Levítico 10:1-20

  • Un fuego de Jehová mata a Nadab y Abihú (1-7)

  • Normas para los sacerdotes sobre la comida y la bebida (8-20)

10  Más tarde, Nadab y Abihú+ —los hijos de Aarón— tomaron sus braserillos, pusieron fuego en ellos, echaron incienso+ encima y empezaron a ofrecer delante de Jehová fuego no autorizado,+ que él no les había mandado ofrecer. 2  Entonces salió fuego de delante de Jehová y los quemó,+ así que murieron delante de Jehová.+ 3  Y Moisés le dijo a Aarón: “Esto es lo que ha dicho Jehová: ‘Seré santificado entre los que están cerca de mí+ y seré glorificado delante de todo el pueblo’”. Y Aarón se quedó callado. 4  Entonces, Moisés llamó a Misael y Elzafán, los hijos de Uziel,+ tío de Aarón, y les dijo: “Vengan aquí. Saquen a sus hermanos de delante del lugar santo y llévenlos fuera del campamento”. 5  Así que ellos fueron y se llevaron los cuerpos con sus túnicas puestas fuera del campamento, tal como Moisés les había dicho. 6  Después Moisés les dijo a Aarón y a sus otros hijos, Eleazar e Itamar: “No descuiden su cabello ni se rasguen la ropa,+ para que no mueran y para que Dios no se indigne con todo el pueblo.* Sus hermanos de toda la casa de Israel llorarán por aquellos a los que Jehová mató con fuego. 7  No se alejen de la entrada de la tienda de reunión. Si no, morirán, porque el aceite de la unción de Jehová está sobre ustedes”.+ Así que ellos hicieron lo que Moisés les dijo. 8  Luego Jehová le dijo a Aarón: 9  “Ni tú ni tus hijos deben beber vino ni otras bebidas alcohólicas cuando entren en la tienda de reunión,+ para que no mueran. Esto es un estatuto permanente para todas sus generaciones. 10  Así podrán distinguir la cosa santa de la profana y la cosa pura de la impura,+ 11  y enseñarles a los israelitas todas las normas que Jehová les ha dado mediante Moisés”.+ 12  Entonces Moisés les dijo a Aarón y a Eleazar e Itamar, los hijos que le quedaban: “Tomen lo que quede de la ofrenda de grano de las ofrendas hechas con fuego para Jehová y cómanlo como pan sin levadura cerca del altar,+ porque es algo santísimo.+ 13  Tienen que comerlo en un lugar santo,+ porque es tu ración y la ración de tus hijos de las ofrendas hechas con fuego para Jehová, pues eso es lo que se me ha mandado. 14  También comerán el pecho de la ofrenda mecida y la pata de la porción sagrada+ en un lugar puro, tú y tus hijos y tus hijas,+ porque estas cosas son la ración de los sacrificios de paz de los israelitas que se te ha dado a ti y a tus hijos. 15  Llevarán la pata de la porción sagrada y el pecho de la ofrenda mecida junto con la grasa de las ofrendas hechas con fuego, a fin de mecer la ofrenda mecida de acá para allá ante Jehová, y esto será la ración permanente para ti y tus hijos,+ tal como Jehová ha mandado”. 16  Y Moisés buscó por todas partes el macho de las cabras de la ofrenda por el pecado+ y descubrió que había sido quemado. Así que se indignó con Eleazar e Itamar, los hijos que le quedaban a Aarón, y les dijo: 17  “¿Por qué no se comieron la ofrenda por el pecado en el lugar santo,+ en vista de que es algo santísimo? ¿Acaso no se la dio él a ustedes para que pudieran responder por el error del pueblo y hacer expiación por ellos delante de Jehová? 18  ¡Miren! La sangre de la ofrenda no se llevó dentro del lugar santo.+ Debieron haberse comido la ofrenda en el lugar santo, tal como se me ordenó”. 19  Aarón le dijo a Moisés: “Mira, hoy ellos presentaron su ofrenda por el pecado y su ofrenda quemada delante de Jehová,+ pero a mí me ocurrieron todas estas cosas. Si yo hubiera comido hoy la ofrenda por el pecado, ¿le habría gustado a Jehová?”. 20  Cuando Moisés oyó esto, le pareció bien.

Notas

Lit. “toda la asamblea”.