Hechos de los testigos de Jehová en tiempos modernos
Hechos de los testigos de Jehová en tiempos modernos
Toda persona que llega a conocer a Jehová Dios por medio de leer su Palabra escrita, tarde o temprano desea hablar a otras personas acerca de esto. Estas personas aprenden que la voluntad de Dios es que “hombres de toda clase sean salvos y lleguen a un conocimiento exacto de la verdad.” (1 Tim. 2:3, 4) El amor a Jehová hace que quieran ser imitadores de él, que reflejen sus cualidades y compartan su punto de vista. (Efe. 5:1) Por eso, hacen esfuerzos por compartir con otros lo que dice la Palabra de Dios. Esto no fue cierto solamente en los días de los cristianos primitivos; también ha sido cierto a través de los siglos y hasta el mismo presente. Cuando el apóstol Pablo estuvo escribiendo a los romanos, dijo: “Porque si declaras públicamente aquella ‘palabra en tu propia boca,’ que Jesús es Señor, y ejerces fe en tu corazón en que Dios lo levantó de entre los muertos, serás salvo. Porque con el corazón se ejerce fe para justicia, pero con la boca se hace declaración pública para salvación.”—Rom. 10:9, 10.
Cuando un individuo dedica su vida a Jehová, necesariamente declarará en público la palabra acerca de Jesús, su resurrección y el camino de salvación para toda la humanidad. De hecho, se siente tal como se sintió Pablo cuando dijo: “Ahora, si estoy declarando las buenas nuevas, eso no es motivo para que me jacte, porque necesidad me está impuesta. Realmente, ¡ay de mí si no declarare las buenas nuevas!” (1 Cor. 9:16) Esto lo hemos visto en las experiencias anteriores que se han publicado en el Anuario, pero ahora queremos entrar en detalles en cuanto a los testigos de Jehová del día moderno y cómo empezaron en ciertos países. Le interesará leer estas breves historias de los países de Luxemburgo, Terranova, que es una isla en el norte del Atlántico, también la República Sudafricana, incluso los principios tempranos de la obra en Rodesia del Norte y Rodesia del Sur, y Niasalandia. Estos tres últimos países mencionados han cambiado de nombre desde los primeros días de los testigos de Jehová. Para concluir, está la historia que viene de Sri Lanka, país conocido para la mayoría de la gente por todo el mundo como Ceilán, en el océano Índico. La obra en todos estos países tuvo principios tempranos que fueron muy pequeños, pero los hechos de los testigos de Jehová en estos países son muy interesantes, de hecho son fascinadores cuando se piensa en lo que hizo un puñado de personas, con la ayuda del espíritu de Dios, en la predicación de las buenas nuevas. En estos lugares hoy vemos excelentes resultado y un gran recogimiento de una muchedumbre de personas que verdaderamente aman a Jehová Dios. Por eso, remontémonos al pasado en los años y dejemos pasar el tiempo ante nuestros ojos a medida que estas historias nos traen hasta el mismo año de 1975.