La cura definitiva

La cura definitiva

Millones de personas han seguido los principios bíblicos que hemos visto y han logrado arrancar los prejuicios de su corazón. Pero, para ser sinceros, nosotros solos no podemos eliminar por completo todos los prejuicios. Entonces, ¿hay algún remedio?

Un gobierno perfecto

La historia demuestra que los gobiernos no han tenido mucho éxito combatiendo los prejuicios. ¿Significa eso que ninguno lo conseguirá?

Para terminar con los prejuicios, un gobierno tendría que hacer lo siguiente:

  1. 1. Motivar a la gente a que tenga el deseo de cambiar lo que piensa y siente hacia los demás.

  2. 2. Cerrar las heridas que nos hacen tratar mal a otros.

  3. 3. Tener líderes que traten a todos sin prejuicios.

  4. 4. Unir a las personas de todo el mundo.

La Biblia nos asegura que Dios ha formado un gobierno que hará todo eso. Se llama el “Reino de Dios” (Lucas 4:43).

Fíjese en lo que nos dará ese gobierno.

1. La mejor educación

Los habitantes de la Tierra aprenderán justicia (ISAÍAS 26:9).

“El resultado de la verdadera rectitud será paz, y el fruto de la verdadera rectitud será tranquilidad y seguridad permanentes” (ISAÍAS 32:17).

¿Qué significa? El Reino de Dios le enseñará a la gente lo que de verdad está bien. Cuando distinguimos entre lo que está bien y lo que está mal, o lo que es justo e injusto, nuestra forma de ver a los demás cambia. Todo el mundo sabrá que amar a todo tipo de personas es lo correcto.

2. Alivio

Dios “les secará toda lágrima de sus ojos, y la muerte ya no existirá, ni habrá más tristeza ni llanto ni dolor. Las cosas anteriores han desaparecido” (APOCALIPSIS 21:4).

¿Qué significa? El Reino de Dios acabará con todo el dolor que han causado las injusticias. Desaparecerán todas las razones por las que las víctimas de maltrato sienten rencor.

3. Un buen líder

“No juzgará por las apariencias ni reprenderá simplemente por lo que oiga. Juzgará a los desfavorecidos con justicia, y reprenderá con rectitud por el bien de los mansos de la tierra” (ISAÍAS 11:3, 4).

¿Qué significa? Jesucristo, el Rey del Reino de Dios, gobernará a la Tierra desde el cielo con justicia y sin favoritismo. Jesús no prefiere una nación a otra, y puede lograr que sus justas leyes se cumplan en todo el mundo.

4. Unidad

El Reino de Dios consigue que la gente tenga “la misma mente y el mismo amor”, que estén “completamente unidos” y que tengan “el mismo pensamiento” (FILIPENSES 2:2).

¿Qué significa? La unidad que habrá entre los ciudadanos del Reino de Dios no será una fachada. Estarán “completamente unidos” porque se amarán de verdad.