Salmo 6:1-10

Al director sobre instrumentos de cuerda en la octava baja.*+ Melodía de David. 6  Oh Jehová, no me censures en tu cólera,+y no me corrijas en tu furia.+   Muéstrame favor, oh Jehová, porque voy decayendo.+Sáname,+ oh Jehová, porque mis huesos se han perturbado.   Sí, mi propia alma ha estado muy perturbada;+y tú, oh Jehová.⁠.⁠. ¿hasta cuándo?+   Sí vuelve,+ oh Jehová, sí libra mi alma;+sálvame por causa de tu bondad amorosa.*+   Porque en la muerte no hay mención* de ti;+en el Seol,* ¿quién te elogiará?+   Me he fatigado con mi suspirar;+toda la noche hago nadar mi lecho;+con mis lágrimas hago desbordar mi propio diván.+   Por la irritación [de que soy objeto] mi ojo se ha debilitado,+ha envejecido a causa de todos los que me muestran hostilidad.+   Apártense de mí, todos ustedes los que practican lo que es perjudicial,+porque Jehová ciertamente oirá el sonido de mi llanto.+   Jehová verdaderamente oirá mi petición de favor;+Jehová mismo aceptará mi propia oración.+ 10  Todos mis enemigos quedarán muy avergonzados+ y perturbados;se volverán atrás, se avergonzarán instantáneamente.+

Notas

“La octava baja.” Heb.: hasch·schemi·níth. Esta es la forma fem. de la palabra para “octavo”, y no se conoce con certeza a qué, exactamente, se refiere: si a una clave octava, a una octava, a un instrumento de ocho cuerdas, o al octavo día (el día de la circuncisión).
O: “amor leal”.
“Seol”, MSy; gr.: hái·dei; lat.: in·fér·no. Véase Ap. 4B.
O: “recuerdo”.