CONVERSACIONES CON UN TESTIGO DE JEHOVÁ

¿Cuándo comenzó a gobernar el Reino de Dios? (Segunda parte)

¿Cuándo comenzó a gobernar el Reino de Dios? (Segunda parte)

Para ver el desarrollo de una típica conversación con un testigo de Jehová, imaginémonos que un Testigo de nombre Julio vuelve a la casa de un señor llamado Ernesto.

UN REPASO DEL SUEÑO DE NABUCODONOSOR

 Julio: Hola Ernesto, me alegra verlo otra vez. Disfruto mucho venir cada semana para hablar con usted de la Biblia. a ¿Cómo está?

 Ernesto: Estoy bien, gracias.

 Julio: ¡Qué bien! La última vez que lo visité hablamos sobre por qué los testigos de Jehová decimos que el Reino de Dios comenzó a gobernar en 1914. b Vimos que el capítulo 4 del libro de Daniel nos da una pista para llegar a esa conclusión. ¿Recuerda cuál es?

 Ernesto: Sí, el sueño que tuvo el rey Nabucodonosor.

 Julio: Así es. Él soñó con un árbol gigante que llegaba hasta el cielo. En el sueño escuchó a un ángel dar la orden de que cortaran el árbol. Lo único que quedó fue la raíz y la base. Luego pasó un período de “siete tiempos” y el árbol volvió a crecer. c También vimos que la profecía se ha cumplido dos veces. ¿Cuál fue la primera? ¿Recuerda?

 Ernesto: Fue algo que le pasó a Nabucodonosor, ¿no? Se volvió loco y estuvo así siete años.

 Julio: Exacto. Se volvió loco y tuvo que dejar de ser rey. La segunda vez que se cumplió la profecía fue cuando se interrumpió durante siete tiempos el gobierno de Dios sobre la Tierra. Ese período comenzó cuando Jerusalén fue destruida en el año 607 antes de la era común, es decir, antes de nuestra era. A partir de entonces dejó de haber reyes que representaran a Jehová en la Tierra. Al terminar el período, Dios nombraría a un nuevo rey, pero esta vez en el cielo. En otras palabras, al terminar los siete tiempos, comenzaría a gobernar el Reino celestial de Dios. Bueno, ya hemos visto cuándo empezaron a contar los siete tiempos. Ahora tenemos que ver cuánto duraron para saber en qué año comenzó a gobernar el Reino de Dios. ¿Lo va entendiendo?

 Ernesto: Sí, ya voy recordando lo que hablamos la última vez.

 Julio: Perfecto. Veamos entonces cuánto duraron los siete tiempos. Yo mismo tuve que repasarlo antes de venir para recordar todos los detalles. Trataré de explicárselo lo mejor que pueda.

 Ernesto: Bien.

TERMINAN LOS SIETE TIEMPOS, EMPIEZAN LOS ÚLTIMOS DÍAS

 Julio: En el primer cumplimiento, el de Nabucodonosor, los siete tiempos duraron siete años. Pero en el segundo cumplimiento, el del Reino de Dios, duraron mucho más.

 Ernesto: ¿Y cómo lo sabe?

 Julio: Para empezar, los siete tiempos comenzaron en el año 607 antes de nuestra era, cuando Jerusalén fue destruida. Si a partir de esa fecha contamos siete años, llegamos al 600 antes de nuestra era y en ese año no sucedió nada que tuviera relación con el Reino de Dios. Además, como ya habíamos analizado, cuando Jesús vino a la Tierra muchos siglos después, dijo que los siete tiempos todavía no habían terminado.

 Ernesto: Sí, sí, ya me acuerdo.

 Julio: Así que en este caso, siete tiempos no son siete años; tienen que ser un período más largo.

 Ernesto: ¿Más largo? ¿De cuánto tiempo?

 Julio: Bueno, en el libro de Revelación, o Apocalipsis, hay una profecía que está muy relacionada con la de Daniel y que nos ayudará a saber cuánto duraron los siete tiempos. En esa profecía se dice que tres tiempos y medio equivalen a 1.260 días. d Entonces el doble, es decir, siete tiempos, son 2.520 días. ¿Hasta aquí vamos bien?

 Ernesto: Sí, pero todavía no me queda claro por qué creen ustedes que el Reino de Dios empezó en 1914.

 Julio: Está bien, ahora lo veremos. En algunas profecías bíblicas, un día equivale a un año. e Si aplicamos esta regla a los siete tiempos, 2.520 días serían 2.520 años. Y si contamos 2.520 años a partir del 607 antes de nuestra era, que fue cuando empezaron los siete tiempos, llegamos a 1914. f Esa es la razón por la que podemos decir que en ese año terminaron los siete tiempos y que Jesús fue nombrado Rey del Reino de Dios. Además, en 1914 comenzaron a suceder las cosas que la Biblia había predicho para los últimos días.

 Ernesto: ¿Por ejemplo?

 Julio: En Mateo 24:7, Jesús profetizó lo que pasaría cuando comenzara a reinar desde el cielo: “Se levantará nación contra nación y reino contra reino, y habrá escaseces de alimento y terremotos en un lugar tras otro”. Fíjese, Jesús dijo que habría hambre y terremotos. ¿No es eso precisamente lo que ha estado sucediendo en la Tierra desde ese año?

 Ernesto: Sí, es verdad.

 Julio: Jesús también dijo que habría guerras. Y el libro de Revelación predijo que no serían conflictos locales, sino guerras internacionales que afectarían al mundo entero. g ¿Recuerda cuándo estalló la Primera Guerra Mundial?

 Ernesto: En 1914. Vaya, justo el año que ustedes dicen que Jesús comenzó a gobernar. Nunca se me habría ocurrido relacionarlo.

 Julio: Exactamente, cuando nos damos cuenta de la relación que hay entre la profecía de los siete tiempos y las profecías de los últimos días, todo cuadra. Los testigos de Jehová estamos convencidos de que en 1914 Jesús empezó a gobernar y que desde entonces estamos viviendo en los últimos días. h

 Ernesto: Todavía estoy tratando de asimilar todo esto.

 Julio: Me imagino. A mí también me costó entenderlo la primera vez que me lo explicaron. Pero por lo menos espero que nuestra conversación lo haya ayudado a ver mejor que, aunque la Biblia no menciona el año 1914, los testigos de Jehová tenemos buenas razones para creer que Jesús comenzó a gobernar en ese año. También espero haber podido demostrarle que todo lo que creemos se basa en la Biblia.

 Ernesto: Sí, eso siempre me ha impresionado. Usted me explica las cosas con la Biblia. No importa lo que le pregunte, usted nunca dice “Yo creo” o “Yo opino”. Siempre usa la Biblia. Pero ¿por qué es tan difícil entenderla? ¿Por qué no dijo Dios directamente que Jesús sería rey en 1914?

 Julio: Buena pregunta, Ernesto. Hay muchas cosas en la Biblia que no se dicen de forma directa. ¿Por qué la hizo Dios así? O sea, ¿por qué tenemos que esforzarnos por entenderla? ¿Le gustaría que habláramos de eso la próxima semana?

 Ernesto: Sí, me gustaría. Lo espero.

¿Tiene alguna duda sobre un tema bíblico? ¿Le llama la atención determinada práctica o creencia de los Testigos? Si así es, ¿por qué no les plantea el asunto la próxima vez que los vea? A ellos les encantaría conversar con usted.

a Los testigos de Jehová ofrecen clases gratis en las que se estudia la Biblia por temas.

b Vea el artículo “Conversaciones con un testigo de Jehová: ¿Cuándo comenzó a gobernar el Reino de Dios? (Primera parte)”, publicado en el número del 1 de octubre de 2014 de esta revista.

f Vea la tabla “El sueño de Nabucodonosor”.

h Vea el capítulo 9 del libro ¿Qué enseña realmente la Biblia?, publicado por los testigos de Jehová.