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Taiwan (Formosa)

Taiwan (Formosa)

Taiwan (Formosa)

“ILHA FORMOSA!” o “¡Isla hermosa!” es lo que los marineros portugueses exclamaron al ver por primera vez esta verde isla desde que sus buques allá en el siglo dieciséis. De hecho, muchas personas todavía llaman Formosa a la isla. El visitante moderno quedará también agradablemente impresionado al ver por primera vez esta isla de más de 385 kilómetros de largo y 145 kilómetros de ancho que está a las afueras de la China continental, porque siempre está cubierta de una alfombra de verdor, desde la orilla del mar hasta la cumbre de sus montañas de más de tres mil novecientos metros de altura. Aunque pequeño —solo tiene 36.000 kilómetros cuadrados— Taiwan es el país más densamente poblado del mundo, pues tiene más de 2.590 personas por kilómetro cuadrado.

Su historia variada ha traído a la isla una población compuesta de tribus de remotas partes del Asia. Entre ellos, vinieron malayos, y un gran grupo de la población actual, los amis, son descendientes de éstos. Al fin del siglo diecisiete hubo la entrada de chinos desde el continente, y Taiwan llegó a ser una provincia del enorme Imperio Chino. En 1895 Taiwan fue cedido al Japón, que había resultado victorioso en batalla, y entonces vinieron los pobladores japoneses. Durante los cincuenta años de dominación japonesa, tres generaciones fueron educadas en japonés, y ese idioma llegó a ser el único medio común de comunicación entre los grupos que hablaban diferentes idiomas.

Treinta y cinco años después del comienzo del rígido régimen japonés y sus actividades educativas, varias personas vinieron a Taiwan a conducir una campaña educativa de una naturaleza más importante. En 1927 la Sociedad Watch Tower asignó a un japonés nacido en los Estados Unidos a abrir una sucursal de la Sociedad en el Japón. En aquel tiempo Taiwan fue incluido en el territorio que llegó a estar bajo esta nueva sucursal, de modo que fue solo natural que entre 1928 y 1930 aquel siervo de sucursal visitara a Taipei, la ciudad capital de Taiwan, y pronunciara discursos en el Kokaido o el Auditorio Municipal. En aquellas reuniones un joven japonés, Saburo Ochiai, comprendió la importancia del mensaje del Reino y empezó a estudiar. Aumentó en conocimiento y celo, y mientras tanto ayudó a un joven taiwanés a aprender acerca del mensaje de la Biblia. Más tarde, estos dos salieron a predicar a otros, comenzando desde Taipei.

En la ciudad de Taichong, a unos ciento sesenta kilómetros al sur de Taipei, una señora de nombre Miyo Idei, cuyo hogar estaba más al sur todavía, estaba visitando a una amiga presbiteriana cuando el hermano Ochiai visitó aquel lugar. Aquí, por primera vez, la señora Idei vio unas publicaciones de la Sociedad Watch Tower... El Arpa de Dios y Creación. No tenía dinero y la persona a quien visitaba no tenía interés, pero quedó profundamente impresionada por el hecho de que estos jóvenes demostraran tanto celo en esta obra.

Dentro de dos años los jóvenes habían llegado, en su trabajo, al pueblo de Chiayi, donde ella vivía. Cuando ella oyó que uno de ellos estaba hospedado en la casa de un doctor en un pueblo cercano, dio a saber que quería hablarle. Pronto los dos la visitaron y ella reconoció a Ochiai. Se comenzó una intensa consideración de asuntos que duró desde las nueve de la mañana hasta las cuatro de la tarde, interrumpida solo por una comida sencilla. Miyo Idei dice, ahora casi cuarenta años después: “Quedé sorprendida por las cosas que estaba aprendiendo de la Biblia. Pasmada por el conocimiento de ellos, recuerdo que les hice dos preguntas: ‘Si esas cosas tan grandes van a suceder, ¿por qué pasan por alto el reino de Dios los gobernantes del mundo?’ y ‘¿Cuándo vendrá el Armagedón?’”

Hubo otras conversaciones, y cuando estos celosos proclamadores del Reino partieron, le dejaron a la señora Idei los libros Creación, El Arpa de Dios, Gobierno, Profecía, Luz y Reconciliación. Estos serían los maestros y compañeros de ella en los años subsiguientes. Por supuesto, vino el tiempo en que se dio cuenta de que ella, también, tenía que efectuar alguna predicación. Pidió unos 150 folletos de la Todaisha, como se llamaba entonces a la Sociedad Watch Tower en japonés, y comenzó a distribuirlos a principios de los años treinta. Su obra no pasó desapercibida por las autoridades, como ella misma lo cuenta: “El arresto del siervo de sucursal japonés fue anunciado en los periódicos después que yo había estado predicando por varios meses. Las repercusiones se sintieron inmediatamente, porque al hacer revisitas a la gente que había obtenido literatura se me dijo que habían venido unos detectives y confiscado lo que yo les había colocado. Entonces cuatro detectives vinieron a registrar nuestra casa. Se llevaron todos nuestros libros y revistas. Uno de ellos me interrogó en el cuartel de la policía local. Admitió, no obstante, que yo no estaba haciendo nada malo y me puso en libertad.”

Mientras tanto el hermano Ochiai y Yeh Kuo Yin continuaron con su ministerio hacia el sur, entonces cruzaron las montañas y viajaron hasta entrar en el valle que divide las dos cordilleras en el lado oriental de la isla. En esta zona un taiwanés llamado Tu Chin Teng, que tenía un pequeño negocio de escribano público en el pueblecito de Kuan Shan, aceptó gustosamente el mensaje y comenzó a pasarlo a otros. Por algún tiempo, después de su regreso al Japón, Ochiai y su compañero mantuvieron correspondencia con los interesados en Taiwan, pero pronto estos últimos quedaron verdaderamente aislados. A medida que las condiciones mundiales empeoraron y se intensificaron los esfuerzos del Japón por conquistar a la China, se ejerció gran presión en la población de Taiwan con el fin de obligarlos a adorar al emperador del Japón como el descendiente directo de la diosa del Sol.

Los que tenían disposición de oveja en Taiwan no fueron olvidados. Tan pronto como hubo un poco más de libertad, dos ministros precursores de tiempo cabal japoneses llegaron a Taipei para ayudar a reedificar los intereses del Reino en la isla. Raiichi Oe y Yoshiuchi Kosaka informaron a la casa de los Ideis de su llegada. Los Ideis respondieron con un inmediato y gozoso ‘¡Vengan, por favor!’ Aquel día de diciembre de 1937 fue inolvidable para ellos cuando los dos jóvenes llegaron en bicicletas a Chiayi. Habían viajado los 240 kilómetros desde Taipei con sus pertenencias apiladas en un montón alto sobre sus viejas bicicletas. Un par de palillos sobresalían del bolsillo de la camisa de cada uno. “¿Por qué traen palillos?” preguntó la señora Idei. Explicaron que mientras viajaban comían en los lugares más baratos, y los palillos de comer públicos no eran sanitarios. Después de dos días de estudio bíblico hubo un acontecimiento gozoso.. . ¡el bautismo del hermano Idei y la hermana Idei!

Pocos días después los precursores se apartaron con corazón apenado de sus nuevos hermanos y continuaron su gira en bicicleta alrededor de Taiwan... un viaje que tiene que haber sido una dura experiencia, al considerar que sus bicicletas iban cargadas de literatura y pertenencias personales, y la ruta que cruza y va alrededor de las montañas a menudo degenera en una senda estrecha y polvorienta. Una carta que la hermana Idei recibió del hermano Oe decía que ellos se habían puesto en comunicación con algunos de la tribu de los amis que estaban interesados. Y así fue que en enero de 1938 el escriba taiwanés, Tu Chin Teng, y varios miembros de la tribu de los amis fueron bautizados por los dos precursores.

Parece que para este tiempo dos Testigos bautizados del condado de Taitung se mudaron a Chiayi para estar con los Ideis. Al saber esto, los hermanos Oe y Kosaka regresaron al hogar de los Ideis por unos diez días para ayudarlos, entonces viajaron a Taipei para continuar el funcionamiento de un pequeño depósito de literatura de la Sociedad allí. Parecía que la obra del Reino estaba establecida sobre un cimiento más firme en tres lugares en Taiwan... la ciudad de Taipei, Chiayi y el condado de Taitung. Pero se acercaban dificultades.

OPOSICIÓN TEMPRANA

En el pueblo de Kuan Shan, además del hermano Tu Chin Teng había otro escribano llamado Lin Tien Ting. Personas que se estaban interesando en la Biblia comenzaron a buscar los servicios del hermano Tu más bien que los del otro escribano. Esto, combinado con otros factores, llevó a Lin Tien Ting a cerrar su negocio y adquirir un empleo al servicio de la policía. Tan pronto como estuvo bien establecido, comenzó una campaña de intimidación contra los hermanos. Por despecho los acusó de mostrar desprecio al emperador y rehusar cumplir con los requisitos de adoración en las capillas sintoístas. Hizo la acusación de que los hermanos conducían bautismos al desnudo y practicaban el adulterio. Esto hizo que algunos hermanos y hermanas fueran arrestados. No obstante, el hermano Oe, al enterarse de la situación, se apresuró a Kuan Shan y logró que los pusieran en libertad.

Mientras tanto la ola de nacionalismo e intolerancia aumentaba. Resultó aconsejable cerrar el pequeño depósito de Taipei y mudarse a la ciudad de Hsinchu, más pequeña, a cuarenta y ocho kilómetros al sur. Apenas se había efectuado este cambio en abril de 1939 cuando arrestaron a los hermanos Oe y Kosaka. Se comenzó una campaña para eliminar a los Testigos de Taiwan. En la medianoche del 21 de junio el hermano Idei y su esposa fueron arrestados también. Él fue mantenido en la cárcel hasta octubre con otro hermano. La hermana Idei fue puesta en libertad después de una noche en la cárcel, principalmente porque era maestra de escuela. Pero aunque no tenía otro modo de ganarse la subsistencia, ella dejó de enseñar, porque no podía como cristiana satisfacer los requisitos de enseñar mitos del sintoísmo y otra propaganda nacionalista.

Cuando el hermano Idei fue finalmente puesto en libertad se mudaron a Taipei con la esperanza de tener mayor libertad para adorar a Jehová. Por supuesto, todavía se preocupaban por los hermanos Oe y Kosaka. Después de considerar el asunto, se decidió que la hermana Idei, quien venía de la misma parte del Japón que el hermano Oe, debería tratar de verlo en la prisión, llevándole ropa, frutas y alimentos para hacer más llevadera la situación a los prisioneros. Se le dijo que no se permitían entrevistas, pero que las cosas que había llevado se les entregarían a los muchachos. Mientras caminaban por el húmedo pasillo el eco del sonido de los geta (chanclos) de la hermana Idei rebotaba de un lado a otro. Detrás de la reja de entrada a cada celda había una pared de concreto que no permitía que el interior de las celdas fuera visible desde la reja. Al acercarse a la reja que daba a la zona donde estaba el hermano Oe una figura se presentó entre la pared y la reja. Era el hermano Oe, con una escoba en una mano y un recogedor de basura en la otra. La hermana Idei corrió y le tomó las manos a través de la reja de hierro. ¡Aunque les estaba prohibido encontrarse, Jehová había hecho que se encontraran!

En el otoño de 1940 los dos fueron transferidos a la Prisión de Menores de Hsinchu donde se les otorgó mayor libertad, con el resultado de que la hermana Idei los visitó varias veces. En octubre de 1941 fueron llevados a la Prisión de Taipei, y esta transferencia se tomó como indicación de que pronto serían puestos en libertad. La hermana Idei continuó dándoles atención. Se resolvió a tratar de verlos hasta en Taipei, aunque no había buenas posibilidades de eso. Para sorpresa de ella los funcionarios cooperaron y pronto estuvo hablando con el hermano Kosaka a través de una ventana con reja de alambre. Una mirada le dijo que él sufría de tuberculosis avanzada. Le quedó la impresión, según dice ella, “de un rostro blanco como el papel y labios rojos como fresas frescas.”

Entonces le llegó el turno al hermano Oe. La hermana Idei informa lo siguiente: “Con una voz fuerte y una sonrisa en su rostro dijo: ‘Esta es una buena prisión... no hay sabandijas, no hay piojos. Si uno paga consigue un cojín, fideos, buen alimento y hasta una quinta particular.’ El guardia de la prisión que estaba vigilando no pudo contener la risa. Fue una entrevista de prisión inolvidable, porque me mostró que el hermano Oe nunca cedería, y prevalecía sobre sus apresadores. Esta fue mi última reunión con él.” Diez días más tarde, en la noche del 30 de noviembre, los Ideis también fueron arrestados. Aproximadamente dos meses después a la hermana Idei se le dijo que uno de los prisioneros había muerto de tuberculosis. Sin duda fue el hermano Kosaka. Al fin de la guerra, cuando todos los prisioneros estaban siendo puestos en libertad, la hermana Idei escribió a varias prisiones tratando de descubrir qué le había sucedido al hermano Oe, pero infructuosamente. Investigaciones hechas más tarde llevaron a la creencia de que él había sido muerto. Habiendo aprendido acerca del reino de Dios en el Japón cuando tenía solo diecisiete años de edad, verdaderamente había peleado una pelea excelente y terminado su carrera para aproximadamente 1945.

Desde cuando fue puesta en libertad en agosto de 1942 hasta que Taiwan volvió a estar bajo dominio chino después de la II Guerra Mundial, la hermana Idei estuvo sin comunicación con el pueblo de Jehová, y no pudo obtener ninguna publicación. ¿Cómo mantuvo una fe fuerte? “La Biblia,” explica, “siempre estaba conmigo. Cuando fui puesta en libertad conseguí una Biblia en una tienda de objetos de segunda mano. ¡Qué bendición! Los relatos animadores acerca de los apóstoles y de que sufrieron encarcelación en las prisiones fueron una verdadera fuente de fortaleza para mí. Además, Jehová siempre estuvo conmigo y me sostuvo.”

Mientras tanto, en la parte oriental de la isla no cesaban las dificultades instigadas por el maligno Lin Tien Ting. La proscripción de la obra en el Japón y Taipei en 1939 hizo más intensa la oposición. A los hermanos se les obligó a hacer trabajo forzado para la policía y el gobierno. En una ocasión se hicieron arreglos para un festín en la aldea de Ta Pi, en la población de Chih Shang. El plato principal consistía en un carabao que le había sido confiscado a uno de los Testigos. Esta pérdida para el dueño era comparable a la pérdida de su tractor para un agricultor occidental. A algunos hermanos los desnudaron y los azotaron sin misericordia con varas de bambú. Por lo menos a dos hermanas las desnudaron, las arrojaron al suelo y la policía procedió a usar varas de bambú aguzadas para punzar sus partes genitales. Una de las que sufrió así todavía vive, y todavía sirve como fiel adoradora de Jehová.

En una aldea del municipio de Chih Shang se estableció un campamento como centro para el lavado de cerebros y para hacer propaganda. El blanco de esto era la mente de los jóvenes de aquella zona. Se obligaba hasta a 500 personas a la vez a tomar este curso, que incluía ritos de tipo militar y del sintoísmo. Todos excepto los hermanos más firmes sucumbieron a estos métodos. Mientras tanto, se esparcieron rumores de que algunos de los hermanos más prominentes habían transigido, lo cual produjo mucha confusión.

Con el cambio, en 1945, de la gobernación japonesa a la gobernación china, los hermanos esperaron alivio. Después de todo, el Gobierno Nacionalista Chino era miembro fundador de las Naciones Unidas. Por eso los hermanos entonces hicieron un esfuerzo por poner en movimiento de nuevo la adoración verdadera. No obstante, debido a las incertidumbres del período de cambio, los funcionarios locales recibieron mayor autoridad, y éstos, en la mayoría de los casos, continuaron tratando a los Testigos de la misma manera injusta. Los hermanos tenían que reunirse secretamente en valles lejanos, saliendo de su hogar temprano en la mañana con azadones sobre sus hombros como si fueran a los campos, y entonces regresando de noche de la misma manera. Estas reuniones duraban la mayor parte del día, y había vigías asignados para dar la advertencia si alguien se acercaba.

Mientras tanto, el opositor Lin Tien Ting proyectaba hacer que la obra fuera proscrita de nuevo. Los mismos expedientes que había compilado la policía japonesa se usaron para que los funcionarios chinos actuaran contra los adoradores de Jehová. La correspondencia era interceptada y confiscada, de modo que no hubo respuesta a los esfuerzos repetidos por entrar en comunicación con la Sociedad escribiendo a la vieja dirección en el Japón ni a los Estados Unidos. A principios de octubre de 1946 se celebró una reunión especial en Chih Shang con el fin de poner fin a los Testigos. Nueve policías y otros oficiales estuvieron presentes, así como unos 300 testigos. No se dio oportunidad de responder a las viles acusaciones que se levantaron contra el pueblo de Dios. Pero más tarde aquella noche se les hizo posible a algunos de los prominentes entre los hermanos presentar los hechos reales a los funcionarios, y esto resultó en algún grado de alivio.

El gobierno nacionalista hizo provisiones que permitían oír acusaciones contra los funcionarios corruptos e injustos. Esta era la oportunidad que esperaban los hermanos, y presentaron acusaciones contra el oficial de la policía Lin Tien Ting. En enero de 1947 fue hallado culpable en los tribunales de Haulien, pero el alivio no duró mucho, porque más tarde fue puesto en libertad bajo una amnistía y obtuvo ascenso en la organización de la policía. Ahora estaba más furioso que nunca en su oposición.

Se continuaron haciendo esfuerzos para responder a las falsas acusaciones levantadas contra los Testigos y hacer que las autoridades removieran la proscripción. En 1947 un juez local de Taitung concordó en que deberían tener libertad de adoración, pero remitió el asunto a Taipei, la capital. El hostigamiento continuó, los hermanos y las hermanas siguieron siendo arrestados, detenidos por una semana más o menos y entonces puestos en libertad sin jamás comparecer ante un tribunal. También había interés en aquel tiempo en tratar de esparcir las “buenas nuevas” a aun más miembros de la tribu de los amis. Primero, un grupo de hermanos recibió instrucciones, usándose para esto El arpa de Dios, y entonces se les envió en pares a instruir a otros.

AYUDA DESDE LA SUCURSAL EN LA CHINA

En 1947 un Testigo que vivía en Shangai se mudó a Hsinchu en Taiwan para ocupar un puesto de maestro. Conoció a los Ideis y ellos le hablaron acerca de los hermanos amis aislados en la parte oriental de la isla. Él pasó la información al nuevo siervo de sucursal nombrado en Shangai, Stanley Jones, quien con su compañero misionero acababa de llegar a la China. La Sociedad hizo arreglos para que el hermano Jones visitara a Taiwan, y cuando llegó en 1948 el hermano Idei y un hermano chino lo recibieron en el aeropuerto. Ansioso de comunicarse con la tribu de los amis, el hermano Jones se resolvió a viajar por tren a Tainan, a trescientos veinte kilómetros al sur de Taipei. Esto era necesario debido a que la ruta más corta a la costa oriental estaba intransitable en aquel tiempo por causa de unas inundaciones. Y esto quiso decir que estuvo siguiendo la ruta que habían tomado los hermanos Oe y Kosaka casi diez años antes.

Él interrumpió su viaje para permanecer por corto tiempo en el hogar de la hermana Idei, que ahora vivía en el campo entre Tainan y Kaohsiung. Al llegar a Taitung, el hermano Jones habló con la policía y recibió confirmación de un permiso para celebrar reuniones con los amis. Tres horas y muchas paradas después llegaron a Chih Shang. ¡Cuanto se alegraron los hermanos de recibir al primer hermano occidental que habían visto! ¡Algunos de ellos caminaron hasta cuarenta y ocho kilómetros para la ocasión! En sus discursos a unas 600 personas el hermano Jones trató de ayudarlos a entender la organización mundial de los Testigos, como funcionaba la central directiva, y el papel que desempeñaban las sucursales al servir en el interés espiritual de los hermanos. Habló acerca de grandes asambleas internacionales, también, y hubo gran agitación cuando hizo circular entre ellos fotografías de algunas de aquellas asambleas. ¡En esta ocasión hubo muchos a quienes el estudio les había llevado a dedicarse, de modo que 261 personas se bautizaron en un solo día!

El hermano Jones utilizó la oportunidad también para mostrar a los hermanos cómo conducir sus reuniones y cómo efectuar la predicación y llenar informes sencillos de sus horas en el servicio del campo, sus revisitas y sus estudios bíblicos. Estos informes habían de ser enviados primero a Hsinchu, desde donde serían transmitidos a Shangai para ser incluidos en el informe de la sucursal china.

Aunque el siervo de sucursal se reunió con las autoridades en Taipei y éstas le aseguraron que los hermanos tendrían plena libertad de adoración, los informes recibidos después de su regreso a Shangai mostraron que la situación no había mejorado para los hermanos amis. La policía seguía hostigando a los hermanos, insistiendo en que la obra tenía que ser registrada ante el gobierno central antes de que ellos pudieran tener reuniones. De todos modos, hubo alguna respuesta a la visita hecha por el hermano Jones, porque en agosto de 1948 hubo informes de actividad de parte de sesenta y seis publicadores en Taiwan.

Al fin de 1948 el hermano Jones hizo otro viaje a Taipei, y esta vez con la ayuda de un doctor chino de Shangai trató de explicar la verdadera naturaleza de nuestra obra a varios funcionarios del gobierno. Trató de conseguir que el comisionado de Asuntos Civiles diera algo definitivo por escrito en cuanto a la situación de los hermanos y su derecho a efectuar la obra del Reino. Cuando regresó a Shangai recibió una carta del comisionado, pero todo lo que contenía era un permiso otorgado a él para viajar en cualquier lugar en Taiwan y predicar libremente. Ninguna garantía, ninguna libertad para los hermanos locales. ¡Qué desilusión!

Sin embargo, a pesar de las dificultades el mensaje del Reino comenzó a esparcirse a la verdadera gente de las montañas algunos de los cuales buscaban algo más satisfaciente que la adoración supersticiosa de la Luna. La mayoría de estas personas todavía vivían vidas muy primitivas e influía en ellos el demonismo, aunque se le había puesto fin a su costumbre de cazar cabezas al fin de la II Guerra Mundial. Había una señora recién casada conocida como Takako, de la tribu de los bununes, que vivía a una caminata de ocho horas desde la más cercana estación de ferrocarril en Hai Tuan. En una de las raras visitas de Takako a Hai Tuan obtuvo un ejemplar de la Biblia, y su lectura de este libro le hizo abandonar algunas de sus prácticas supersticiosas. La oposición que se le presentó resultó en que su esposo se divorciara de ella y que ella fuera expulsada de la aldea con un bebé de un año y solo la ropa que llevaba puesta. Fue a vivir con unos amigos, y siguió leyendo y diciendo a otros lo que aprendía.

Para marzo de 1950 el esposo y la esposa estaban nuevamente unidos, pues él se había mudado a Hai Tuan para estar cerca de su nuevo empleo. Ambos ahora tuvieron mayores oportunidades de estudiar la Biblia y aprender acerca de los propósitos de Jehová. Juntos comenzaron a asistir a las reuniones clandestinas, lo cual a menudo significaba una caminata de dos horas desde su hogar. En cierta ocasión cuando la policía los detuvo y registró, la Biblia de él le fue quitada, pero el ejemplar de ella estaba escondido en los pañales de su bebé. De este pequeño principio se desarrollaron grupitos de personas interesadas de la tribu de ella en varias aldeas. El 13 de mayo de 1953 Takako fue bautizada y en 1957 recibió tres meses de entrenamiento y fue nombrada para rendir servicio de precursora especial. Su actividad celosa resulta en que unas sesenta personas de las diferentes aldeas bununes aceptaran el mensaje del Reino.

En los años cuarenta un individuo amis que trabajaba seglarmente en la zona de la tribu de los paiwanes, cerca de la punta sur de la isla, obtuvo un ejemplar de La Atalaya en japonés. Le gustó lo que leyó y pidió más. Compartió esta verdad que acababa de hallar con varios miembros de la tribu de los paiwanes, compañeros de trabajo de él. De manera similar otras tribus como los taiyales, los lukais y los pumas llegaron a saber de las buenas nuevas.

LLEGAN GRADUADOS DE GALAAD

Dos graduados de la clase once de Galaad llegaron al puerto de Chilung desde Shangai el 2 de febrero de 1949. Para recibirlos allí estaban un hermano chino y dos o tres hermanos amis. Después de alojarse con los Ideis en Hsinchu por corto tiempo, siguieron adelante al territorio de los amis. ¡Qué cambio para ellos! ¡No había bañeras, no había electricidad, no había camas de estilo occidental! Vivirían al estilo de los amis en una casa en que la tierra era el piso, y donde había un techo de paja y una plataforma elevada que servía de cama. Una esquina de la pocilga serviría de excusado. Estaban allí para ayudar a los hermanos. Eso era lo que contaba.

¡En Chih Shang se les dijo que no había solo 300 personas interesadas en el mensaje, sino 600! Decidieron visitar todas las aldeas donde vivían estas personas. Los hermanos locales hicieron que varios “corredores” esparcieran las noticias a los varios grupos. El mensaje salió; ¡no 300, ni 600, sino 1.600 personas respondieron a la invitación! Fue excelente el que estos dos misioneros, los hermanos McGrath y Charles, hubieran tenido un curso breve en japonés en Galaad. Con la ayuda de la Biblia japonesa y un diccionario pudieron decir algo acerca de la organización de Dios a aquellas personas interesadas. Sus discursos fueron traducidos al amis para los que no podían entender el japonés. Se dieron cuenta de que los nuevos hermanos necesitaban un curso sistemático de estudio de la Biblia para llegar a la madurez.

Decidieron enseñar un tema a la vez. Como base, se seleccionó el libro “Sea Dios Veraz.” Se necesitaban hasta cinco días de paciente estudio y preparación antes que estuvieran listos para enseñar la lección a los hermanos reunidos. “Corredores” notificaban a los interesados donde y cuándo reunirse. El hermano McGrath iba en una dirección, y el hermano Charles en otra. En cada aldea se utilizaban ocho o más horas en la enseñanza misma, con sesiones de preguntas y respuestas. Las noches se pasaban en asociación tranquila con los hermanos.

Los hermanos locales necesitaban este entrenamiento. Eran sinceros, pero evidentemente había muchas cosas que no entendían del mensaje de la Biblia. Por ejemplo, se notó que de vez en cuando varias hermanas faltaban a las reuniones. Al preguntar en cuanto a esto, se descubrió que estaban aplicando las restricciones de la ley mosaica acerca de las mujeres durante sus períodos de menstruo. A las hermanas se les había dicho que no asistieran a las reuniones en aquellas circunstancias. Ahora los misioneros ayudaron a todos a en tender que los cristianos “no están bajo ley sino bajo bondad inmerecida.”

El hermano McGrath hizo muchos viajes a la capital con el objetivo de obtener reconocimiento local para la obra del Reino. Mientras tanto, el hermano Charles llegó a la conclusión de que haría alguna predicación regular de casa en casa en Kuan Sham. ¡Tan pronto como esto se supo, otros expresaron el deseo de hacer lo mismo, y al fin 140 quisieron participar en el ministerio del campo por primera vez, aunque pudiera resultar en que fueran echados en prisión! El grupo se dividió en dos, haciendo planes para trabajar en círculo el territorio de los amis y encontrarse en la costa oriental de Chih Shang. Llevaron arroz como comida principal. Durmieron en pequeños salones en las aldeas. Antes de entrar en cada aldea tenían una reunión de servicio para estar preparados para enfrentarse a las objeciones de la religión principal de aquella aldea. Entonces entraban en la aldea y comenzaban a trabajar. Completaron todo el territorio a lo largo de la costa, y todavía no hubo señal del otro grupo. Habían caminado por dos semanas.

Todavía les esperaba la parte más difícil del viaje. Ahora tenían que cruzar la sierra que los separaba del valle donde vivían. Las montañas de Taiwan son escabrosas, pero, peor todavía, la lluvia había hecho resbalosa la senda de barro. ¡El camino serpenteaba hacia abajo por una ladera de precipicio en la cual un paso en falso podría significar una caída de más de 180 metros! Los zapatos de suela de goma del hermano Charles eran peligrosos. Los hermanos le prestaron sus zapatos que tenían suelas de mucho mejor agarro. Enlazaron las manos, y con muchas oraciones llegaron abajo sanos y salvos. ¡Cuán agradecidos se sintieron cuando, después de su larga caminata, al fin se encontraron con el otro grupo! Pero hubo malas noticias. Varios de aquel grupo habían sido arrestados. Pocos días más tarde hubo más arrestos.

Mientras tanto, al hermano McGrath se le dijo que al magistrado de Taitung se le había enviado una carta en que se daba a la policía la instrucción de abstenerse de intervenir en lo que hacían los hermanos y de suministrarles protección mientras viajaban de aldea en aldea con su mensaje. No obstante, el magistrado negó que existiera tal carta, y actuó según la acusación falsa de que los Testigos eran comunistas. Pero la obra siguió adelante, aun ante fuerte impedimento.

Después hubo una rápida serie de dificultades. El hermano Charles contrajo la ictericia. Cuando llegó el tiempo en que había de renovarse su tarjeta de identificación, la policía rehusó devolverle la antigua o expedirle una nueva. Como súbdito británico, su situación era precaria, porque el reconocimiento diplomático que extendía el gobierno británico al régimen de la China continental le desagradaba muchísimo al gobierno de Taipei. Dándose cuenta de que posiblemente no podría estar mucho más tiempo en el país, el hermano Charles convocó una reunión de todos los hermanos responsables en Chih Shang. Por cuatro días consideró con ellos los requisitos de la organización cristiana. Instó a los que lo escuchaban a seguir aquellas instrucciones a estudiar la Biblia y a esperar más guía de Jehová. Entonces el misionero se despidió apenado de aquellos a quienes había llegado a amar tan intensamente. Pasó un corto tiempo convaleciendo en la casa de la hermana Idei en Hsinchu y entonces viajó al Consulado Británico en Tansui. Él y el hermano McGrath se alojaron en un hotelito. El hermano McGrath tenía paludismo en aquel tiempo. El hermano Charles decidió ir a Taipei y testificar un poco allí, y pudo conseguir la medicina y el alimento que necesitaba el hermano McGrath. Con el tiempo pareció que lo mejor para ellos sería viajar a Hong Kong más bien que esperar una expulsión oficial de Taiwan. Con tristeza ondearon las manos en despedida al grupo de hermanos amis que había viajado toda la distancia desde Chilung para despedirlos. Habían estado en Taiwan poco más de un año.

BUSCANDO RECONOCIMIENTO LEGAL

En vista de los desenvolvimientos la Sociedad decidió colocar una vez más a Taiwan bajo la superintendencia de la sucursal del Japón. Así el 3 de abril de 1901 el hermano Tohara, misionero en el Japón, vino a la isla para hacer preparaciones para una visita por el presidente de la Sociedad, el hermano Knorr. Lo hermanos Knorr y Henschel celebraron algunas reuniones en cuartos de hoteles con hermanos representantes del grupo de los amis y el grupo de Hsinchu. Cuando el hermano Knorr siguió adelante al Japón, el hermano Henschel quedó con el hermano Tohara con el propósito de hablar con algunos funcionarios gubernamentales. Se hicieron arreglos con el coronel Cheng Yi Kuan, de la Oficina de Asuntos Exteriores, Administración Policíaca Provincial de Taiwan, para enviar un representante de la Sociedad a investigar la veracidad de las acusaciones de que los Testigos en Taiwan estaban participando en inmoralidades y estaban enseñando subversión. Donald Steele, un misionero que había ido al Japón desde el teatro de guerra coreano, fue asignado para hacer esta investigación, pero las autoridades chinas rehusaron terminantemente su solicitud de un visado.

La estructura gubernamental en Taiwan complicaba grandemente la tarea de lograr el registro de la obra de la Sociedad. Supuestamente el gobierno central tiene el control general, pero el control en asuntos civiles estaba en las manos de los gobiernos provinciales, y algunos asuntos hasta se delegaban a los gobiernos de los condados. Así, a menudo el asunto era uno de ser remitido del uno al otro, sin resultado satisfactorio.

En 1952 la Sociedad envió al hermano Lloyd Barry a Taiwan. Él viajó a diferentes partes de la isla, y, puesto que podía hablar japonés, pudo comunicarse directamente con los hermanos. Visitó a los Ideis en Hsinchu así como a un matrimonio interesado del condado de Pingtung, bien al sur. También se reunió con los hermanos de la costa oriental y les dio mucho estímulo. Mientras estuvo allí se preparó también para someter solicitudes para el registro de una corporación local, la Asociación Internacional de Estudiantes de la Biblia. Mientras esperaba unos documentos necesarios de Brooklyn, tuvo la oportunidad de reunirse con algunas personas de mucha influencia. He aquí su propio relato:

“Cierta mañana en el desayuno en el Grand Hotel, en Taipei, un caballero norteamericano de edad avanzada preguntó cortésmente si podía sentarse a mi mesa. Pronto estaba preguntando: ‘¿Qué lo trae a Taiwan?’ Cuando le contesté francamente que era testigo de Jehová, se levantó, extendió el brazo y me dio un vigoroso apretón de manos. ‘¿Sabe una cosa?’ dijo, ‘acabo de escribir un capítulo sobre los testigos de Jehová en uno de mis libros.’” Era el Dr. C. Braden, profesor de Religiones Orientales en la Universidad Northwestern de los Estados Unidos. Parece que su investigación del tema de los Testigos le había dado causa para respetar profundamente a los Testigos y sus enseñanzas. Resultó que estaba en Taiwan como huésped personal del gobernador Wu, la mismísima persona a quien quería hablar el hermano Barry. El resultado fue que se hicieron arreglos para una entrevista de media hora con el gobernador Wu. Esto no tuvo como resultado algo verdaderamente tangible, aunque hubo una mengua hasta cierto punto del torturar físicamente a los testigos de Jehová.

Más tarde se supo que el gobernador Wu mismo había tenido mucho que ver con las muchas injusticias que se habían perpetrado contra el pueblo de Jehová. Note cómo confirma esto un artículo en el Post de la China del 5 de junio de 1971 en una porción tomada de un libro por el difunto Dr. Hollingworth K. Tong, Christianity in Taiwan: “El Dr. K. C. Wu, entonces gobernador de Taiwan, investigó entre líderes eclesiásticos en quienes confiaba en cuanto a la naturaleza y los objetivos de los Testigos. Se le dijo que esta secta había causado considerable dificultad tanto en los Estados Unidos como en el Canadá y que 20 de sus misioneros habían sido expulsados de Rusia por abogar por el derribo del gobierno soviético.” Así quedan acusados los líderes religiosos de la cristiandad en Taiwan de ser los instigadores de las brutalidades que sufrieron los hermanos.

En 1952 una sequía puso a los hermanos en condición lastimera. La mayoría de ellos tenían muy poca ropa. Los hermanos de Nueva York rápidamente prepararon un envío de socorro. La distribución de este regalo fue un gran testimonio a las autoridades locales y para los hermanos fue una demostración del amor profundo que les tenían sus hermanos de ultramar. Entonces, en 1955, el hermano Barry trajo la película de la Sociedad “La Sociedad del Nuevo Mundo en Acción” y felizmente recibió una licencia para exhibir la película en cualquier lugar en Taiwan durante los siguientes tres años. Hualien era la ciudad más cercana al territorio de los amis en que había electricidad, de modo que allí, después que la policía le ayudó a ubicar un auditorio escolar, la exhibió a diferentes grupos en cuatro noches distintas. En total, 2.865 hermanos y personas interesadas disfrutaron de la película; aquélla fue la primera vez que muchos de ellos vieron una película. La narración se suministró en amis de modo que todos entendieran claramente.

Al regresar al Japón, el hermano Barry se deleitó al saber que el 23 de marzo de 1955 la proscripción de las actividades de los testigos de Jehová, que tantos años había durado, había sido removida. Ahora se dio reconocimiento legal a la Asociación Internacional de Estudiantes de la Biblia. ¡Ahora estaba abierto el camino para que los 1.782 hermanos se reunieran libremente y predicaran públicamente! Uno de los requisitos era que las reuniones se celebraran en lugares de reunión registrados. Por eso, pronto los hermanos comenzaron a edificar sus Salones del Reino. También se requería que se usara el lenguaje chino y no el japonés en las reuniones. Por lo tanto, pronto se organizaron clases para que los hermanos aprendieran chino.

Mientras tanto, comenzó a moverse la obra entre la población de habla china. En 1951 Marion Liang, cuya familia había huido a Hong Kong desde la China continental en 1949, asistió a su primera asamblea de los testigos de Jehová. Allí oyó al hermano Knorr presentar el discurso “Proclamar libertad en toda la Tierra.” Se mudó de Hong Kong a Taiwan para asistir a la Universidad Nacional de Taiwan, pero no halló Testigos allí. Sin embargo, progresó en conocimiento bíblico, y en 1952, cuando regresó a Hong Kong de vacaciones, se bautizó. Regresó a Taiwan. Así fue que la única Testigo de habla mandarina en todo Taiwan estuvo esperando en Chilung la llegada de dos nuevos misioneros de Nueva York, el hermano Halbrook y su esposa. El hermano Barry estaba allí también. Se estableció un pequeño hogar misional en la carretera norte de Chung Shan, sección dos, en Taipei. Fue una gran experiencia para estos recién llegados salir en la obra de casa en casa con el hermano Barry y la hermana Liang el mismo día siguiente. Ellos habían traído algunos folletos chinos, pero al principio trataron de hallar personas que hablaran inglés para poder empezar algunos estudios bíblicos inmediatamente. La hermana Liang concordó en pasar dos horas de tres días cada semana ayudándolos a preparar sermones y conducir estudios en chino.

Los Halbrooks no eran los únicos que estaban luchando con el idioma chino. Los hermanos amis en Taipei, quienes habían sido educados bajo el patrocinio japonés, ahora estaban deseosos también de usar el idioma chino, y de esa manera poder cumplir con los requisitos gubernamentales en cuanto a las reuniones. Se hicieron arreglos para tener un estudio bíblico de grupo en chino en el hogar misional y varios de los jóvenes publicadores amis y otras personas interesadas vinieron. Una de estas personas un joven hermano amis, Lin Kao Ho, más tarde progresó hasta llegar a ser un muy capacitado siervo de circuito y traductor.

Tres meses después de la llegada de estos misioneros aconteció algo muy sobresaliente en la historia de la obra del Reino en esta isla. El hermano Knorr regresó para cumplir su promesa de tener una asamblea para los hermanos y las hermanas amis. Cuando el presidente de la Sociedad, junto con los hermanos Barry y Adams, llegó a Taipei, hicieron arreglos para viajar temprano en la mañana a Hualien, y de allí viajaron los restantes sesenta y cuatro kilómetros por tren a la aldea de Fu Yuan. ¡Qué sorpresa les esperaba! Los hermanos habían notado bien los detalles de la película de la Sociedad, y por eso se habían organizado todos los departamentos necesarios de una asamblea. Se había cavado una piscina de bautismo, de cuatro y medio metros de ancho por nueve metros de largo, y en los bordes de ésta se habían colocado piedras. Un arroyuelo había sido desviado para que el agua entrara en la piscina, y esto hizo posible el bautismo de 123 personas. Entre los bautizados hubo miembros de la tribu de los bununes y de otras tribus montañesas. El hermano Barry tradujo los discursos al japonés y la hermana Liang los interpretó al chino, y entonces fueron convertidos al amis. ¡Qué gozo fue ver a 1.808 personas en el discurso público!

SUCURSAL ESTABLECIDA EN TAIWAN

Después de eso el hermano Knorr decidió abrir una sucursal en Taiwan de modo que se pudiera dar más estrecha superintendencia teocrática y ayuda a los hermanos. El hermano Paul Johnston fue nombrado siervo de sucursal. Él y su esposa habían sido compañeros de clase de los Halbrooks en Galaad. Una asamblea en Ta Pu, Chih Shang, en la cual el hermano Franz, el vicepresidente de la Sociedad, fue el orador principal, marcó el principio de este nuevo capítulo en la historia de la obra del Reino en Taiwan. El hermano Adrian Thompson, siervo de distrito procedente del Japón, los Halbrooks y la hermana Liang viajaron adelante a la aldea de la asamblea, mientras el hermano Johnston y su esposa recibieron al hermano Franz y lo acompañaron en el vuelo a Hualien y en el viaje en el ferrocarril de vía estrecha a Chih Shang. De nuevo la organización de asamblea sorprendió a los visitantes. ¡Pues, hasta tenían un “departamento de agua” cuyo trabajo era cargar agua desde un pozo que estaba a noventa metros de distancia! Equipos de hermanas hacían este trabajo.

La resolución especial contra el comunismo fue adoptada por las 2.029 personas que asistieron a una de las sesiones. Fue en esta ocasión que el hermano Franz subió a la plataforma y dio un recital improvisado con su armónica mientras los hermanos se congregaban para comenzar el programa. Esto tocó el corazón de muchos. Se alcanzó la concurrencia máxima de 3.029 para la exhibición de la película “La Felicidad de la Sociedad del Nuevo Mundo.”

Después vinieron otras provisiones para la expansión de la actividad del Reino en Taiwan. Se alquilaron locales nuevos y más grandes en Taipei para incluir mejor alojamiento para los misioneros, un Salón del Reino y la oficina sucursal de la Sociedad. En el otoño de 1957 fue removida la proscripción de las actividades fuera de la ciudad de Taipei. Esta proscripción había estado en vigor desde principios del año anterior. ¿Y cómo se logró que fuera removida? El padre de un joven estudiante de la Biblia era miembro de la legislatura con una reputación de batallador y persona resuelta. Favorecía la obra del Reino, y cuando supo por su hijo en cuanto a nuestro problema, concordó en hacer arreglos para reunirse con el ministro del Interior, amigo de él. El resultado de esa reunión fue la restauración del reconocimiento de nuestra campaña educativa bíblica.

Además, poco después de esto se celebró la primera asamblea de circuito en Hualien. ¡El siervo de sucursal pronunció el discurso público en chino! Una barrera de idiomas había sido vencida. El paso siguiente fue dar atención a la necesidad de comunicación con los hermanos y personas interesadas amis.

La Sociedad todavía estaba interesada en obtener reconocimiento legal de la Sociedad Watch Tower Bible and Tract en Taiwan. Con este fin, en 1958 se compró propiedad para una sucursal y hogar misional en el núm. 5 del callejón 99, calle Yun-Ho, Taipei. Las escrituras fueron registradas en el nombre de Paul Johnston, agente de la Watch Tower Bible and Tract Society of Pennsylvania. Esto se usó entonces como base para el registro de la Sociedad. Puesto que intentos anteriores no habían producido buen resultado, se buscó la ayuda de la Embajada Americana, pero esto tampoco tuvo éxito. No obstante, cuando el asunto fue llamado a la atención del Ministerio de Relaciones Exteriores en Washington, ellos enviaron instrucciones al embajador para ver que los términos mutuos de comercio entre Taiwan y los Estados Unidos se aplicaran con imparcialidad en el caso de la Sociedad Watch Tower. Esto cambió el asunto, de modo que la registración de la Sociedad fue aprobada en 1963 y registrada en el Tribunal de Distrito de Taipei el 8 de mayo de 1964.

En 1958 la hermana Liang fue invitada a asistir a la clase treinta y una de la Escuela de Galaad en los Estados Unidos. Ese verano ella y su hermano carnal se graduaron en la asamblea del Estadio Yanqui. Permanecieron en la central de Brooklyn de la Sociedad por otros dos meses mientras trabajaban en completar la traducción del libro Paraíso al chino. Entonces la hermana Liang, la primera y única graduada china de Galaad que vino de Taiwan, regresó a efectuar servicio misional en Taipei. Aquí su habilidad de bilingüe se necesitaba mucho. La obra de componer tipo para la literatura en chino había sido transferida a Taiwan desde Hong Kong. El tipo chino había de componerse a mano por empresas de fuera y las pruebas habían de corregirse en la sucursal de Taiwan. Matrices de papel eran producidas por presión con este tipo y enviadas a los Estados Unidos, donde servían como moldes, para rehacer el material en metal para ser impreso en las prensas de la Sociedad en Brooklyn. Al fin la hermana Liang llegó a ser miembro de tiempo cabal de la familia de Betel en Taipei con el trabajo de corregir las pruebas del material, siempre aumentante, para las revistas chinas. Su hermano en Hong Kong hacía la mayor parte de la traducción misma.

Otros misioneros continuaron llegando en los años que siguieron. En 1959 se decidió esparcir los servicios de los misioneros a otras ciudades. Se alquiló una casa pequeña en Kaohsiung la segunda ciudad entre las más grandes de Taiwan, a 320 kilómetros al sur de la capital. El hermano Halbrook y su esposa y los hermanos Peel y Johansson fueron asignados allí.

Entonces el hermano Henschel de la central de la Sociedad visitó de nuevo a Taiwan en abril de 1960, cuando se celebró otra gran asamblea en el territorio de los amis. Las visitas por hermanos de Brooklyn, así como la provisión de asambleas de circuito y distrito que se celebraban con mayor regularidad, estaban dando a los hermanos un sentido de ser parte de la organización de Jehová. Esto resultó ser excelente preparación para una prueba que se acercaba rápidamente en cuanto a su fe y devoción a Jehová y los principios de su Palabra.

Aunque se progresaba lentamente entre las personas de habla china, exteriormente parecía que se estaban produciendo buenos resultados entre los amis y grupos de otros idiomas. El máximo de publicadores en el país había aumentado de 417 en 1951 a 2.009 en 1957. En agosto de 1931 se informó un máximo sin precedente de 2.459 publicadores. ¿Cuántos de estos estaban verdaderamente dedicados a Jehová y sus principios justos? La organización de la Escuela del Ministerio del Reino, comenzada en abril de 1961, ayudó a hacer clara la situación.

Todos los precursores especiales y superintendentes pasaron cuatro semanas estudiando la Palabra de Dios y asuntos de organización bajo la superintendencia del hermano Halbrook. El lenguaje todavía era un problema, pero este entrenamiento ayudó mucho a los hermanos. La escuela entonces fue mudada al este para a tender a la mayoría de los hermanos responsables de aquella zona. Este curso hizo una profunda impresión en todos los que lo tomaron. Comenzaron a en tender la importancia de vivir la verdad. El resultado fue un período de limpieza para la obra en Taiwan. Muchos, como resultado de esto, dejaron de seguir el ejemplo cristiano de servicio a Jehová. Habían estado en la organización meramente por lo que podían sacar de ella para sí mismos.

LIMPIANDO Y REEDIFICANDO

Con el denuedo que les dieron sus estudios de los principios bíblicos en la Escuela del Ministerio del Reino, ciertos hermanos ahora comenzaron a hablar acerca de irregularidades que estaban aconteciendo dentro de la organización de los Testigos en Taiwan. Hasta a hermanos responsables se les acusó de falta de honradez, favoritismo, actividades inmorales y falta de lealtad a la organización teocrática. Y, lamentablemente, algunas de las acusaciones eran ciertas. Hubo que expulsar a algunos, otros fueron removidos del servicio como superintendentes o precursores especiales, y otros más fueron disciplinados. Algunos de los expulsados se volvieron contra la Sociedad francamente y comenzaron a usar su influencia entre los hermanos de varias congregaciones para apartarlos a ellos también.

Los opositores que habían sido expulsados de la organización hasta llegaron al extremo de levantar acusaciones contra la organización de los Testigos en varios departamentos del gobierno. Instaron a las congregaciones a rechazar la visita de los siervos de circuito nombrados por la Sociedad. También se descubrió durante las investigaciones que muchos habían sido recomendados y con el tiempo nombrados para servir como precursores especiales, superintendentes en congregaciones y hasta como siervos de circuito, no porque estuvieran capacitados bíblicamente, sino porque eran parientes del que los recomendó o estaban bajo su influencia.

La Sociedad determinó hacer que alguien que pudiera hablar japonés y pudiera comunicarse directamente con la mayoría de los hermanos y hermanas viniera al país. El hermano Logan y su esposa, que habían sido misioneros en el Japón por siete años, fueron los seleccionados. Ellos llegaron a fines de 1961 y, después de tomar un curso de dos meses en chino mandarín, el hermano Logan asistió a reuniones especiales para los siervos de circuito celebradas por una semana en la oficina sucursal. Entonces se le asignó a trabajar con los siervos de circuito amis en la costa oriental, y él se esforzó por entrenarlos para que efectuaran mejor trabajo y al mismo tiempo se esforzó por ayudar a los siervos de las congregaciones a ser más aptos. Con el tiempo descubrió que el que ciertos superintendentes no pudieran contestar preguntas en chino no se debía enteramente al poco conocimiento del idioma. Muchos de ellos tenían un entendimiento pobre de las doctrinas fundamentales de la Biblia. En vista de esto, se dieron pasos para elevar la norma de educación bíblica entre los hermanos.

Con ese fin ahora se organizaron asambleas de circuito semestrales. Los siervos que habían de formar la organización de asamblea venían al lugar varios días antes, usando las horas del día para hacer todas las preparaciones para la asamblea, mientras que en las noches el hermano Logan pasaba tiempo con ellos considerando principios bíblicos y asuntos de organización. De este modo muchos de aquellos hermanos se capacitaron para comunicar la misma valiosa información a los hermanos de sus congregaciones. La hermana Logan, la primera hermana misionera que vivió entre los amis, también se mantenía ocupada porque ella también podía hablar japonés y estaba aprendiendo chino. Llevaba a las hermanas consigo al ministerio del campo cada mañana y en la tarde estudiaba con ellas material fundamental como el folleto “Buenas nuevas.” Así se desarrolló un fuerte enlace de afecto entre los misioneros y los publicadores amis.

El hermano Logan condujo cursos de estudio de una semana para todos los siervos de las congregaciones, con el propósito de ayudarles a en tender las doctrinas fundamentales y los arreglos de organización. También se celebraron en el lenguaje amis sesiones de ensayo sobre conducir el estudio de libro de congregación y otras reuniones. Esta campaña educativa produjo adelantamiento, pero también redujo la cifra de los publicadores. ¿Por qué? Porque reveló que algunos ni siquiera estaban en la etapa en que se les pudiera invitar a participar en la predicación. El asunto que había de recalcarse esta vez era calidad, no cantidad.

En 1963 obligaciones de familia hicieron que el hermano Johnston no pudiera continuar en el servicio de tiempo cabal, de modo que el hermano Logan fue nombrado para atender la sucursal. Poco después de eso, en agosto, se celebró en la aldea de Shou Feng la Asamblea “Alrededor del Mundo.” Para este tiempo el total de publicadores había bajado a menos de 1.200. La asamblea, celebrada esta vez en el nombre de la Sociedad Watch Tower, resultó ser un gran acontecimiento en el adelanto de la adoración pura. Los 535 delegados extranjeros atrayeron mucha atención. La policía y los oficiales de seguridad, que estuvieron presentes en aquella ocasión, evidentemente quedaron impresionados por lo que vieron y oyeron, porque desde entonces en adelante se hizo notablemente más fácil obtener permisos para las asambleas. El espíritu amoroso de la asamblea estaba en contraste marcado con algunas asambleas anteriores en Taiwan. Nadie se enseñoreaba de los voluntarios que servían en varios departamentos. Todo, incluso el apoyo material a la asamblea, fue enteramente voluntario.

¡Y qué placer para los hermanos locales conocer a compañeros publicadores de alrededor del mundo! Los delegados de raza negra fueron muy populares; también las hermanas japonesas con sus coloridos kimonos. Los hermanos locales que podían hablar japonés pasaron un tiempo maravilloso de compañerismo con los visitantes japoneses.

En 1964 el siervo de sucursal, acompañado por el siervo de circuito amis, pasó quince días visitando a los precursores especiales de once asignaciones y trabajando en el ministerio del campo con ellos. Esto reveló rápidamente quiénes estaban y quiénes no estaban capacitados para el servicio. Se hicieron cambios, algunos recibieron cursos de entrenamiento especial; otros fueron removidos. Resultó que muchos que fueron removidos se hicieron totalmente inactivos, en confirmación de alegaciones que se habían hecho de que algunos servían por causa de la mesada que se pasaba a los precursores especiales más bien que por amor a Jehová. El servicio de precursor especial ahora fue colocado sobre base buena y sólida.

En las congregaciones superintendentes entrenados gradualmente fueron dejando fuera a los que no tenían conocimiento o que no satisfacían otros requisitos cristianos. El total de publicadores para el país bajó a 1.004 en 1967... la cifra más baja desde 1953. Esto no era causa para desanimarse, cuando reflexionamos en el muy mejorado sacrificio de alabanza que subía a Jehová de los labios de los que verdaderamente amaban su Nombre. En el año de servicio de 1970 sesenta y tres personas fueron bautizadas y de nuevo en 1971 otras sesenta y tres fueron bautizadas, y esto fue razón para sentir verdadero gozo, porque todas estas personas que se habían bautizado habían sido antes cuidadosamente examinadas en cuanto a su aptitud y se pensaba que verdaderamente estaban dedicadas a Jehová Dios.

Para mayo de 1971 se creía que los hermanos habían adelantado lo suficiente para obtener provecho de la Escuela del Ministerio del Reino, y por eso de nuevo se puso en operación esa provisión. La primera clase, en mandarín, fue celebrada en la sucursal. Clases subsiguientes se celebraron en ubicaciones convenientes en territorio amis. Como resultado de toda esta mejora de las condiciones en las congregaciones, se pueden notar cambios correspondientes en actitud. Ahora los hermanos por lo general están dispuestos a poner a un lado su obra en las fincas y otro trabajo, aun en el tiempo de la cosecha, solo para estar en las asambleas u oír a algún representante especial de la Sociedad que los esté visitando.

Durante su visita en 1968 el hermano Knorr aprobó la construcción de un Salón del Reino más grande y la ampliación del alojamiento de los misioneros en la propiedad de la Sociedad en Taipei, para regocijo de las 205 personas que estaban presentes. Resulta que, debido a requisitos locales en cuanto a construcciones, los edificios viejos tuvieron que ser derribados y hubo que erigir un edificio enteramente nuevo. Solo se necesitaron nueve meses para completar el excelente edificio de dos pisos con su hermoso Salón del Reino, nueve dormitorios para misioneros, lugar para la oficina sucursal y el departamento de envíos. Fue una ocasión deleitable la reunión de 165 personas en octubre de 1969 para el programa de dedicación.

Inmediatamente después vino la segunda asamblea internacional en Taiwan, celebrada en el auditorio de la Academia Nacional de Artes, en Taipei. Aunque se presentó un programa completamente en chino, no entendible a un 60 por ciento de los hermanos de todo el país, sin embargo más de 500 hermanos alquilaron autobuses y asistieron, solo para estar con sus hermanos. Los que no podían entender el idioma ciertamente podían entender el amor y la unidad que se observaban en todas partes. Una asamblea fue celebrada más tarde en Chih Shang en el lenguaje de los amis, y a ésta asistieron más de 1.400 personas.

Considerando el campo aquí en Taiwan desde este punto ventajoso en 1971, se puede ver que hay dos distintos campos de actividad entre la población. Hay aproximadamente medio millón de personas tribuales o aborígenes, incluso los amis. En este territorio montañoso esparcido hay unos 950 publicadores. No es cosa extraordinaria el que pasen dos horas caminando para poder predicar por una hora. El problema del analfabetismo ha sido reducido hasta buen grado, pero todavía hay muchos que necesitan instrucción amorosa. Ciertamente hay maravillosas posibilidades entre estas personas humildes, entre las cuales muchos han servido a Jehová fielmente a pesar de desventajas serias.

El otro campo es el de la población china... casi doce millones de chinos taiwaneses además de otros millones que se han mudado aquí desde el continente. Nueve millones de estos chinos viven en territorio que ahora está siendo trabajado por los testigos, y en éste están incluidas por lo menos cinco ciudades con población de más de 200.000 en cada una. En la porción china del país hay 150 publicadores en el único circuito. Los misioneros han sido la punta de lanza de la obra entre los chinos. Si, durante los años de 1956 a 1959 la Sociedad asignó un total de cincuenta misioneros a Taiwan. De éstos, treinta y nueve han tenido que salir del servicio misional con el transcurso de los años, pero es excelente notar que algunas de estas parejas han decidido permanecer en Taiwan y seguir contribuyendo al adelantamiento de la obra del Reino, y muchos están siendo reemplazados. El interés continuado de la Sociedad en el bienestar de los hermanos aquí se muestra por el hecho de que ocho graduados de la clase cincuenta de Galaad y seis misioneros de las Filipinas han sido asignados a este territorio de sucursal en 1971. ¡Cuánto nos alegramos también de que se aprobaran visados para otros nueve graduados de la clase cincuenta y una de Galaad, y estos partieran de Nueva York inmediatamente después de la graduación el 7 de septiembre de 1971, hacia Taiwan!

Los esfuerzos de los misioneros, precursores y publicadores de congregación entre los chinos están produciendo excelentes resultados. Así, aunque Taiwan en general informó 1.160 publicadores, por todo el país, estos han colocado 20.622 libros y folletos, obtenido 3.546 nuevas suscripciones a las revistas La Atalaya y ¡Despertad!, además de distribuir 103.069 ejemplares sueltos. En cuanto a los estudios bíblicos semanales, están conduciendo 761 y han pasado 207.135 horas en el ministerio del campo durante el año de 1971.

Nos causó gran felicidad a todos el saber que en la celebración del Memorial el 9 de abril de 1971 hubo una concurrencia de 3.068, muchos de ellos de la raza que más población tiene. ¡Qué excelentes posibilidades para mayor aumento en esta “Isla Hermosa” en una de las partes más lejanas de la Tierra!