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Otros países donde los testigos de Jehová trabajan bajo dificultad

Otros países donde los testigos de Jehová trabajan bajo dificultad

Otros países donde los testigos de Jehová trabajan bajo dificultad

Lo que ha estado aconteciendo mundialmente en cuanto a aumento en el número de publicadores del Reino ha sucedido, como promedio, en todos los países donde los testigos de Jehová trabajan bajo dificultad. De hecho, han disfrutado de un aumento de 6,5 por ciento. Es muy difícil obtener informes exactos, pero durante todo el año hemos tenido informes de que 9.766 personas recién interesadas se bautizaron, simbolizando su dedicación para hacer la voluntad de Jehová. Es maravillosa la manera en que opera el espíritu santo de Jehová en sus siervos sin importar dónde estén en la Tierra. Aunque los siervos de Jehová en estos países en que hay dificultades no mantienen comunicaciones estrechas con la organización visible de Jehová en otras partes del mundo, sí se las arreglan para recibir alimento espiritual, y, por supuesto, tienen bien profundo en su corazón el deseo de predicar las buenas nuevas del reino de Dios. Es con verdadero gozo que presentamos algunas experiencias de la actividad de algunos de la grande muchedumbre de testigos fieles que trabajan en países verdaderamente difíciles.

BULGARIA

La situación no ha mejorado para nuestros hermanos en Bulgaria. No es posible la predicación pública. Hay solo unos cuantos hermanos en Bulgaria. Pero a pesar de la situación difícil, efectúan alguna predicación, usando la Biblia y lo poco que tienen en lo que se refiere a las publicaciones de la Sociedad en su propio idioma. Como resultado de esto, algunas personas de la población amigable de Bulgaria se interesan en la verdad. Solo el tiempo dirá, cuando haya pasado la “tribulación grande,” cuántas personas en Bulgaria se habrán declarado de parte del reino de Jehová, a pesar de las muchas dificultades causadas por el gobierno.

CHECOSLOVAQUIA

Una hermana condujo un estudio bíblico con una familia interesada por año y medio. Con el transcurso del tiempo supo que la esposa había estado reñida con una señora de la casa vecina por largo tiempo. Una vez cuando la hermana fue a conducir este estudio bíblico, por casualidad se encontró con la otra señora y le testificó acerca del Reino. Sorprendentemente, esta señora inmediatamente mostró profundo interés en el mensaje, y la hermana comenzó un estudio bíblico con ella inmediatamente. La hermana no visitaba a ambas señoras el mismo día, para evitar complicaciones. No obstante, las complicaciones se presentaron. Cierto día la señora con la cual se celebraba el primer estudio le dijo a la hermana: “He notado que usted también visita a nuestra vecina, ¿verdad?” “Así es,” contestó la hermana. “Pues, entonces, por favor no nos visite más. Ya no quiero sus visitas,” fue la reacción de la señora. Todo lo que la hermana dijo entonces fue en vano. El estudio fue descontinuado. Ahora nuestra hermana concentró sus esfuerzos en el segundo estudio y esta señora progresó casi día por día. Cuando llegaron al tema de la oración, se le mostró que nuestras acciones tienen que estar en armonía con nuestras oraciones. Al llegar a este punto la señora percibió que tenía que corregir algo en su vida, a saber, sus relaciones con su vecina. De modo que tomó la iniciativa y fue a donde la otra señora y le mostró buena voluntad para resolver la riña. Lo logró. No solo quedó terminada la riña, sino que la señora que en realidad había sido la primera en tener un estudio bíblico dijo: “Ahora veo lo que he perdido por haber dejado de estudiar.” El primer estudio se reanudó. Hay paz entre las dos señoras y ambas van progresando muy bien hacia la madurez. En verdad, la verdad tiene fortaleza unificadora.

Un hermano manejaba su auto a través de una aldea de gitanos cuando el auto se le detuvo. Él necesitaba ayuda, y uno de los aldeanos, un conductor de un tractor, estuvo dispuesto a reparar el automóvil por cincuenta coronas. Unos curiosos vinieron a ver y, mientras se trabajaba en el auto para repararlo, el hermano trató de darles un testimonio. Por lo que dijo los que oyeron se dieron cuenta de que era testigo de Jehová. Le preguntaron dónde vivía. Les dio el nombre del pueblo cercano. Les impresionó favorablemente lo que oyeron y le dijeron que todas las familias gitanas de ese pueblo también son testigos de Jehová y que desde que empezaron a leer la Biblia habían llegado a ser gente muy buena. Y súbitamente el hombre que reparaba el automóvil se volvió al hermano y le dijo: “Si usted es testigo de Jehová le repararé su automóvil gratis.” Y rehusó todo pago cuando el hermano quiso pagarle su trabajo. Esto muestra que, aunque hay mucho odio en el mundo contra los testigos de Jehová, también hay muchas personas que son amigables porque observan la buena conducta y las buenas obras de los siervos de Jehová.

ALEMANIA ORIENTAL

Los publicadores han estado ocupados predicando y enseñando a hacer discípulos y sus esfuerzos han sido muy bendecidos. Muchas personas se dan cuenta de la futilidad de seguir confiando en las promesas de los hombres para un futuro mejor. Cuando les llega el mensaje del Reino están dispuestas a escuchar la verdad.

Una muchacha de dieciséis años que iba a la escuela secundaria aprendió la verdad. Después de estudiar por solo tres meses comprendió que Dios exige de nosotros devoción exclusiva y que los verdaderos cristianos no aprenden más la guerra. De modo que le pidió a su maestro que la excusara del entrenamiento con rifle por razones de conciencia. Tuvo que defender su decisión delante del director de la escuela el día siguiente. Este le gritó, pero aun después de una discusión de dos horas no pudo hacer que ella cambiara de opinión. Entonces ella entregó su renuncia de la FDJ, una organización política de la juventud comunista, y esto resultó ser una prueba aun mayor. Le hablaron por horas, le ofrecieron una buena posición social y un hogar donde pudiera estudiar para llegar a ser veterinaria. Por medio de su amiga trataron de convencerla de dejar su nueva fe. Entonces la escuela colocó en el tablero de noticias de la escuela un resumen de su renuncia para que los compañeros escolares se expresaran en cuanto a ésta. Pero ninguna de estas presiones hizo que ella cediera. Finalmente hicieron que dejara la escuela este año, por “incompatibilidad con la escuela debido a su inactividad social.” Ahora ha emprendido el ministerio y espera bautizarse.

Otra situación típica que muestra las circunstancias bajo las cuales se predica el mensaje y lo rápidamente que se esparce la informa una publicadora. Ella tenía un estudio con una joven señora que pronto empezó a hablar a sus compañeros de trabajo acerca de las cosas excelentes que aprendía. Una joven mostró algún interés. Quiso asistir al estudio, pero la Testigo pensó que sería mejor que no viniera a aquel estudio antes de que ella verdaderamente la conociera y por eso sugirió visitarla en su propio hogar. La señora tenía algunas excusas, pero entonces la hermana se enteró de que el esposo de la señora también estaba interesado. ¿Qué se había de hacer ahora? La hermana le pidió a su esposo que testificara inicialmente en el vecindario donde vivía aquella nueva pareja. Él halló verdadero interés en aquella familia y se comenzó un estudio bíblico con ellos. Pero muy pronto la fe de ellos en Dios y su Palabra fue sometida a prueba. Acababan de llegar al capítulo dos del libro La verdad cuando la hermana carnal de la señora los visitó. Esta no había estado con ellos por varios años. Pero su objetivo era solo el de impedir que continuaran su estudio de la Biblia. Pero esto fue en vano. Pocos días más tarde un miembro de la policía los visitó para inquirir con quién estaban estudiando y dónde vivía aquel hombre. Les señaló que aquel estudio era ilegal. Todos estos esfuerzos solo aumentaron el interés de estas personas. Habían aprendido en su estudio que los vecinos y amigos que quieren impedir que estudiemos no pueden darnos vida eterna. Mientras tanto la señora consiguió interesar a otra compañera de trabajo y al esposo de ésta. Un estudio bíblico con ellos fue el resultado de la segunda revisita a éstos.

El libro La verdad ha ayudado a muchas personas a progresar rápidamente. Un señor abrió la puerta en la visita inicial que le hizo un publicador. El Testigo empezó su presentación, pero el amo de casa lo interrumpió coléricamente, diciendo: “Mire, déjeme. Yo no quiero tener nada que ver con la iglesia. ¿Qué le parece la situación en Irlanda? Allí los cristianos están peleando unos contra otros.” El publicador pudo mencionar que hay cristianos que no participan en estos conflictos. El amo de casa dijo que ésos eran los testigos de Jehová. “Pues, mire, yo soy uno de ellos,” respondió el publicador. El hombre lo invitó a entrar. El publicador comenzó un estudio bíblico con el hombre usando el libro La verdad en la segunda visita. Tanto el esposo como la esposa y tres de sus cinco hijos asisten al estudio. El capítulo dos hizo que presentaran su renuncia a la iglesia. El capítulo tres hizo que quitaran las imágenes religiosas que tenían colgadas en las paredes de su casa. Ya no comen morcilla, y dejaron de celebrar las Navidades aunque la abuela protestó vigorosamente. La señora ha comenzado a participar en la obra de dar testimonio. Cuando llegaron las elecciones políticas de hace poco se pusieron de parte de la neutralidad cristiana, aunque eso significó una prueba dura para ellos porque se ejerce gran influencia en la gente para que vote. Esperan bautizarse para simbolizar su dedicación a Jehová.

Dos jóvenes hermanas usaron sus vacaciones de la escuela para predicar el mensaje en un territorio donde hay mayor necesidad de ayuda. Como no estaban familiarizadas con el territorio, sin saberlo visitaron la casa del policía de la aldea. Le testificaron a su esposa y entonces él entró en la casa. Las hermanas le dijeron que eran testigos de Jehová y deseaban hallar a las personas de aquella aldea que todavía creían en Dios y en la Biblia. Él investigó sus tarjetas de identificación personales. Les expresó sus mejores deseos y las dejó seguir adelante. Pero las cosas no resultaron tan fáciles como ellas pensaban. Otro oficial de la policía llamó a la policía secreta, y al mediodía las hermanas fueron arrestadas y transportadas al cuartel. Predicaron la verdad a todos los miembros de la policía a quienes vieron y pudieron dar un buen testimonio a varios oficiales. Cada hermana fue interrogada por separado por tres horas y media. Trataron de amenazar a las muchachas, de intimidarlas; les gritaron, entonces se mostraron bondadosos de nuevo, y así por el estilo. Finalmente los oficiales decidieron echarlas del condado. El jefe dijo que nunca había experimentado tal cosa, y una hermana respondió que él también necesitaba oír las buenas nuevas para tomar una decisión acerca de su propio futuro. Las hermanas expresaron su aprecio a los oficiales por haberles podido predicar el mensaje de Dios y señalaron al sabio consejo que dio Gamaliel de evitar la posibilidad de estar trabajando contra Dios.

Mientras un hermano estaba en una ciudad para efectuar cierto negocio, un joven ciego se le acercó, pidiéndole que lo cruzara al otro lado de la calle ancha. El hermano sintió lástima por el joven y comenzó a hablarle acerca del tiempo maravilloso en el cual todas las dolencias de la humanidad que los médicos no pueden curar serán curadas bajo el régimen del Reino de Cristo. El hombre convino en aquello, y el hermano le dio un testimonio cabal. Prometió visitar al hombre, que vivía en una institución para ciegos. Lo hizo varias veces y después de un tiempo entregó la dirección de la revisita a un publicador que vivía más cerca de él. Este pudo establecer un estudio corriente con aquel joven. El hombre cortó sus conexiones con la religión falsa y ahora espera simbolizar su dedicación en el futuro cercano.

HUNGRÍA

A veces la persecución viene de manera muy cruel de parte de miembros de la propia familia de uno. Esto sucedió en una familia en Hungría. En Hungría, como en otros países, un buen número de jóvenes está uniéndose a la organización de Dios. Dos hermanos carnales, de diecisiete y dieciocho años de edad, con frecuencia visitaban a su abuela y ella les testificaba acerca del reino de Jehová. Esa señora había estado estudiando con los testigos de Jehová por muchos años y sin embargo no estaba dedicada. De modo que estos muchachos no se satisficieron con lo que oyeron de ella. Por lo tanto, una joven hermana comenzó un estudio con ellos utilizando el libro Paraíso. La verdad impresionó mucho a los jóvenes y por eso cierto día vinieron a casa y les dijeron a sus padres que habían decidido hacerse testigos de Jehová. El padre de ellos, un funcionario del correo, se indignó tanto que tomó un pedazo de cable eléctrico, y poniendo a un lado todo sentimiento de misericordia, comenzó a golpear brutalmente a sus hijos. La desagradable escena duró por un tiempo considerable, de modo que los muchachos quedaron inconscientes. El padre consiguió una cubeta de agua fría y les echó el agua encima; entonces se puso a golpearlos de nuevo después que ellos habían vuelto en sí. El padre hasta rompió el mango de una pala encima de uno de los dos muchachos. Pero los dos jóvenes permanecieron firmes. Ellos tenían la verdad que está apoyada por el poder del espíritu invisible de Jehová. Entonces el padre comenzó a llorar e instó a sus hijos a no tener nada que ver con esta nueva religión. Esto tampoco produjo resultados, de modo que el padre los echó de su casa y entonces se denunció a sí mismo y a sus hijos a la policía.

El padre entonces alquiló a sus parientes para atacar a la hermana que estudiaba con los jóvenes. La joven hermana fue amenazada, insultada y golpeada, pero un hermano que vivía en la misma casa se interpuso y terminó todo esto. Los dos muchachos encontraron dificultades en su lugar de empleo y la policía les causó molestia. Pero tenían buen ánimo, mientras que sus padres tuvieron que consultar a un médico de casos nerviosos, puesto que su condición nerviosa se había hecho muy mala. Le dijeron al médico que su condición se debía a la “enfermedad mental” de sus hijos. El doctor les dijo a los padres que le enviaran sus hijos a él para examinarlos. Los muchachos se presentaron para ver al doctor. Le hablaron con convicción acerca de su esperanza maravillosa, basada en el fundamento sólido de la Palabra de Dios. Después de oír esto el doctor sostuvo que ellos eran perfectamente normales y sanos. Les dijo que tenían derecho legal a tener la religión que quisieran, puesto que ya tenían más de dieciséis años de edad. Esto sorprendió e impresionó a sus padres y hasta cierto punto cambiaron de opinión. Admitieron de nuevo a los muchachos en el hogar y ellos muestran amor y respeto a sus padres, y obediencia excepto en asuntos que tienen que ver con principios de su “nueva religión.” El estudio continúa.

POLONIA

En este país se ha desarrollado una situación particular. En muchos lugares los publicadores pueden visitar a la gente en sus hogares sin que la policía los moleste, y ellos aprecian el que las autoridades les den trato tan considerado. Los oficiales gubernamentales a veces llaman a los publicadores para hablarles bondadosamente acerca de relaciones mejoradas y más tolerancia para con los testigos de Jehová. Sin embargo, en el transcurso del año varios otros publicadores fueron arrestados y encarcelados. Entre éstos hay individuos que sufrieron en los campos de concentración de Hitler y bajo interrogación y en prisiones durante la dura era estalinista debido a su fe como cristianos.

Algunos de los hermanos arrestados fueron sometidos a juicio por su actividad cristiana. Los abogados de la defensa se esforzaron por mostrar en el tribunal lo absurdo de aquellos juicios. A un hermano se le había sentenciado a cuatro años y seis meses de prisión. Al apelar, su caso fue oído de nuevo en el tribunal superior. El abogado le dijo al tribunal: “Dejemos de engañarnos. Los testigos de Jehová han estado en existencia por cien años ya. ¿Puede considerarse su existencia todavía como cosa secreta?” Llamó atención a sus elevadas normas morales y su buena influencia en la comunidad y solicitó que se pusiera en libertad al hermano. El juez indicó que estaba dispuesto a concordar, pero . . . La sentencia fue reducida, sin embargo, a dos años y seis meses y, debido a una amnistía, el hermano habría de servir solo un año y tres meses.

Otro incidente que demuestra lo que piensan muchos funcionarios personalmente acerca de nuestra obra se informó desde Varsovia. Un acusador público vio a su amigo leyendo un ejemplar del número local de la revista La Atalaya. “¿Qué estás leyendo? ¿No sabes que eso está proscrito?” Su amigo le dijo: “¿Qué me importa que sea legal o ilegal? Lo importante es que es buena materia.” El acusador dijo: “Sigue leyéndola; léela. Yo también la leo.”

Una joven había mostrado algún interés cuando un publicador la visito inicialmente. Él hizo una revisita y le presentó el libro La verdad desde el mismo principio. Cuando comenzó a leer del libro, el hermano de la joven se presentó desde su cuarto y le dijo al publicador que no necesitaban aquella instrucción. El publicador respondió que la joven lo había invitado y él quería cumplir su promesa. Al continuar, el hombre trató de interferir de nuevo, pero entonces los padres lo calmaron, porque el libro les parecía muy interesante. El joven salió del cuarto. Pero después de un rato otro joven se unió al grupo que estudiaba, y poco después de eso, otro más. Finalmente el hermano de la muchacha entró de nuevo y comenzó a escuchar atentamente. El contenido del libro venció hasta el fuerte prejuicio de este hombre.

Un grupo de hermanos salió al servicio ministerial para predicar en una aldea un domingo por la mañana. Al mismo tiempo un grupo de investigadores del servicio de radio y televisión gubernamental entró en aquella misma aldea para localizar equipos que estuvieran funcionando sin haber sido registrados. Alguien le informó a la policía sobre la actividad de los hermanos. Cuando la policía llegó, ambos grupos habían completado ya su trabajo y estaban esperando en la parada de autobuses el siguiente autobús. Sucedió que la policía empezó a investigar la identidad del grupo que trabajaba con la radio. Después de haber investigado a varios de ellos y enterarse de por qué todos habían venido a la aldea, la policía terminó su investigación. Cuando pasaron cerca de los hermanos, uno de los policías le dijo a otro: “Estos no son gatos.” “Gato” es una expresión despectiva que quiere decir hereje y por lo común se usa como palabra abusiva para los testigos de Jehová. Así, quedaron ciegos y no vieron a la gente que buscaban.

RUMANIA

En Rumania nuestros hermanos están experimentando muchas dificultades. Hubo inundaciones que sumergieron vastas regiones del país, y debido a esto muchos de nuestros hermanos sufrieron pérdidas materiales. Además de eso, el gobierno rumano no ha detenido su persecución de los testigos de Jehová. En 1970 dos hermanos recibieron condenas de nueve y diez años. Parece casi increíble que a hombres honrados cuya única “ofensa” fue estudiar privadamente la Biblia y hablar a otros acerca de ella se les trate de esa manera. Sin duda el gobierno toma esa acción para asustar a los testigos de Jehová por todo el país. Un hermano de Rumania escribió en una carta: “En Rumania el Estado nos persigue severamente y hubo varias condenas, porque esparcimos el evangelio. Se nos ha torturado e insultado. A algunos de los hermanos les administraron drogas y debido a esto varios de ellos tuvieron que ser llevados a una clínica de enfermos mentales. Les imploramos que recuerden en sus oraciones a nuestros hermanos aprisionados. Sabemos que todo esto es una prueba que tenemos que aguantar. ¡Pero seguiremos predicando valerosamente las buenas nuevas según se manda en Mateo 24:14! ¡Mas de nuevo los instamos con todo nuestro corazón a no olvidarnos!”

TURQUÍA

El hecho de que los testigos de Jehová al predicar las buenas nuevas están haciendo una obra educativa en el verdadero sentido de la palabra se puede ver por la siguiente experiencia. Una hermana escribe: “Llegué a conocer a una musulmana que no sabía leer ni escribir. Aunque su familia había tratado muchas veces de enseñarle, no habían podido lograrlo. Por supuesto, después que empecé a hablarle acerca de la verdad le dije que deberíamos estudiar la Biblia juntas. No obstante, puesto que ella no sabía leer, progresaba muy lentamente. De modo que la animé a aprender a leer y escribir, de otro modo nunca podría probar su fe usando la Biblia. El entender plenamente que en realidad estaba aprendiendo la verdad le dio tanto estímulo para aceptar mi oferta de ayudarle a aprender a leer y escribir —además de aprender la verdad— que verdaderamente en un tiempo comparativamente corto aprendió a leer. Desde entonces siempre ha preparado sus lecciones muy bien y nunca pierde una oportunidad de reunirse con otros compañeros creyentes. Después de varios meses ha progresado tanto que ahora es publicadora y ha expresado el deseo de bautizarse en la siguiente oportunidad. Todo esto se le contó a su madre de edad avanzada, y especialmente el hecho de que ella ahora había llegado a ser cristiana. Por supuesto, esto perturbó muchísimo a su madre musulmana, de modo que ésta decidió ver a su hija inmediatamente. Cuando la madre vino, tuve una buena oportunidad de testificarle. Después de enterarse de todos los hechos, y particularmente después de ver a su hija tan bien educada, una cosa que la familia había tratado inútilmente de lograr por muchos años, quedó tan impresionada que dijo: ‘¡Lo primero que tengo que hacer ahora es regresar a mi aldea y dejarle saber a todo el mundo que mi hija ha hallado la religión verdadera!’”

La Palabra de Dios también puede efectuar un gran cambio moral en la vida de uno. Un hermano informa lo siguiente: “Cierto día mientras participaba en el ministerio del campo pasé cerca de un tradicional ‘kahvehani’ (un llamado café). Oí una gritería, y a través de espesas nubes de humo de cigarrillos y pipas pude ver a hombres jóvenes y viejos sentados alrededor de unas mesas, hablando, bebiendo y jugando a los naipes o mirando con ojos sin brillo al vacío. Sí, éste era el lugar donde yo había pasado gran parte de mi vida. Día tras día, a veces todo el día hasta tarde en la noche, yo me había sentado en un lugar como ése para ‘matar el tiempo,’ matándome a mí mismo lentamente también, porque mi salud iba empeorando continuamente. En aquel tiempo yo no tenía ninguna esperanza, y solo quería morir. Entonces, cierto día un Testigo vino a mi puerta y me habló acerca de la maravillosa esperanza que ofrece el reino de Dios a toda la humanidad. Aunque ciertamente el estudiar no era algo a lo cual yo estuviera acostumbrado, inmediatamente me di cuenta de que ésta era la verdad y solícitamente comencé a estudiar la Biblia. Ahora estoy bautizado y soy feliz, porque tengo una esperanza y un propósito en la vida. Por supuesto, mi cambio en la vida no pasó sin ser notado por mis amigos. Como resultado de ello, tengo excelentes oportunidades de testificarles, esperando que algún día por lo menos algunos de ellos cambien y emprendan el camino hacia la vida eterna. Ciertamente estoy muy agradecido a Jehová, quien me ha ayudado a librarme de mi vida inútil anterior.”

El que uno esté alerta en el servicio ministerial del campo hace de uno un instrumento útil en las manos de los ángeles. Una joven hermana relata lo siguiente: “Aunque era un día en que hacía mucho calor, decidí hacer una visita más. Al ver a una anciana sentada en una puerta abierta, le hablé, preguntándole dónde podía hallar cierta casa, pero ella no pudo ayudarme. Sin embargo, al ver que yo estaba muy cansada, dijo, sonriendo y de manera ambigua: ‘¿Quién sabe a quién busca usted realmente?’ Bueno, esto me dio una buena oportunidad de testificarle, explicando la obra que yo estaba haciendo. La señora, como de unos setenta años de edad, en verdad se alegró mucho de oír acerca de la promesa de un nuevo paraíso que pronto será establecido aquí en la Tierra. Se sorprendió de que, aunque había leído su Biblia desde la infancia, nunca había hallado tal esperanza maravillosa en ella. De modo que me invitó a entrar, y nuestra conversación continuó. Ahora estamos estudiando el libro La verdad cada semana y la señora va progresando bien. Realmente se había hallado a una ‘oveja’ perdida.”

Por nuestro informe del año pasado muchos de nuestros lectores todavía recuerdan el pleito que pendía contra trece hermanos. Tenemos que informar que esta causa todavía está pendiente porque todavía no se ha presentado el informe exigido de peritos en la ley. Mientras tanto, en varias ciudades se han hecho otros arrestos. Aunque los Testigos siempre fueron puestos en libertad después de varias horas de interrogatorio, en un caso se celebrará una vista ante un tribunal. En otros dos casos los jueces declararon sin lugar las acusaciones debido a que inmediatamente comprendieron que los testigos de Jehová son personas observadoras de la ley, que no se mezclan en la política ni hacen propaganda por ganancia egoísta ni para explotar a la gente como han acusado personas ignorantes y fanáticas. Por supuesto, ninguna de esta interferencia ha quitado celo ni gozo de nuestros hermanos, y ellos fielmente siguen adelante ayudando a la gente honrada a obtener una verdadera esperanza. Sus esfuerzos fueron bendecidos con un aumento de 8 por ciento durante el pasado año de servicio.

UNIÓN DE REPÚBLICAS SOCIALISTAS SOVIÉTICAS

Los hermanos de Rusia envían sus saludos desde el corazón a todos sus hermanos de toda la Tierra. Han tenido otro excelente año de progreso, a pesar de que las autoridades han hecho más esfuerzos para impedir que la gente aprenda la verdad. Trataron de hacerlo por medio de intensa propaganda atea y ejerciendo presión en los publicadores de las buenas nuevas. En general, hasta cierto punto se ha hecho más fácil hablar a la gente acerca de Dios y la Biblia. Varios años atrás todo el mundo evitaba estrictamente escuchar al que le hablara de estas cosas.

Las autoridades publicaron un nuevo libro de 216 páginas dedicado enteramente a los testigos de Jehová, uno especialmente preparado para equipar a sus propagandistas ateos y asustar a la población para que no se envuelva con los testigos de Jehová. El título del libro es “Los testigos de Jehová.” Se pinta a nuestra obra diciendo que hace buenas migas con el mundo capitalista occidental, ayudándolo por medio de nuestras doctrinas a mantener a las masas subyugadas bajo su agarro explotador y al mismo tiempo instigando a la gente de los países orientales a rechazar el sistema comunista. Como “prueba” de estas mentiras se usan citas falsificadas de nuestra literatura. Solo para darle una idea de lo descaradamente que tuercen la verdad, citamos aquí una declaración que dicen que salió de nuestro folleto Se ha acercado la curación de las naciones. Aseguran que dice: “Los E.U.A. son ese pueblo bendito cuyo Dios es Jehová.”

Pero esa manera insincera e irrazonable de tratar las autoridades con nuestra obra está teniendo el efecto opuesto. En vez de mantener a la gente alejada de los testigos de Jehová, apresuran la decisión de los que de algún modo se familiarizan con nosotros. Tan pronto como éstos descubren lo deliberadamente que sus autoridades les han dado información equivocada, no les es difícil ver dónde se ofrece la verdad y dónde se encuentra el error.

Hace unos años algunos hermanos se mudaron a una ciudad pequeña donde había más necesidad de ayuda. Su fe y esfuerzo han sido muy bendecidos. Ahora hay treinta personas asociándose con el grupo, y cada vez más personas continúan mostrando interés en las buenas nuevas. En otra congregación hay diez nuevos publicadores que se bautizaron este verano.

El fuerte prejuicio que se ha implantado en la mente de la gente será vencido por lo que aprendan acerca de los testigos de Jehová mismos. Unos Testigos visitaron a una familia en su hogar. La familia escuchó la presentación de los publicadores, pero entonces dijeron súbitamente que no querían aquel reino celestial e hicieron que los publicadores se fueran. Algún tiempo después los publicadores visitaron de nuevo a la misma familia. Esta vez la hija de dieciséis años estaba presente y mostró profundo interés. Cuando de nuevo se les dijo a los publicadores que se fueran, ella los siguió afuera y les pidió que regresaran. Sugirió que visitaran cuando su abuelo estuviera afuera en su trabajo. Los publicadores hicieron eso. Después de un tiempo la joven pensó que su abuelo debería oír aquello. “Él no es muy bueno con nosotros y también es un borrachín, pero quizás les escuche,” dijo. Cuando los publicadores le hablaron, él se enfureció y les dijo que se fueran de la casa. La muchacha entonces comenzó a asistir a las reuniones. Su abuelo llegó a saberlo, pero esto debe haber hecho que recapacitara. Le pidió a la muchacha que le enviara los publicadores a él de nuevo. Ahora mostró una actitud diferente para con la verdad. Verdaderamente estaba interesado. Cambió su manera de vivir y llegó a ser un publicador él mismo. Hizo mucho para ayudar a otros miembros de la familia, y todos ellos han llegado a ser cristianos dedicados.

Cierta noche una hermana que vivía en una casa cerca de un patio donde se colocaba la carga de una compañía de ferrocarril oyó un toque en la puerta de su casa, donde vivía con su hermana. Afuera en la oscuridad había un anciano. Él tenía que vigilar lo que quedaba de la carga de un vagón que los camiones no se habían llevado. Pidió algo que leer, porque tendría una noche larga. Había varias otras casas en el vecindario, pero este señor había tocado en la puerta de la casa de ella. La hermana comenzó a testificarle y le ofreció parte de su ejemplar escrito a mano de “Sea Dios Veraz” para que lo leyera. Él tomó el ejemplar y se fue. Después de un rato tocó de nuevo y pidió un ejemplar de la Biblia. La noche siguiente también tuvo que trabajar como velador y de nuevo habló a las hermanas acerca de la verdad. Esta era la última noche en que serviría como velador, pero la hermana hizo arreglos para visitarlo en su hogar y comenzó un excelente estudio bíblico. No pasó mucho tiempo antes de que este hombre hablara a sus hijas que vivían en el pueblo y ellas empezaron a participar en el estudio también.

En Siberia había un publicador que había aceptado la verdad junto con toda su familia. Quería llevar la verdad a sus parientes que vivían a varios miles de kilómetros de distancia. Viajó a aquel lugar y comenzó a predicar a su prima, una joven de veintiocho años de edad. Ella verdaderamente se interesó. Ahora trataron juntos de localizar a un Testigo en aquella ciudad de un medio millón de personas. Ellos buscaron por cuatro meses, sin tener éxito. Finalmente el hermano supo que en una ciudad vecina la gente conocía a una señora que había estado predicándoles cuando hacían sus compras en el mercado o cuando esperaban en fila su turno en las tiendas. Hallaron a la hermana, pero, puesto que ella había tenido muchas lamentables experiencias, no confiaba en ellos, porque eran personas a quienes ella nunca había conocido. De modo que ella no se presentó para la cita que hizo con ellos. Tuvieron que ir por segunda vez a ella y pedirle que viniera. Entonces ella los puso en comunicación con otros publicadores que podían ponerla a ella en comunicación con publicadores de su propia ciudad. Una publicadora que vino a la primera cita con aquella señora interesada se impresionó mucho por el gran interés de la señora. Habían de encontrarse a las ocho de la noche en una parada de autobús. Pero la publicadora fue allí con otra hermana a las seis de la tarde porque pudieron ir más temprano de lo esperado. Cuando llegaron a la parada del autobús se sorprendieron al ver a esta señora y su primo ya sentados allí, esperándolas con dos horas de adelanto, porque querían estar seguros de encontrarse con ellas. Fueron a la casa de la señora y le hablaron acerca de la verdad por tres horas, porque la joven quería oír más y más acerca de ella. La publicadora jamás en su vida había encontrado a alguien que prestara atención tan incesantemente como esta señora. Todos estaban llenos de gozo. El hermano partió la mañana siguiente para regresar a Siberia, habiendo logrado lo que su corazón deseaba. La señora progresó bien y ya ha expresado el deseo de bautizarse.

REPÚBLICA ÁRABE UNIDA

A pesar de que la persecución de parte de la policía y otros funcionarios ha continuado, la testificación ha seguido adelante en la República Árabe Unida durante el pasado año de servicio. Otros hermanos fueron deportados, pero, aun así, el número de Testigos que hay en el país ha aumentado. Jehová sigue bendiciendo a su pueblo por su firme posición de parte de él.

Durante el año uno de los superintendentes a quienes la policía estuvo buscando por largo tiempo fue arrestado. Por traición pudieron ubicar la casa donde él se alojaba y vinieron temprano cierta mañana para arrestarlo. Él estaba en cama con una enfermedad dolorosa en aquel tiempo. Después de registrar la casa y llevarse varios artículos, lo cargaron al automóvil y lo transportaron al cuartel de la policía. Allí lo interrogaron en cuanto a dónde estaban otros Testigos a los cuales buscaban, y lo golpearon cruelmente por rehusar traicionar a sus hermanos. Este trato continuó por once días, en los primeros tres de los cuales no recibió nada de comer. De noche se le ponía en una celda tan infestada con sabandijas que a veces tenía que pasar toda la noche de pie. En otras ocasiones se le puso entre prisioneros depravados que eran peores que las sabandijas. Finalmente fue enviado a un campamento de prisioneros en el desierto donde permanece hasta ahora, ya casi diez meses al escribirse esto. Ahora no se le trata tan mal, y puede testificar a grado considerable entre los otros prisioneros. Desde allí pudo enviar clandestinamente una carta en la que escribe, entre otras cosas, lo siguiente:

“Yo no sé cuál será el resultado, ni hasta cuándo estaré en este campo de concentración, pero doy gracias a Jehová de que tengo la Biblia, y le oro siempre que me fortalezca por causa de su nombre y que me capacite a mantener mi integridad delante de él. Confío en las oraciones de ustedes para que él me fortalezca y estimule. A todos les envío mi cálido amor cristiano.” Ciertamente oramos que Jehová continúe estando con este fiel hermano.

Cuando le visitan parientes que no creen, ¿por qué no dirigir la conversación a la verdad, especialmente cuando vienen a una hora en que usted está preparándose para salir al servicio del campo, de todos modos? Eso fue lo que razonó una de nuestras hermanas, y con buenos resultados. Mientras esperaba a una hermana con la cual tenía una cita para el servicio ministerial del campo, alguien tocó a la puerta precisamente al tiempo señalado. Pensando que era su compañera del servicio en el campo, la hermana abrió la puerta y se sorprendió al hallar allí de pie a su parienta no creyente. Algo había detenido a la hermana y nunca vino para la cita. Entonces, ¿por qué no testificarle a la parienta? La persona escuchó con mucha atención a todo lo que la hermana le dijo y entonces empezó a hacer muchas preguntas. Notando aquel interés, la hermana comenzó un estudio con su parienta utilizando el libro La verdad en aquel mismo momento, y el estudio ha continuado con regularidad. Más tarde la parienta le dijo a la hermana que creía que Dios le había contestado su oración. Ella había estado leyendo la Biblia pero no había podido entenderla y había orado a Dios que le diera entendimiento. Ahora es muy celosa por la verdad, y la declara a todo el que quiera escuchar. ¡Cuánto se alegra nuestra hermana de haber aprovechado la oportunidad de testificar a una parienta que la visitaba!