Zacarías 2:1-13
2 Y levanté la vista y vi a un hombre que llevaba en la mano un cordón de medir.+
2 Así que le pregunté: “¿Adónde vas?”.
Él respondió: “A medir Jerusalén para ver cuánto mide de ancho y cuánto de largo”.+
3 Entonces el ángel que estaba hablando conmigo salió, y otro ángel vino a su encuentro.
4 Luego le dijo: “Ve allí corriendo y dile a ese joven: ‘“Jerusalén será habitada+ como si fuera campo abierto,* de tantos hombres y ganado que habrá en ella.+
5 Y yo —afirma Jehová— llegaré a ser para ella un muro de fuego a su alrededor+ y llegaré a ser la gloria en medio de ella”’”.+
6 “¡Vengan! ¡Vengan! Huyan de la tierra del norte”,+ afirma Jehová.
“Porque los he dispersado por los cuatro vientos de los cielos”,+ afirma Jehová.
7 “¡Ven, Sion! Escapa, tú que vives con la hija de Babilonia.+
8 Porque esto es lo que dice Jehová de los ejércitos, quien después de ser glorificado* me envió a las naciones que los saqueaban:+ ‘Quien los toca a ustedes toca la niña de mis ojos.*+
9 Pues ahora yo voy a levantar mi mano contra ellos, y se convertirán en botín para sus propios esclavos’.+ Y ustedes sin falta sabrán que Jehová de los ejércitos me ha enviado.
10 ”Da gritos de alegría, oh, hija de Sion;+ porque estoy llegando+ y residiré en medio de ti+ —afirma Jehová—.
11 Muchas naciones se unirán a Jehová en ese día+ y llegarán a ser mi pueblo; y yo residiré en medio de ti”. Y tendrás que saber que Jehová de los ejércitos me ha enviado a ti.
12 Jehová tomará posesión de Judá como su propiedad en el suelo santo y elegirá de nuevo a Jerusalén.+
13 Que toda la humanidad* guarde silencio delante de Jehová, porque él está actuando desde su santo lugar de residencia.