces y terminas tus estudios. Solo cambian las causas.” (James)

 ¿TAMBIÉN a ti te estresa la escuela? Quizá ni tus padres comprendan a cuánta presión estás sometido. Es verdad que no tienes que pagar una hipoteca, mantener una familia ni responder ante un jefe, como hacen ellos, pero tú te sientes igual de estresado, o incluso más.

¡Hasta el viaje de ida y vuelta a la escuela puede resultar estresante! “A menudo se formaban peleas en el autobús escolar —cuenta Tamara, que vive en Estados Unidos—. Y cada vez que eso sucedía, el conductor paraba y nos mandaba bajar a todos. Al final nos retrasábamos media hora o más.”

Y el estrés no termina al llegar a la escuela; al contrario, aumenta. Algunas de las causas pueden ser estas:

● Los profesores.

“Los maestros me exigen mucho: quieren que saque las mejores calificaciones posibles. Me siento obligada a estar a la altura de lo que esperan de mí.” (Sandra.)

“Si el estudiante es bueno, los profesores lo presionan para que continúe superándose.” (April.)

“Puedes tener metas muy nobles, pero si no coinciden con las metas que tus maestros tienen pensadas para ti, te tratan como basura.” (Naomi.) *

¿Te estresan tus profesores? ¿Cómo?

․․․․․

● Los compañeros.

“En los últimos años de secundaria, la presión es más fuerte. Los muchachos tienen más libertad y son más rebeldes, y si no haces lo mismo que ellos, te dejan fuera de su grupo.” (Kevin.)

 “Prácticamente todos los días me surge alguna oportunidad de beber o tener relaciones sexuales. Y la verdad, a veces cuesta resistirse.” (Aaron.)

“Aunque tengo 12 años, mi mayor prueba en la escuela es la de no salir con chicos. Todo el mundo me pregunta por qué no tengo novio todavía.” (Alexandria.)

“Todos insistían en que saliera con un chico, y como no quise, empezaron a decir que era lesbiana. ¡Y solo tenía 10 años!” (Christa.)

¿Te estresan tus compañeros? ¿Cómo?

․․․․․

● Otras causas de estrés. Marca (✔) o escribe el factor que más te estrese:

□ Los exámenes

□ Las tareas escolares

□ Las expectativas de tus padres

□ Tus propias expectativas

□ El acoso sexual o los abusones

□ Otro factor ․․․․․

Cuatro pasos para reducir el estrés

Siendo realistas, es imposible terminar tus estudios sin experimentar cierto grado de estrés. El problema surge cuando te sientes tan presionado que crees que vas a estallar. Como escribió Salomón, un rey de la antigüedad, “la mera opresión puede hacer que un sabio se porte como loco” (Eclesiastés 7:7). ¿Cómo puedes evitar  llegar a ese punto? Aprendiendo a controlar el estrés.

El proceso puede compararse a lo que hace un levantador de pesas profesional. Por un lado, no trata de levantar más peso del que puede, y por otro, sigue una técnica. Así va fortaleciendo sus músculos sin lastimarse. De lo contrario, podría lesionarse un músculo o incluso romperse un hueso.

En tu caso pasa lo mismo. Tú también puedes cumplir con tus responsabilidades sin que la carga te haga daño. Solo tienes que seguir el siguiente método:

1. Identifica las causas. Según cierto proverbio bíblico, “el que es inteligente ve el peligro y lo evita; el que es tonto sigue adelante y sufre las consecuencias” (Proverbios 22:3, Traducción en lenguaje actual). Obviamente, no puedes evitar las consecuencias dañinas del estrés a menos que antes determines qué te lo causa. Volvamos a la lista de factores que provocan estrés. ¿En cuál pusiste la marca (✔)?

2. Investiga el tema. Imaginemos que lo que más te agobia es la cantidad de deberes que tienes. ¿Por qué no aplicas las sugerencias del capítulo 13 del segundo volumen de este libro? O si te presionan para que desobedezcas las normas morales de Dios, quizás te sirvan los consejos de los   de este libro? O si te presionan para que desobedezcas las normas morales de Dios, quizás te sirvan los consejos de los   de este libro? O si te presionan para que desobedezcas las normas morales de Dios, quizás te sirvan los consejos de los capítulos 2, 5 y 15 del mismo volumen.

3. No lo dejes para después. No conseguirás que los problemas desaparezcan haciendo como si no existieran.  Al contrario, solo lograrás que empeoren y que, como resultado, te provoquen más estrés. Así pues, piensa en cómo solucionar eso que tanto te agobia y hazlo de inmediato. Por ejemplo, si quieres obedecer las normas morales de la Biblia porque eres testigo de Jehová, identifícate como tal cuanto antes y verás que la tensión se reduce. Fíjate en lo que hacía Marchet, una chica de 20 años: “Tan pronto como empezaba el curso, sacaba algún tema de conversación que me permitiera explicar mis principios bíblicos. Descubrí que cuanto más tardaba en decir que era Testigo, más me costaba hacerlo. Sin embargo, una vez que todos sabían cuál era mi postura, me resultaba más fácil defenderla durante el resto del año”.

4. Pide ayuda. ¿Recuerdas el ejemplo del levantador de pesas? Pues hasta el más fuerte tiene un límite. Y lo mismo pasa contigo. La ventaja es que  tú no tienes que llevar ese peso solo (Gálatas 6:2). Seguro que tus padres o algún otro cristiano maduro te ayudarán si se lo pides. Podrías mostrarles tus respuestas a las preguntas del principio de este capítulo y pedirles consejos.

¿Puede ser bueno el estrés?

Tal vez te cueste creerlo, pero lo cierto es que sentir un poco de estrés es un buen síntoma. Indica que eres aplicado y que tu conciencia no se ha vuelto vaga. Fíjate cómo describe la Biblia a una persona que no se estresa con nada: “¡Basta ya de dormir, perezoso! ¡Basta ya de estar acostado! Mientras tú sueñas y cabeceas, y te cruzas de brazos para dormir mejor, la pobreza vendrá y te atacará como un vagabundo armado” (Proverbios 6:9-11, Versión Popular).

Heidi, de 16 años, resume la cuestión muy bien: “La escuela puede parecerte una pesadilla, pero en ella te enfrentas a las mismas presiones que experimentarás en el mundo laboral”. Es cierto que no es fácil sobrellevar el estrés. Sin embargo, si aprendes a manejarlo, no tiene que ser perjudicial. De hecho, hasta puede hacerte más fuerte.

EN EL SIGUIENTE CAPÍTULO

¿Te conviene abandonar los estudios para librarte de los problemas en la escuela?

[Nota]

TEXTO BÍBLICO CLAVE

“Ech[en] sobre [Dios] toda su inquietud, porque él se interesa por ustedes.” (1 Pedro 5:7)

UNA SUGERENCIA

Clasifica las causas de tu estrés en dos grupos: las que puedes controlar y las que no. Luego trata de encontrar solución a las primeras, y si algún día logras terminar con esas, dedica todo el tiempo que quieras a las demás.

¿SABÍAS ESTO?

Una buena noche de descanso —de ocho horas como mínimo— te ayudará a sobrellevar el estrés y, además, mejorará tu memoria.

¡MANOS A LA OBRA!

Para sobrellevar mejor el estrés, voy a tratar de irme a dormir a las ․․․․․

¿Qué quiero preguntarle a mi padre o a mi madre sobre este tema? ․․․․․

Y TÚ, ¿QUÉ PIENSAS?

● ¿No crees que ser perfeccionista solo te dará más estrés?

● ¿Con quién podrías hablar si te sientes agobiado por el estrés?

[Comentario de la página 132]

“Mi padre oraba conmigo todos los días antes de dejarme en la escuela. Eso hacía que me sintiera más segura.” (Liz)

[Ilustración de la página 131]

Aprender a levantar pesas fortalece los músculos. Y aprender a sobrellevar el estrés fortalece el carácter