Informe mundial

África

PAÍSES Y TERRITORIOS 57

HABITANTES 827.387.930

PUBLICADORES 1.086.653

ESTUDIOS BÍBLICOS 2.027.124

Costa de Marfil

Al este del país, la gente de la aldea de Bianouan tiene sed de la verdad. Algunas personas van a las casas de los publicadores a las 6.00 de la mañana y los despiertan para conversar acerca de la Biblia antes de irse al campo a trabajar. Otras solicitan que se les impartan sus cursos bíblicos por la noche, después de las reuniones de la congregación. Un día, una señora que no sabía leer le pidió a un hermano el libro ¿Qué enseña realmente la Biblia? Ella le dijo que su esposo podía leérselo, así que el hermano se lo dio. Cuando al día siguiente este la visitó en su hogar, ella y su esposo estaban esperándolo pacientemente. El esposo no había ido a trabajar al campo porque habían pasado toda la noche leyendo el libro. Ahora él quería hablar con el hermano sobre lo que había leído. Finalmente se estableció un estudio con la pareja.

Benín

En un lugar remoto, una familia numerosa —en la que el padre era pastor de una iglesia tradicional— comenzó a estudiar la Biblia. Tan solo dos semanas después de haberse iniciado el estudio, toda la familia aceptó la invitación para asistir a la asamblea de distrito. Sin embargo, el sábado por la noche, la hija mayor enfermó de repente y falleció. A pesar de este terrible golpe, el padre asistió a las sesiones del domingo. El lunes, al hablar sobre la muerte de su hija, declaró: “Esto fue obra de Satanás, para desanimarnos, pero mi familia no se lo permitirá”. Sacó todos sus objetos litúrgicos: la sotana, la birreta, la faja, los “santos” óleos y el báculo pastoral. Su esposa, que  también ocupaba un cargo en la iglesia, siguió sus pasos. “Ya no tenemos nada que ver con esta iglesia”, afirmó el pastor. Luego, en un acto que recuerda al registrado en Hechos 19:19, quemó públicamente todas aquellas cosas. Hasta la fecha, la familia sigue progresando en el camino de la verdad.

Madagascar

El año pasado, en una aldea de unos 500 habitantes, cierto predicador recibió el libro Enseña de manos de una Testigo que vivía en otra aldea. Tras leerlo detenidamente, el predicador se convenció de haber encontrado la verdad y les habló a sus feligreses sobre lo que acababa de aprender. Al poco tiempo, él, su familia y otras veinte personas abandonaron su iglesia y comenzaron a celebrar reuniones como las que organizan los testigos de Jehová por todo el mundo. Unos precursores especiales que fueron a ayudarles iniciaron estudios bíblicos con las personas interesadas, que eran muchas. Además, se encargaron de dirigir regularmente el Estudio de Libro de Congregación y el Estudio de La Atalaya. En octubre hubo cinco nuevos publicadores, y los precursores ya han hecho planes para llevar a cabo la Reunión Pública y la Escuela del Ministerio Teocrático. El promedio de asistentes a las reuniones es de 40, y se dirigen más de veinte estudios bíblicos.

 Sudáfrica

Cierto día, Hennie y su esposa iban predicando de casa en casa. De repente, mientras caminaban junto al enrejado de una casa, un perro agresivo sacó la cabeza entre las rejas y le mordió la mano a Hennie. Como le salió mucha sangre, inmediatamente se fueron a casa. Su esposa le lavó la herida y lo vendó, y él hizo una cita para que un médico lo revisara más tarde. Entonces Hennie le dijo a su esposa que no iba a permitir que un perro le impidiera participar en el servicio del campo, así que, más o menos una hora después, regresaron al territorio. Comenzaron en la casa que estaba junto a la del incidente con el perro. Algunas puertas más adelante, un hombre los invitó a pasar. Los escuchó atentamente y expresó su deseo de que lo visitaran de nuevo. Así que se estableció un estudio bíblico, y poco después el señor empezó a asistir a las reuniones con regularidad. Cuando presentó su renuncia a su anterior religión —la Iglesia Reformada Holandesa—, uno de sus miembros más destacados fue a buscarlo y le ofreció el puesto de diácono. Sin embargo, él permaneció firme en su decisión de dejar la Iglesia. Desde entonces ha seguido dando excelentes pasos, y ya se ha matriculado en la Escuela del Ministerio Teocrático.

Tanzania

En octubre de 2005, durante una campaña para predicar en territorios aislados, nueve hermanos de la Congregación Iringa viajaron a Pawaga, a unos 75 kilómetros (50 millas) de distancia. Habían oído que allí vivía un publicador, y fueron a buscarlo. Después de preguntarle a mucha gente, por fin lo encontraron. El hermano les explicó que había vivido ahí por más de veinte años, creyendo que la obra del Reino todavía estaba proscrita en Tanzania. En todos esos años había dado testimonio a sus vecinos, y afirmó que había personas realmente interesadas en el mensaje bíblico. A fin de seguir cultivando el interés de la gente, algunos hermanos de la Congregación Iringa se ofrecieron a quedarse en Pawaga por períodos de quince días. En el año 2006, dos precursores regulares se mudaron allí con el propósito de atender ese productivo  territorio. La espiritualidad de aquel hermano se fortaleció, y ahora hay nueve publicadores en el grupo. Aunque por el momento están celebrando sus reuniones bajo un árbol, tienen planes de construir un pequeño local con los materiales disponibles en la zona.

Ruanda

Una adolescente de nombre Gentille se hizo famosa por los goles que anotaba jugando al fútbol. La gente la llamaba Manayibitego, que en el idioma kiniaruanda significa “la diosa de los goles”. Unos italianos notaron sus habilidades, y después de entrenarla, la invitaron a jugar en Italia. La oferta era tentadora: viviría en Europa y tendría la oportunidad de ganar fama internacional como futbolista. Sin embargo, ella sabía que eso supondría dejar a su familia. Su madre era Testigo, y Gentille había estudiado la Biblia. Pero como el fútbol era lo más importante en su vida, no había puesto mucho interés en los asuntos espirituales. Tras hablar de la oferta con su madre, se convenció de que aceptarla la expondría a violar las normas divinas. Por lo tanto, la rechazó y decidió poner en primer lugar los intereses del Reino. Hace poco se bautizó en una asamblea.

 América

PAÍSES Y TERRITORIOS 55

HABITANTES 893.357.181

PUBLICADORES 3.367.544

ESTUDIOS BÍBLICOS 3.236.692

Curazao

Cierto día, cuando un hermano fue a dirigir un estudio bíblico, su estudiante le entregó una bala y le preguntó si sabía lo que era. El hombre le dijo que, cuando el hermano lo visitó por primera vez, ya llevaba varios meses pensando en suicidarse porque había perdido su empleo y a su familia. Sediento de venganza, decidió asesinar a cuatro personas que, según él, tenían la culpa de sus problemas. Cargó su pistola con cuatro balas y guardó una más por si tenía que acabar con su propia vida. Pero antes de salir de casa, quiso buscar la guía de Dios y encendió el televisor para ver algún canal religioso. En ese momento, dos Testigos llamaron a su puerta, y, posteriormente, empezó a estudiar la Biblia con ellos. Aunque se deshizo de las cuatro balas, la otra se le quedó olvidada en el bolsillo. Cuando la encontró, se la mostró al hermano, le relató toda la historia y le contó que su vida había cambiado muchísimo desde que empezó a estudiar la Biblia. Le dijo que cinco personas les debían la vida a los testigos de Jehová. Actualmente asiste a las reuniones de la congregación.

Uruguay

Una señora invitó a entrar en su casa a dos Testigos que la visitaron. Con lágrimas en los ojos, les explicó que había estado orando a Dios toda la noche, suplicándole que le revelara cuál era su voluntad para ella. Hacía poco que los pastores de su iglesia la habían visitado, pero  solo para que les diera el diezmo de una suma de dinero considerable que había recibido. Estaba decepcionada porque nunca antes la habían visitado, ni siquiera cuando les había pedido ayuda en momentos difíciles. Después de más de un mes sin ir a la iglesia, le dijo a uno de los pastores que se sentía engañada por las contradicciones de sus enseñanzas. Sin embargo, en vez de tratar de aclararle esas cuestiones, el pastor la recriminó diciéndole que recibiría siete maldiciones por haberse apartado de la Iglesia. Los hermanos, por su parte, le explicaron que el Dios verdadero usa a ángeles para hallar a las personas que están buscando la verdad. Ella les hizo muchas preguntas, e inmediatamente se comenzó un curso con el libro ¿Qué enseña realmente la Biblia? Más tarde, su esposo se unió al estudio, y ambos asistieron a la Conmemoración y al discurso especial. Les impresionó la calidad de la enseñanza que se impartía en el Salón del Reino, y se les hacía difícil creer que no se pidiera dinero. Los dos siguen progresando y han hecho muchos amigos en la congregación.

Chile

Puede que el estudio bíblico más austral del mundo sea el que se le dirige a una señora que vive en la remota región del cabo de Hornos. Es la esposa del encargado del faro de ese lugar tan aislado. Cuando vivía en Punta Arenas, estudió la Biblia durante cuatro semanas con una precursora auxiliar. Después, al mudarse al cabo de Hornos, ha seguido estudiando por teléfono y está progresando muy bien.

 Costa Rica

En este país hay unos diez mil indígenas guaymíes, y en su mayoría viven en un pueblo llamado Sixaola, cerca de la frontera con Panamá. Muchos de ellos han mostrado verdadero interés por las enseñanzas bíblicas. Así que, a fin de atender las necesidades espirituales de dicha comunidad, se envió a una pareja joven de precursores especiales que ya ha empezado a aprender el idioma. Y con la colaboración de veintiséis hermanos y hermanas guaymíes, se ha podido lograr mucho. La primera vez que la Conmemoración se celebró en guaymí, hubo la extraordinaria cantidad de 264 asistentes. Desde entonces, la asistencia a las reuniones ha seguido aumentando. Por ejemplo, un grupo de Estudio de Libro de Congregación que contaba con 13 publicadores comenzó con un promedio de 20 asistentes, y ahora ya se reúnen 40. Como resultado, se formaron otros dos grupos de estudio de libro.

Panamá

Ramiro, un profesor de Educación Física, empezó en 2004 a estudiar la Biblia con los testigos de Jehová. Para ese tiempo atendía a seis grupos de alumnos con los que trabajaba doce horas a la semana. Sin embargo, como se esperaba que trabajara con ellos veinticuatro horas semanales, el director de la escuela le mandó que ocupara las otras doce horas en darles clases de religión. “Solo háblales de Dios, de Jesús y de la Biblia”, le dijo. De modo que Ramiro les enseñó lo que él mismo estaba aprendiendo. En ese año usó el libro El conocimiento que lleva a vida eterna con 150 alumnos de entre 12 y 14 años. Y al siguiente  año, cuando se publicó el libro ¿Qué enseña realmente la Biblia?, Ramiro ya había progresado hasta el punto de ser publicador no bautizado. Así que siguió dando las clases, pero ahora con el libro Enseña. La cantidad de estudiantes aumentó a 160, que seguían distribuidos en seis grupos. ¿Cuáles han sido los resultados? Ramiro y otros publicadores de la congregación visitan a varios alumnos en sus hogares y les dirigen estudios bíblicos. Los padres de algunos le han expresado su agradecimiento a Ramiro por los cambios positivos que han visto en la conducta de sus hijos. Varios padres han asistido a las reuniones de la congregación, e incluso a algunas de nuestras asambleas. En cuanto a Ramiro, se bautizó en noviembre del año 2006, y, con el mismo entusiasmo, sigue aprovechando toda oportunidad para enseñar las verdades bíblicas.

Guatemala

En la ciudad de Guatemala, un publicador llamado Jeremy le dirigía un estudio bíblico a cierto muchacho que vivía en un callejón. Un día en que fue a visitarlo, salió la hermana del joven para decirle que él no estaba en casa. Mientras Jeremy hablaba con ella, se acercaron dos muchachos. Uno sacó una pistola, se la puso a Jeremy en la cabeza y le dijo: “Me pagaron para venir a matarte”. (Más tarde, Jeremy supo que los ladrones suelen decir eso para intimidar a sus víctimas.) Jeremy nos cuenta: “La muchacha cerró la puerta, y yo les pregunté qué era lo que  querían. Uno de ellos me respondió: ‘¿Qué estás haciendo aquí?’. Le contesté que estaba predicando la Palabra de Jehová. Entonces me dijo con rudeza: ‘¡Predícame a mí!’. Me sentía nervioso y no sabía qué hacer exactamente. Abrí mi maletín y saqué la Biblia. En ese momento, el que tenía la pistola se puso a llorar porque hacía cosas que sabía que estaban mal. Me suplicó que lo ayudara. Buscó en mi maletín y encontró una revista ¡Despertad! que hablaba sobre el dinero. Entonces, el otro sujeto empezó a registrarme los bolsillos buscando mi billetera, pero el que tenía la pistola le dijo: ‘¡Ya déjalo en paz!’. Después me dio las gracias, me abrazó y ambos se fueron. Cuando todo pasó, sentí una gran calma y le agradecí a Jehová que me hubiera protegido en aquellos momentos”.

República Dominicana

Una hermana que es ortodoncista asistió a un seminario de un día sobre implantes dentales. A los más de doscientos cincuenta dentistas presentes se les ofreció la oportunidad de llenar una solicitud para asistir a un curso avanzado y muy costoso en Europa. Sin embargo, solo se invitaría a ocho de ellos. Al concluir el seminario, le dijeron a la hermana que, además de ser una de las seleccionadas para recibir el curso, se le iba a otorgar una beca completa. Sorprendida, nuestra hermana respondió: “Gracias por la invitación, pero ni llené la solicitud ni puedo aceptar su generosa oferta. Soy testigo de Jehová, y para mí no hay nada más importante que el bienestar espiritual de mi familia. Si yo asistiera a un curso tan intenso, querría sacarle el máximo provecho; pero cada semana tengo cinco reuniones bíblicas que requieren toda mi atención. Además, ¿de qué me serviría una capacitación avanzada y una titulación superior, si al regresar me encontrara con que mis dos hijos adolescentes han empezado a consumir drogas o han hecho cosas malas porque los dejé solos?”.

 Asia y Oriente Medio

PAÍSES Y TERRITORIOS 47

HABITANTES 3.993.686.009

PUBLICADORES 607.112

ESTUDIOS BÍBLICOS 496.577

Israel

Una joven precursora auxiliar de nombre Ella observó a una anciana que cargaba con dificultad una bolsa de basura. La joven la ayudó y le dio testimonio brevemente, así que la anciana le dio su dirección. La hermana fue muchas veces a visitarla, pero nunca la encontraba en casa. Por fin, un día la señora abrió la puerta. Debido a que sufre de sordera parcial, no había oído a nuestra hermana llamar a la puerta en las ocasiones anteriores. La anciana empezó a estudiar la Biblia, y su ateísmo inicial se tornó en un aprecio cada vez más intenso por Dios y su Palabra. Después de dos años de estudio dedicó su vida a Jehová, y hace poco se bautizó a la edad de 92 años.

Mongolia

Una anciana llamada Terbish trabajó toda su vida en una librería. Cuando Munkhzaya —una precursora de 18 años— la visitó, Terbish le dijo que había leído tanto que era capaz de comprender enseguida cualquier libro sin importar que empezara a leerlo por el principio, por la mitad o por el final. Pero con la Biblia era diferente: por más que la leía, no lograba entenderla, e ir a la iglesia tampoco la había ayudado. Así que la estudiaba por su cuenta y hacía anotaciones sobre cada versículo. Terbish tenía mucho interés en entender las palabras de Hebreos 11:6. Munkhzaya le explicó el versículo, le ofreció un estudio bíblico y la invitó al Salón del Reino. Cuando oyó la dirección del salón,  Terbish dijo: “¿Es el edificio con esas flores tan hermosas afuera? Siempre que paso por allí, me detengo a mirarlas. ¿Podría conocer a la persona que las cuida?”. Munkhzaya tuvo mucho gusto en presentársela. Terbish está muy entusiasmada aprendiendo la verdad acerca del Creador, y también asiste a las reuniones. Munkhzaya admite: “Las flores le predicaron a esta señora mucho antes que yo”.

Japón

Hiroko, que tiene 78 años, ya no puede predicar como lo hacía antes debido a un fuerte dolor en las piernas. Después de suplicarle a Jehová que la guiara, localizó una parada de autobuses muy concurrida en la que puede sentarse durante treinta minutos. Procura sonreír e interesarse por la gente. Cerca de allí hay un hospital, así que cuando ve a alguien con medicinas, le pregunta por su salud. Si alguien intenta descifrar el horario de los autobuses, ella le ayuda, y a los que no conocen la zona les indica dónde están los lugares de interés. Después de escuchar a la gente con atención, Hiroko aprovecha para ofrecerles las revistas. A menudo se encuentra con las mismas personas, de modo que también puede hacer revisitas.

Myanmar

Lazaru era un narcotraficante. Su vida estaba marcada por las drogas, los asesinatos y los vicios de todo tipo. Sin embargo, cuando una precursora le enseñó con la Biblia que el nombre de Dios es Jehová, Lazaru reconoció enseguida la verdad y aceptó un estudio bíblico. Aunque el estudio se prolongó por algún tiempo, su progreso espiritual  fue constante. Pero lo más difícil fue romper con su estilo de vida anterior. Cuando les dijo a sus colegas que los iba a dejar, estos se pusieron muy nerviosos, pues Lazaru sabía demasiado sobre las operaciones de tráfico de drogas. En varias ocasiones enviaron matones para que acabaran con él, pero Lazaru se las ingenió para escapar. Finalmente se mudó a otra zona, y tanto él como su esposa se bautizaron.

Taiwán

Algunos publicadores se detuvieron un instante frente a una cafetería que tenía un curioso nombre: Cafetería El Libro de Esdras. Intrigado, uno de los hermanos le preguntó al propietario por qué le había puesto ese nombre. El señor le contestó que siempre había admirado el fervor de Esdras por la adoración verdadera. Durante muchos años había asistido a la iglesia, pero hacía poco había dejado de hacerlo, ya que su esposa, que es vietnamita, no entendía los sermones. El publicador se ofreció a regresar con una Biblia en vietnamita, y el matrimonio se alegró muchísimo al recibirla aquella misma tarde. Toda la familia ha empezado a estudiar la Biblia.

India

En una población donde hay mucha oposición a nuestro ministerio, cinco hermanas fueron encarceladas durante cuatro días por participar en la predicación. En un principio, una de las funcionarias de la prisión fue grosera con ellas y les advirtió que no predicaran en la cárcel. Sin embargo, su actitud se suavizó conforme pasaban los días y observaba lo amables y amorosas que eran. Por ejemplo, cuando los hermanos les llevaron fruta y otros alimentos, ellas los compartieron con las demás internas y con la funcionaria. Una noche, esta oyó a las cinco publicadoras comentar algunos aspectos del libro Acerquémonos a Jehová. Enseguida empezó a participar en sus conversaciones, sentada en una silla junto a la puerta de la celda. Ella perdió un familiar precisamente el día que las hermanas salieron de prisión, de  modo que estas tuvieron la oportunidad de consolarla con la esperanza de la resurrección.

Anteriormente, otra funcionaria les había preguntado cuál era el delito que habían cometido. Una de ellas le explicó que la predicación se consideraba erróneamente proselitismo religioso ilegal. Impresionada, la mujer les dijo: “A pesar de su situación, ustedes hablan con tanta serenidad... Yo tengo muy mal genio, y ante ustedes me siento avergonzada. Por favor, cuando hable con rudeza, díganmelo, y enséñenme a expresarme como ustedes. No entiendo por qué han metido entre rejas a personas así”. Siempre que tenía un rato libre se reunía con las hermanas y les decía: “Explíquenme más de la Biblia. Me tranquiliza el corazón”. A dos internas acusadas de asesinato también les impresionó lo que la Biblia enseña. Las hermanas les predicaron con cautela a estas y a otras reclusas. Ahora que ya han salido en libertad, están buscando maneras adecuadas de avivar el interés de las personas que conocieron en la cárcel.

Indonesia

Resmawati, que es precursora especial, había terminado de predicar y estaba a punto de volver a su casa cuando una mujer la invitó a su hogar para hablar de la Biblia. Cuando Resmawati regresó tres días después, la mujer  empezó a llorar y a hablarle de su violento esposo. Nuestra hermana le leyó Hebreos 4:12 y le dijo que estudiar la Biblia puede hacer que muchas cosas cambien. Le contó la experiencia de Tony, que apareció en el Calendario de los Testigos de Jehová 2003. La mujer se interesó y le pidió un calendario. Resmawati se lo llevó en la siguiente visita, en la que también se inició un estudio con el libro Enseña. Cuando regresó, el esposo de la mujer le preguntó si podía unirse al estudio. Había leído la experiencia de Tony en el calendario, y le había impresionado mucho. Por casualidad, su nombre también era Tony, y la actitud y la conducta del Tony mencionado en el calendario antes de conocer la verdad eran muy parecidas a las suyas. Cuando vio la experiencia en el calendario, dijo a su mujer y a sus hijos: “Es mi nombre, ¿no? ¿Cómo lo averiguó la predicadora para escribir sobre mí?”. Su esposa le contestó: “Los Testigos no saben tu nombre. Y aunque así fuera, no habrían podido ponerlo tan rápido en un calendario... ¡y mucho menos en un calendario del 2003 y no del 2007!”. Al ver el repentino interés de su esposo, le preguntó con tacto: “¿Quieres ser como el Tony del calendario?”. La inesperada respuesta del esposo fue: “Me gustaría intentarlo”. Al igual que el Tony del calendario, el Tony de Indonesia ha enderezado su vida, se ha cortado la melena y ha mejorado su apariencia. Toda la familia sigue estudiando la Biblia.

Malasia

En algunas zonas de Borneo, los hermanos utilizan las imágenes obtenidas por satélite, disponibles en Internet, para localizar viviendas. Su informe dice: “Esta herramienta nos ayuda a localizar hogares en la selva tropical. Algunos ‘techos’ resultan ser corrales de cabras, así que cuando llegamos, nos reímos de haber ido a predicarles a ‘las cabras’. Pero el caso es que bajo algunos techos sí viven familias. Jamás habíamos predicado en ese territorio montañoso. Puesto que la selva es muy espesa y es difícil seguir los senderos, las imágenes de satélite nos ayudan a orientarnos”.

 Europa

PAÍSES Y TERRITORIOS 47

HABITANTES 732.610.687

PUBLICADORES 1.533.790

ESTUDIOS BÍBLICOS 749.911

Hungría

Una hermanita de 12 años relata: “Me bauticé hace nueve meses, y llevo tres de precursora auxiliar. Mi madre me ayuda un montón. Muchos me preguntan que cómo puedo ir a la escuela y al mismo tiempo ser precursora auxiliar, pero pienso que sin la escuela se me haría muy difícil efectuar mi ministerio. Aprovecho los recreos para predicar, y hablo regularmente de la Biblia con cinco de mis compañeros; incluso a dos jovencitas les doy estudio. Así que puedo ver la bendición de Jehová. No siento que ser precursora sea una carga pesada; al contrario, es una fuente de alegría. Mi meta es ser precursora regular, como mi mamá. Quiero trabajar a tiempo completo para Jehová”.

Gran Bretaña

Susan comenzó a estudiar la Biblia en 2001, y así continuó durante unos dos años. Pero se le hacía difícil dejar de fumar, a pesar de que lo intentó muchas veces. Así que prefirió abandonar el estudio, aunque siguió yendo a las reuniones. Después de cuatro años, se puso a pensar que era hora de salir de su estancamiento espiritual. Le pidió ayuda a los hermanos de la congregación y empezó a estudiar de nuevo, esta vez con el libro Acerquémonos a Jehová. El análisis detallado que esta publicación hace del amor que Jehová nos tiene y de cómo podemos corresponderle la impactó tanto que hizo cambios drásticos en su vida. Ocho semanas después ya había abandonado por  completo el cigarrillo. Susan considera que esta publicación le enseñó a confiar en Jehová. Ha seguido progresando, y ya simbolizó su dedicación a Jehová mediante el bautismo en la Asamblea de Distrito “¡Sigamos a Cristo!”.

Estonia

Helgi es una estudiante de 17 años que no vivía con ninguno de sus padres divorciados y que mostró interés en la verdad, por lo que comenzó a estudiar la Biblia. Al principio no asistía a muchas reuniones, pues le dedicaba mucho tiempo a cantar en un conjunto musical. Pero a medida que su aprecio por la verdad creció, empezó a hacer cambios en su vida. Entre otras cosas, les explicó a sus compañeros del grupo por qué no podría trabajar en las noches de reunión. Se matriculó en la Escuela del Ministerio Teocrático y llegó a ser publicadora no bautizada. Por esos días se había inscrito en un concurso nacional de canto, en el que el ganador firmaría un contrato con una reconocida casa discográfica. Muchos participantes quedaron  eliminados en las pruebas, pero Helgi se ganó de inmediato la aprobación de los jueces y pasó a la siguiente etapa del concurso. No obstante, esta se celebraría la misma noche en que le tocaba presentar su primer discurso en la escuela. ¿Qué iba a hacer? Su madre, que no es testigo de Jehová, le sugirió que cancelara el discurso o que lo cambiara de fecha. Helgi le respondió que no se trataba solo de dar un discurso, sino de qué asuntos tenían más importancia: los espirituales o los materiales. Después de pensar seriamente sobre la cuestión, decidió presentar su discurso y no asistir a la competencia de canto. Su madre respetó la decisión.

Pasó el tiempo. Un reportero asistió a la Asamblea de Distrito “¡Sigamos a Cristo!” con la intención de grabar una noticia sobre el programa y el bautismo. Cuando Helgi entró a la piscina de bautismo, el reportero se acercó para filmar, y luego la entrevistó. Aquello apareció en las noticias de la tarde. También aparecieron escenas de Helgi en una eliminatoria del concurso de canto, en el momento de su bautismo y en la entrevista, en la que decía con una radiante sonrisa: “Esta es la mejor decisión que he tomado en mi vida”.

Bulgaria

Ivelin es un recluso de la cárcel de Belene. Un día escribió una carta a la sucursal de los testigos de Jehová, en la que decía: “Por casualidad encontré aquí en la prisión una revista La Atalaya, y me han surgido muchas preguntas que necesito que me contesten. Estoy arrepentido de mis pecados, y quiero cambiar espiritualmente desde adentro. Me gustaría pedirles algo, pero quizás no sea fácil que me lo concedan; a lo mejor no es posible. ¿Podrían escribirme para que yo aprenda más de Jehová Dios? No sé si me contestarán, pero tan solo saber de Jehová me hace feliz. Quiero saber más, no solo por mí, sino para que otros compañeros también conozcan de estas cosas. No se  preocupen si no me pueden responder; algún día saldré de aquí, y yo los voy a ir a buscar”. Los hermanos rápidamente atendieron a esta persona interesada, y al tiempo presente están estudiando Ivelin y otros nueve reclusos.

Portugal

Jana, que es precursora especial, cuenta: “Un día, al salir del metro, vi a un señor de origen chino y decidí acercarme para hablarle de las buenas nuevas. El hombre se sorprendió de que yo hablara chino, pero me dijo que iba de camino al hospital porque a su esposa le iban a hacer una cesárea dentro de poco. Como ni él ni ella hablaban portugués, el hospital les había dicho que consiguieran un intérprete. El hombre estaba desesperado y me pidió que lo ayudara. Al día siguiente, ya en el hospital, los doctores me dijeron que me pusiera la bata de cirujano para que entrara a la sala de partos con la señora. Una vez adentro, le sujeté la mano y, mientras la operaban, ella me hizo muchas preguntas de la Biblia y de nuestra labor. La muyer tuvo una niña preciosa, y estaba tan agradecida conmigo que me pidió que escogiera un nombre para su bebé. Tras pensarlo unos instantes, escogí Sara. A ella le encantó el nombre, pero también se le despertó la curiosidad por saber más de este personaje bíblico y de su Dios. Cuando salimos del hospital, me ofrecí para darles clases de la Biblia en su hogar. Antes, ni la señora ni el esposo habían querido hablar con los Testigos, pero su actitud negativa cambió gracias a la ayuda que les di. Así que aceptaron mi oferta sin dudarlo, y ya están asistiendo a las reuniones”.

Eslovaquia

Un matrimonio de precursores especiales conoció a dos jóvenes de Afganistán que mostraron interés en las Santas Escrituras durante su corta estancia en el país. Los precursores se vieron con ellos varias veces y les dieron una Biblia y el libro ¿Qué enseña realmente la Biblia? Además, les enseñaron cómo se dirige un estudio bíblico para que pudieran estudiar entre ellos y con otras personas.

 Oceanía

PAÍSES Y TERRITORIOS 30

HABITANTES 36.829.259

PUBLICADORES 96.691

ESTUDIOS BÍBLICOS 51.122

Nueva Zelanda

Paul estaba predicando de casa en casa cierto día por la tarde. Llegó a una puerta, salió una señora, y él le ofreció un folleto. La señora dijo que esa misma mañana le había hecho una oración a Jehová, usando el nombre divino, para pedirle que le mandara a alguien a visitarla. La razón era que hacía poco una pariente le había dicho que ella necesitaba “la verdad”. “Tres horas después —dice Paul—, yo estaba tocando a su puerta, a una hora que normalmente ella no estaría en casa.” La señora aceptó de buena gana el estudio de la Biblia que Paul le ofreció, y está progresando bien.

Australia

Armando y Elvira son un joven matrimonio que vive en Timor Oriental, país que atiende la sucursal de Australia. Debido a los constantes ataques que sufrió su comunidad en 2006 por parte de cierto grupo étnico, la vida de Armando y Elvira peligraba, así que tuvieron que huir a un campo de refugiados. Al partir, solo se llevaron dos cosas: la Biblia de Armando y el folleto ¿Qué exige Dios de nosotros? Cuando lograron restablecer contacto con los hermanos, el joven matrimonio comenzó a estudiar dos veces por semana y a asistir a las reuniones de la congregación. Armando también les predicó a sus parientes, que viven en un pueblecito a unas cuatro horas y media de Dili. Como su familia mostró interés en el mensaje del Reino, consiguió que unos precursores de Baucau viajaran hora y media para seguirlos  ayudando. Más de veinte personas se reunieron para escuchar a los precursores. El padre de Armando, hablando en nombre del grupo, dijo que todos estaban dispuestos a deshacerse de sus imágenes, pero querían saber si seguirían protegidos contra los espíritus malvados. Los precursores les aseguraron que Jehová de verdad les ayudaría, así que todos tiraron sus imágenes. Ahora hay más de veinticinco personas de aquel pueblecito estudiando la Biblia. Armando espera bautizarse pronto, y Elvira está progresando a buen paso.

Guam

En la isla de Saipán, que se halla bajo la superintendencia de la sucursal de Guam, una hermana se llevó una alegre sorpresa: se enteró de que su esposo, que antes se oponía, había estado leyendo a escondidas las publicaciones que ella dejaba por la casa. No solo había leído La Atalaya y ¡Despertad!, sino también algunos Anuarios y el libro El secreto de la felicidad familiar. ¿Cómo lo supo su esposa? Un día sucedió algo sumamente extraño: el hombre la llamó a ella y a sus cinco hijos para “una importante reunión de familia”, según dijo él. Pues bien, el señor quería darles consejos sobre el matrimonio a sus tres hijas y hasta había hecho un cartel que detallaba los requisitos para sus futuros esposos. Resulta que le había impresionado tanto la biografía de Sheila Winfield da Conceição (en La Atalaya del 1 de noviembre de 2006), que se había basado en ella para sacar su lista de los requisitos para un buen esposo. El hombre les dijo a sus hijas que se casaran solo con alguien que fuera testigo de Jehová, que amara a Jehová y que supiera de la Biblia más que ellas, pues era su deseo que experimentaran la misma felicidad de la que había leído en la biografía. Aquello conmovió a la familia; solo esperan que algún día su padre sirva con ellos a Jehová.

Samoa

Recientemente, un hermano y su esposa fueron asignados de una sucursal a la isla de Samoa. El primer día que él salió al ministerio, ofreció el libro ¿Qué enseña realmente la Biblia? en la primera casa que tocó. Para su sorpresa,  lo invitaron a pasar. Sin embargo, la dueña de la casa, una empresaria jubilada, le dijo tras una pausa: “Solo puedo dedicarle cuarenta y cinco minutos”, una respuesta que él jamás había escuchado. El estudio se comenzó de inmediato. Cuando el hermano y su esposa volvieron a la semana siguiente, la señora los recibió con la Biblia y el libro Enseña en mano. Hay muchas probabilidades de que el estudio continúe celebrándose.

Islas Salomón

Emily es la única precursora regular y la única Testigo de su zona, en la isla de San Cristóbal. De los veinte estudios bíblicos que dirige, tres ya predican, incluidos sus padres. Para la Conmemoración, Emily contó con la ayuda de Lance y Diane, una pareja de siervos internacionales que se ofreció para ayudarla. Con ese fin, esta pareja tomó vacaciones y viajó catorce horas en un pequeño y atestado barco de carga. “Al llegar a nuestro destino —relata Lance—, lo único que queríamos era irnos a dormir, pero pensamos que sería mejor ver primero al jefe del pueblo y explicarle el propósito de nuestra visita. Así lo hicimos, y él nos dijo: ‘Hay muchas personas que no han recibido esta invitación. ¿Pueden asistir?’. Lógicamente, le garantizamos con una amplia sonrisa que sería un placer recibirlos.

”Cerca de la hora para comenzar la reunión, había solo dos mujeres y algunos niños sentados. Pero vimos afuera a muchas personas rondando el lugar, cerca de unos árboles, así que nos apresuramos a llamarlas. Cuando oscureció, encendimos una pequeña planta eléctrica y tuvimos luz. Todos los presentes estuvieron muy atentos durante la Conmemoración.” En total asistieron unas ciento treinta personas, entre quienes estuvo un ministro adventista  que pidió un ejemplar de la Traducción del Nuevo Mundo, porque era mucho más clara que la Biblia que él usaba. En esa ocasión tan especial se comenzaron cinco nuevos estudios.

Papúa Nueva Guinea

Dos pueblos en las afueras de una pequeña ciudad se hallaban muy dominados por la Iglesia Católica, lo que hacía difícil predicar. Pero hace poco los hermanos visitaron a los representantes de esas comunidades para explicarles nuestra obra y la razón por la que nos gusta hablar con toda la gente. Por casualidad, en una de las comunidades acababan de tener una reunión para ver cómo ayudar a los jóvenes a mejorar su conducta. Los hermanos les dijeron a los representantes que aprender de la Biblia sería de mucho beneficio.

Para comprobarlo, los representantes permitieron a los hermanos predicar abiertamente, y varios jóvenes comenzaron a recibir clases bíblicas. A partir de entonces, su conducta mejoró, y como la gente del pueblo percibió esa mejora, dejó de oponerse a nuestra obra. Poco a poco se fueron uniendo a los estudios tanto padres como amigos de los jóvenes, entre ellos la hija de un catequista que antes había amenazado a los hermanos. Arrepentido, este señor le dijo a su hija: “¡Qué equivocado estaba! Solo espero que Dios y los testigos de Jehová perdonen mi pecado”. En estos dos pueblos hay ahora veintisiete personas que asisten con regularidad a las reuniones. Por lo menos cuatro ya están bautizados y son precursores auxiliares. Tienen la meta de ser precursores regulares.

[Ilustración y mapa de la página 48]

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[Ilustración]

El faro del cabo de Hornos

[Mapa de la página 63]

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San Cristóbal

[Ilustración de la página 44]

Estudio de La Atalaya en la aldea de Antanandava (Madagascar)

[Ilustración de la página 46]

El grupo de Pawaga (Tanzania), estudiando el libro Enseña

[Ilustración de la página 49]

El Estudio de Libro de Congregación en Sixaola (Costa Rica)

[Ilustración de la página 50]

Ramiro, con un ejemplar del libro Enseña

[Ilustración de la página 53]

Hiroko predicando en una parada de autobuses

[Ilustración de la página 58]

Helgi (a la derecha) presentando un discurso en la Escuela del Ministerio Teocrático

[Ilustración de la página 64]

Lance, Diane y Emily