El 19 de abril de 2019, por primera vez en varios años, los testigos de Jehová pudieron conmemorar libremente la muerte de Cristo por todo Uzbekistán.

Los testigos de Jehová solo están registrados legalmente en Chírchik, una ciudad cercana a Taskent, la capital del país. En años anteriores, los Testigos que no viven en Chírchik celebraban la Conmemoración en secreto para evitar la posible interferencia de la policía. Este año, nuestros hermanos informaron a la policía sobre esta reunión especial y los invitaron a asistir. Los policías fueron muy amables y hasta se encargaron de garantizar la seguridad de los asistentes. De hecho, algunos policías también asistieron.

El hermano Mark Sanderson, del Cuerpo Gobernante, dio el discurso de la Conmemoración en un complejo de Salones del Reino en Chírchik, como se muestra en la fotografía que está al principio de este artículo. El programa se tradujo al ruso y asistieron 781 personas. Esa misma noche, se hicieron otras dos reuniones para conmemorar la muerte de Cristo en el mismo complejo.

El hermano Paul Gillies, de la central mundial, junto con Mark Sanderson y dos hermanos de Asia Central se reunieron con autoridades del Ministerio de Justicia y del Centro Nacional para los Derechos Humanos. Durante esas reuniones, nuestros hermanos presentaron información exacta sobre nuestras creencias y nuestra organización. Esperamos que esto ayude a que las autoridades nos faciliten el registro legal en otras comunidades fuera de Chírchik, y así nuestros hermanos puedan adquirir lugares adecuados para celebrar sus reuniones.

El que se pudiera realizar libremente la Conmemoración y las reuniones con las autoridades son avances legales muy positivos en Uzbekistán. Durante los pasados seis meses, no ha habido redadas, no se han impuesto multas ni se ha arrestado a ningún Testigo. Hace aproximadamente un año, el 14 de mayo de 2018, Yavlón Vajábov, embajador de Uzbekistán en Estados Unidos, declaró públicamente que el parlamento cambiaría la ley para que los testigos de Jehová puedan obtener su registro legal con mayor facilidad.

Confiamos en que Jehová bendecirá los esfuerzos de nuestros hermanos en Uzbekistán para que puedan seguir “llevando una vida tranquila y quieta con plena devoción piadosa y seriedad” (1 Timoteo 2:2).