El Comité de Sucursal de Malaui ha organizado que las reuniones de congregación se transmitan por las cadenas locales de radio y televisión. Gracias a eso, incluso los que no son testigos de Jehová se están beneficiando de ellas. En Malaui hay más de cien mil Testigos, pero se estima que cada fin de semana dos millones de personas ven las reuniones por la tele y ocho millones las escuchan por la radio.

Al igual que en muchos otros países, para cumplir con las medidas de distanciamiento social, nuestros hermanos de Malaui no se están reuniendo en los Salones del Reino, sino por videoconferencia. Pero ¿qué pasa con los que no pueden conectarse o no pueden pagar el servicio de Internet? Ellos tampoco se las pierden. Como casi todos tienen acceso a la televisión o la radio, pueden verlas o escucharlas por esos medios.

Las reuniones se trasmiten en chichewa, el principal idioma del país. Y el programa de televisión completo se traduce simultáneamente a lenguaje de señas malauí. En la Reunión Pública, además de un discurso bíblico, se presentan videos y lecturas dramatizadas de la Biblia. Cuando se acaba el programa, se invita a la audiencia a visitar nuestro sitio web, jw.org, para recibir más información en otros idiomas.

Todo esto ha permitido corregir muchas ideas equivocadas que la gente tiene sobre los testigos de Jehová. Un hombre escribió: “Estas últimas semanas he escuchado sus sermones por la radio, y sin duda aclaran muchas mentiras que la gente dice de ustedes. Esos sermones realmente nos llegan al corazón; no se parecen en nada a los de otras religiones”. Este hombre y su familia han empezado a estudiar la Biblia con los testigos de Jehová.

Augustine Semo, que trabaja en la Sección de Información Pública de Malaui, dice: “Poder transmitir las reuniones por radio y televisión ha sido clave para que nuestros hermanos puedan seguir adorando a Dios. También ha abierto las puertas para que la gente conozca nuestro programa de educación bíblica. Cuando las cosas se normalicen en Malaui, esperamos ver muchas caras nuevas en el Salón del Reino”.

Nos alegra saber que en Malaui tanto los Testigos como otras personas pueden beneficiarse de las verdades de la Biblia en estos tiempos tan difíciles. ¡Cuánto agradecemos lo que está haciendo “el esclavo fiel” para que todos tengamos el alimento espiritual que necesitamos! (Mateo 24:45).