Nigeria está sufriendo las peores inundaciones en décadas debido a lluvias torrenciales sin precedentes. Las zonas más afectadas se encuentran en la costa sur y a lo largo de los ríos Níger y Benue. Las inundaciones han destruido caminos, carreteras y puentes. También han obligado a más de un millón de personas a abandonar sus hogares y han dejado por lo menos 600 muertos. La Agencia Nacional de Gestión de Emergencias de Nigeria dijo que se trata de un desastre “colosal”, y las autoridades prevén que habrá una crisis alimentaria debido a esta gran devastación.

• Ningún testigo de Jehová perdió la vida.

• 4.074 Testigos tuvieron que abandonar sus hogares.

• 900 casas siguen inundadas.

• 180 casas quedaron destruidas.

• 70 Salones del Reino y 1 Salón de Asambleas están inundados.

• Se formaron cuatro Comités de Socorro.

• Se les está proporcionando alojamiento temporal, comida y otros productos de primera necesidad a los Testigos que tuvieron que dejar sus hogares.

• Los ancianos de la zona y los superintendentes de circuito están animando y consolando con la Biblia a los Testigos afectados, y ayudándolos en todo lo que necesitan.

• Todas las labores de socorro se están llevando a cabo respetando las medidas de seguridad exigidas por el COVID-19.

Nos alegra saber que, en estos tiempos tan difíciles, Jehová les sigue proporcionando a sus siervos refugio físico y espiritual “en el día de la calamidad” (Salmo 27:5).