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Se le aplasta la cabeza a la Serpiente

Se le aplasta la cabeza a la Serpiente

Capítulo 40

Se le aplasta la cabeza a la Serpiente

Visión 14.⁠a: Revelación 20:1-10

Lo que muestra: Satanás echado en el abismo, el Reinado Milenario, la prueba final de la humanidad y la destrucción de Satanás

Cuándo se cumple: Desde el fin de la gran tribulación hasta la destrucción de Satanás

1. ¿Cómo se ha ido cumpliendo la primera profecía bíblica?

¿RECUERDA usted la primera profecía bíblica? La pronunció Jehová Dios cuando dijo a la Serpiente: “Pondré enemistad entre ti y la mujer, y entre tu descendencia y la descendencia de ella. Él te magullará en la cabeza y tú le magullarás en el talón”. (Génesis 3:15.) ¡Ahora llegamos al cumplimiento de esa profecía! Hemos investigado la historia del guerrear de Satanás contra la organización celestial de Jehová comparada a una mujer. (Revelación 12:1, 9.) Aquí en la Tierra la descendencia o simiente terrestre de la Serpiente, con su religión, su política y sus grandes negocios, ha amontonado cruel persecución sobre la descendencia o simiente de la mujer, Jesucristo y sus 144.000 seguidores ungidos. (Juan 8:37, 44; Gálatas 3:16, 29.) Satanás hizo que Jesús sufriera una muerte dolorosa. Pero esto resultó ser como una herida en el talón, porque Dios resucitó a su Hijo fiel al tercer día. (Hechos 10:38-40.)

2. ¿Cómo se magulla a la Serpiente, y qué le sucede a la descendencia terrestre de la Serpiente?

2 ¿Qué hay de la Serpiente y su descendencia? Alrededor de 56 E.C., el apóstol Pablo escribió una larga carta a los cristianos de Roma. Al concluirla, los estimuló diciendo: “Por su parte, el Dios que da paz aplastará a Satanás bajo los pies de ustedes en breve”. (Romanos 16:20.) Esto es más que una magulladura superficial. ¡Satanás será aplastado! Pablo aquí usa una palabra griega, syn·trí·bo, que significa magullar hasta convertir algo en una jalea, pisotear, destruir completamente por aplastamiento. En cuanto a la descendencia humana de la Serpiente, esa experimenta verdaderas plagas en el día del Señor, plagas que culminan en la gran tribulación en que se aplasta por completo a Babilonia la Grande y a los sistemas políticos del mundo junto con sus socios financieros y militares. (Revelación, capítulos 18 y 19.) Así Jehová lleva a su culminación la enemistad entre las dos descendencias. La Descendencia de la mujer de Dios triunfa sobre la descendencia terrestre de la Serpiente, ¡y esa descendencia deja de ser!

Satanás en el abismo

3. ¿Qué nos dice Juan que le va a suceder a Satanás?

3 Entonces, ¿qué les espera a Satanás mismo y a sus demonios? Juan nos dice: “Y vi a un ángel que descendía del cielo con la llave del abismo y una gran cadena en la mano. Y prendió al dragón, la serpiente original, que es el Diablo y Satanás, y lo ató por mil años. Y lo arrojó al abismo, y lo cerró y lo selló sobre él, para que no extraviara más a las naciones hasta que se terminaran los mil años. Después de estas cosas tiene que ser desatado por un poco de tiempo”. (Revelación 20:1-3.)

4. ¿Quién es el ángel con la llave del abismo, y cómo lo sabemos?

4 ¿Quién es este ángel? Tiene que tener tremendo poder para deshacerse del archienemigo de Jehová. Tiene “la llave del abismo y una gran cadena”. ¿No nos recuerda esto una visión anterior? Pues, sí, ¡al rey de las langostas se le llama “el ángel del abismo”! (Revelación 9:11.) De manera que aquí de nuevo vemos en acción al Vindicador Principal de Jehová, el glorificado Jesucristo. ¡Este arcángel que echó del cielo a Satanás, que juzgó a Babilonia la Grande y que dispuso de “los reyes de la tierra y sus ejércitos” en Armagedón ciertamente no se echaría a un lado para que un ángel inferior diera el golpe maestro de echar en el abismo a Satanás! (Revelación 12:7-9; 18:1, 2; 19:11-21.)

5. ¿Qué hace el ángel del abismo con Satanás el Diablo, y por qué?

5 Cuando al gran dragón de color de fuego se le arrojó del cielo se le llamó “la serpiente original, el que es llamado Diablo y Satanás, que está extraviando a toda la tierra habitada”. (Revelación 12:3, 9.) Ahora, cuando se le prende y se le echa en el abismo, de nuevo se le describe en pleno como el “dragón, la serpiente original, que es el Diablo y Satanás”. A este infame devorador, engañador, difamador y opositor se le encadena y se le arroja “al abismo”, que entonces se cierra y sella bien ‘para que él no extravíe más a las naciones’. Satanás queda en el abismo por mil años, durante los cuales no tendrá más influencia en la humanidad que la que pudiera tener un prisionero confinado a un calabozo profundo. El ángel del abismo quita por completo a Satanás de todo contacto con el Reino de la justicia. ¡Qué alivio para la humanidad!

6. a) ¿Qué prueba hay de que los demonios también serán lanzados al abismo? b) ¿Qué puede empezar ahora, y por qué?

6 ¿Qué les sucede a los demonios? A ellos también se les tiene “reservados para juicio”. (2 Pedro 2:4.) A Satanás se le llama “Beelzebub el gobernante de los demonios”. (Lucas 11:15, 18; Mateo 10:25.) En vista de la larga colaboración de los demonios con Satanás, ¿no deberían recibir el mismo juicio? Por mucho tiempo esos demonios han temido ser echados en el abismo; en cierta ocasión en que Jesús se enfrentó a ellos, “le suplicaban que no les ordenara irse al abismo”. (Lucas 8:31.) Pero es seguro que cuando Satanás sea echado en el abismo sus ángeles serán arrojados allí con él. (Compárese con Isaías 24:21, 22.) Ya echados en el abismo Satanás y sus demonios, el Reinado de Mil Años de Jesucristo puede empezar.

7. a) ¿En qué estado se hallarán Satanás y sus demonios en el abismo, y cómo lo sabemos? b) ¿Son lo mismo el Hades y el abismo? (Véase la nota.)

7 ¿Estarán activos Satanás y sus demonios mientras se hallen en el abismo? Pues bien, recuerde a la bestia salvaje de color escarlata que tenía siete cabezas y que “era, pero no es, y, no obstante, está para ascender del abismo”. (Revelación 17:8.) Mientras estaba en el abismo, ‘no era’. Estaba fuera de acción, inmovilizada, prácticamente muerta. Algo semejante le sucedió a Jesús; el apóstol Pablo dijo: “‘¿Quién descenderá al abismo?’, esto es, para hacer subir a Cristo de entre los muertos”. (Romanos 10:7.) Mientras estuvo en aquel abismo, Jesús estuvo muerto *. Por eso, es razonable concluir que Satanás y sus demonios estarán en un estado de inactividad semejante a la muerte durante los mil años en que estén en el abismo. ¡Qué buenas noticias para los que aman la justicia!

Jueces por mil años

8, 9. ¿Qué nos dice Juan ahora sobre los que están sentados en tronos, y quiénes son esos?

8 Después de los mil años se suelta del abismo a Satanás por corto tiempo. ¿Por qué? Antes de contestar eso, Juan hace que nos remontemos al principio de ese período de mil años. Leemos: “Y vi tronos, y hubo quienes se sentaron en ellos, y se les dio poder para juzgar”. (Revelación 20:4a.) ¿Quiénes son estos que se sientan en tronos y gobiernan en los cielos con el glorificado Jesús?

9 Son “los santos” que, según la descripción de Daniel, gobiernan en el Reino con Aquel que es “como un hijo del hombre”. (Daniel 7:13, 14, 18.) Son lo mismo que los 24 ancianos que se sientan en tronos celestiales en la mismísima presencia de Jehová. (Revelación 4:4.) Entre ellos están los 12 apóstoles, a quienes Jesús dio la promesa: “En la re-creación, cuando el Hijo del hombre se siente sobre su trono glorioso, ustedes los que me han seguido también se sentarán sobre doce tronos y juzgarán a las doce tribus de Israel”. (Mateo 19:28.) Entre ellos también está Pablo, así como los cristianos de Corinto que permanecieron fieles. (1 Corintios 4:8; 6:2, 3.) También estarían entre ellos los miembros de la congregación de Laodicea que vencieron. (Revelación 3:21.)

10. a) ¿Cómo describe Juan ahora a los 144.000 reyes? b) Por lo que Juan nos ha dicho antes, ¿quiénes se hallan entre los 144.000 reyes?

10 Tronos —144.000— se preparan para estos vencedores ungidos “comprados de entre la humanidad como primicias para Dios y para el Cordero”. (Revelación 14:1, 4.) “Sí —continúa Juan—, vi las almas de los que fueron ejecutados con hacha por el testimonio que dieron de Jesús y por hablar acerca de Dios, y los que no habían adorado ni a la bestia salvaje ni a su imagen, y que no habían recibido la marca sobre la frente ni sobre la mano.” (Revelación 20:4b.) Entre esos reyes, pues, están los mártires cristianos ungidos que antes, cuando se abrió el quinto sello, habían preguntado a Jehová cuánto tiempo más esperaría él para vengar la sangre de ellos. En aquel tiempo se les dio una larga vestidura blanca y se les dijo que esperaran un poco más. Pero ahora han sido vengados mediante la devastación de Babilonia la Grande, la destrucción de las naciones por el Rey de reyes y Señor de señores y el que se haya echado a Satanás en el abismo. (Revelación 6:9-11; 17:16; 19:15, 16.)

11. a) ¿Qué entendemos por la expresión: “ejecutados con hacha”? b) ¿Por qué se puede decir que todo miembro de los 144.000 tiene una muerte de sacrificio?

11 ¿Fueron físicamente “ejecutados con hacha” todos esos 144.000 jueces reales? Probablemente un número relativamente pequeño de ellos lo fueron en sentido literal. No obstante, sin duda con esta expresión se quiere abarcar a todos los cristianos ungidos que aguantan el martirio de una manera u otra *. (Mateo 10:22, 28.) Ciertamente Satanás hubiera querido ejecutar a todos ellos con el hacha, pero en realidad no todos los hermanos ungidos de Jesús mueren como mártires. Muchos de ellos mueren por enfermedades o de vejez. Sin embargo, estos también pertenecen al grupo que Juan ahora ve. En cierto sentido la muerte de todos ellos es una muerte de sacrificio. (Romanos 6:3-5.) Además, ninguno de ellos fue parte del mundo. Por eso, el mundo los ha odiado a todos y, para los efectos, ellos han muerto a los ojos del mundo. (Juan 15:19; 1 Corintios 4:13.) Ninguno de ellos adoró a la bestia salvaje ni a su imagen, y, al morir, ninguno de ellos llevaba la marca de la bestia. Todos murieron como vencedores. (1 Juan 5:4; Revelación 2:7; 3:12; 12:11.)

12. ¿Qué informa Juan acerca de los 144.000 reyes, y cuándo llegan a vivir ellos?

12 ¡Ahora estos vencedores viven de nuevo! Juan informa: “Y llegaron a vivir, y reinaron con el Cristo por mil años”. (Revelación 20:4c.) ¿Significa esto que no se resucita a estos jueces sino hasta después que se destruya a las naciones y se encierre en el abismo a Satanás y sus demonios? No. Para ese tiempo la mayoría de ellos están muy vivos, pues han cabalgado con Jesús contra las naciones en Armagedón. (Revelación 2:26, 27; 19:14.) De hecho, Pablo indicó que la resurrección de ellos empieza poco después de comenzar la presencia de Jesús en 1914, y que a algunos se les resucita antes que a otros. (1 Corintios 15:51-54; 1 Tesalonicenses 4:15-17.) Por lo tanto, la llegada a vivir de estos se extiende por algún tiempo a medida que individualmente reciben la dádiva de vida inmortal en los cielos. (2 Tesalonicenses 1:7; 2 Pedro 3:11-14.)

13. a) ¿Cómo debemos ver los mil años durante los cuales gobiernan los 144.000, y por qué? b) ¿Cómo consideró Papías de Hierápolis los mil años? (Véase la nota.)

13 Reinarán y juzgarán por mil años. ¿Se refiere esto a mil años literales, o deberíamos ver ese período como un tiempo simbólico de larga duración que no está claramente definido? “Miles” puede significar un número grande, indefinido, como en 1 Samuel 21:11. Pero aquí el “mil” es literal, puesto que aparece tres veces en Revelación 20:5-7 como “los mil años”. Pablo llamó a este tiempo de juicio “un día” cuando declaró: “[Dios] ha fijado un día en que se propone juzgar la tierra habitada con justicia”. (Hechos 17:31.) Puesto que Pedro nos dice que un día con Jehová es como mil años, es apropiado que este Día del Juicio sea de mil años literales *. (2 Pedro 3:8.)

Los demás de los muertos

14. a) ¿Qué declaración añade Juan acerca de “los demás de los muertos”? b) ¿Cómo arrojan luz sobre la expresión ‘llegar a vivir’ unas declaraciones del apóstol Pablo?

14 Pero ¿a quiénes juzgarán estos reyes si, según la información que introduce aquí Juan, “(los demás de los muertos no llegaron a vivir sino hasta que se terminaron los mil años)”? (Revelación 20:5a.) De nuevo, la expresión “llegaron a vivir” tiene que entenderse en armonía con el contexto. Esta expresión puede tener diversos significados en diversas circunstancias. Por ejemplo, Pablo dijo lo siguiente sobre sus compañeros cristianos ungidos: “A ustedes Dios los vivificó aunque estaban muertos en sus ofensas y pecados”. (Efesios 2:1.) Sí, los cristianos ungidos por espíritu fueron ‘vivificados’, hasta en el primer siglo, cuando se les declaró justos sobre la base de su fe en el sacrificio de Jesús. (Romanos 3:23, 24.)

15. a) ¿Qué posición tuvieron ante Dios testigos de Jehová de antes del cristianismo? b) ¿Cómo ‘llegan a vivir’ las otras ovejas, y cuándo poseerán la Tierra en el sentido más completo?

15 De modo similar, a los testigos de Jehová de antes del cristianismo se les declaró justos respecto a amistad con Dios; y de Abrahán, Isaac y Jacob se dijo que ‘vivían’ aunque estaban físicamente muertos. (Mateo 22:31, 32; Santiago 2:21, 23.) Sin embargo, ellos y todos los demás que sean resucitados, así como la gran muchedumbre de otras ovejas fieles que sobrevivan al Armagedón y cualesquier hijos que estos tengan en el nuevo mundo, todavía tienen que ser elevados a la perfección humana. A esa perfección los llevarán Cristo y sus reyes y sacerdotes asociados durante el Día del Juicio de mil años, sobre la base del sacrificio de rescate de Jesús. Para el fin de ese Día “los demás de los muertos” habrán ‘llegado a vivir’ en el sentido de que habrán llegado a ser humanos perfectos. Como veremos, todavía tendrán que salir victoriosos de una prueba final, pero se enfrentarán a esa prueba como humanos perfeccionados. Cuando salgan con éxito de esa prueba, Dios los declarará dignos de vivir para siempre, justos en el sentido más completo. Experimentarán el cumplimiento completo de la promesa: “Los justos mismos poseerán la tierra, y residirán para siempre sobre ella”. (Salmo 37:29.) ¡Qué futuro deleitable le espera a la humanidad obediente!

La primera resurrección

16. ¿Cómo describe Juan la resurrección de los que gobiernan como reyes con Cristo, y por qué?

16 Regresando ahora a los que “llegaron a vivir, y reinaron con el Cristo por mil años”, Juan escribe: “Esta es la primera resurrección”. (Revelación 20:5b.) ¿En qué sentido es primera? Es “la primera resurrección” en cuanto a tiempo, pues los que la experimentan son “primicias para Dios y para el Cordero”. (Revelación 14:4.) También es primera en importancia, puesto que los que participan en ella llegan a ser gobernantes junto con Jesús en su Reino celestial y juzgan a los demás de la humanidad. Finalmente, es primera en calidad. Aparte de Jesucristo mismo, solo de aquellos a quienes se levanta en la primera resurrección dice la Biblia que reciben inmortalidad. (1 Corintios 15:53; 1 Timoteo 6:16.)

17. a) ¿Cómo describe Juan la bendita perspectiva de los cristianos ungidos? b) ¿Qué es “la muerte segunda”, y por qué “no tiene autoridad” sobre los 144.000 vencedores?

17 ¡Qué bendita perspectiva para estos ungidos! Como declara Juan: “Feliz y santo es cualquiera que tiene parte en la primera resurrección; sobre estos la muerte segunda no tiene autoridad”. (Revelación 20:6a.) Como Jesús prometió a los cristianos de Esmirna, estos vencedores que participan en “la primera resurrección” no estarán en peligro de recibir daño de “la muerte segunda”, que significa aniquilación, destrucción sin esperanza de resucitar. (Revelación 2:11; 20:14.) La muerte segunda “no tiene autoridad” sobre estos vencedores, pues ellos se han vestido de incorrupción e inmortalidad. (1 Corintios 15:53.)

18. ¿Qué dice Juan ahora de los nuevos gobernantes de la Tierra, y qué lograrán ellos?

18 ¡Qué diferencia de lo que les ha sucedido a los reyes de la Tierra mientras Satanás ha ejercido autoridad! A lo más estos han gobernado por 50 ó 60 años, y la gran mayoría por solo unos cuantos años. Muchos han oprimido a la humanidad. De todos modos, ¿cómo pudieran las naciones beneficiarse permanentemente bajo un cambio constante de gobernantes y de normas? En contraste con eso, Juan dice lo siguiente sobre los nuevos gobernantes de la Tierra: “Sino que serán sacerdotes de Dios y de Cristo, y reinarán con él por los mil años”. (Revelación 20:6b.) Junto con Jesús, por mil años serán el único gobierno. Su servicio sacerdotal, de aplicar el mérito del sacrificio humano perfecto de Jesús, elevará a los humanos obedientes a la perfección espiritual, moral y física. Su servicio real resultará en edificar una sociedad humana mundial que reflejará la justicia y santidad de Jehová. Como jueces por mil años, ellos, con Jesús, amorosamente guiarán hacia la meta de vida eterna a los humanos que acepten su dirección. (Juan 3:16.)

La prueba final

19. ¿En qué condición se hallarán la Tierra y la humanidad al fin del Reinado de Mil Años, y qué hace Jesús entonces?

19 Para el fin del Reinado de Mil Años toda la Tierra se parecerá al Edén original. Será un verdadero paraíso. La humanidad perfecta ya no necesitará a un sumo sacerdote que interceda por ella delante de Dios, puesto que se habrá removido todo vestigio del pecado heredado de Adán y se habrá eliminado al último enemigo, la muerte. El Reino de Cristo habrá logrado el propósito de Dios de crear un solo mundo con un solo gobierno. Llegado ese momento, Jesús “entrega el reino a su Dios y Padre”. (1 Corintios 15:22-26; Romanos 15:12.)

20. ¿Qué nos dice Juan que pasará cuando llegue el tiempo de la prueba final?

20 Entonces llega el tiempo para la prueba final. ¿Se mantendrá firme en su integridad aquel mundo de humanidad perfeccionada, en contraste con los primeros humanos que hubo en Edén? Juan nos dice lo que pasa: “Ahora bien, luego que hayan terminado los mil años, Satanás será soltado de su prisión, y saldrá a extraviar a aquellas naciones que están en los cuatro ángulos de la tierra, a Gog y a Magog, para reunirlos para la guerra. El número de estos es como la arena del mar. Y avanzaron sobre la anchura de la tierra y rodearon el campamento de los santos y la ciudad amada”. (Revelación 20:7-9a.)

21. Para su último esfuerzo, ¿cómo procede Satanás, y por qué no debe sorprendernos que algunos sigan a Satanás aun después del Reinado de Mil Años?

21 ¿Cómo le irá a Satanás en su último esfuerzo? Él engaña “a aquellas naciones que están en los cuatro ángulos de la tierra, a Gog y a Magog”, y las conduce a “la guerra”. ¿Cómo pudiera ser que haya quienes se pongan del lado de Satanás después de mil años de gozosa y edificante gobernación teocrática? Pues bien, no olvide que Satanás pudo extraviar a Adán y Eva, que eran perfectos, mientras disfrutaban de la vida en el Paraíso de Edén. Y pudo desviar a ángeles celestiales que habían visto los malos resultados de la rebelión original. (2 Pedro 2:4; Judas 6.) Por eso, no debería sorprendernos que se seduzca a algunos humanos perfectos para que sigan a Satanás aun después de mil años de deleitable gobernación por el Reino de Dios.

22. a) ¿Qué indica la expresión “aquellas naciones que están en los cuatro ángulos de la tierra”? b) ¿Por qué se llama ‘Gog y Magog’ a los rebeldes?

22 La Biblia llama a estos rebeldes “naciones que están en los cuatro ángulos de la tierra”. Esto no significa que de nuevo se habrá dividido a la humanidad en entidades nacionales que se excluyen unas a otras. Simplemente indica que estos se separarán de los justos y leales de Jehová y manifestarán el mismo mal espíritu que despliegan las naciones hoy. ‘Pensarán algún proyecto dañino’, como hizo el Gog de Magog de la profecía de Ezequiel, con la meta de destruir al gobierno teocrático en la Tierra. (Ezequiel 38:3, 10-12.) Por eso se les llama ‘Gog y Magog’.

23. ¿Qué indica el que la cantidad de los rebeldes sea “como la arena del mar”?

23 El número de los que se unen a Satanás en su revuelta será “como la arena del mar”. ¿Cuánto es eso? No hay ningún número predeterminado. (Compárese con Josué 11:4; Jueces 7:12.) La cantidad total de los rebeldes dependerá de cómo reaccione cada individuo a los engaños de Satanás. Pero parece que habrá un número considerable, puesto que se sentirán lo suficientemente fuertes como para triunfar sobre el “campamento de los santos y la ciudad amada”.

24. a) ¿Qué es “la ciudad amada”, y cómo puede ser que la rodeen? b) ¿Qué representa “el campamento de los santos”?

24 “La ciudad amada” debe ser la ciudad de que habla el glorificado Jesucristo a sus seguidores en Revelación 3:12, y que él llama “la ciudad de mi Dios, la nueva Jerusalén que desciende del cielo desde mi Dios”. Puesto que es una organización celestial, ¿cómo pudieran ‘rodearla’ aquellas fuerzas terrestres? Porque rodean “el campamento de los santos”. Un campamento se halla fuera de una ciudad; por lo tanto, “el campamento de los santos” tiene que representar a los que están en la Tierra fuera de la ubicación celestial de la Nueva Jerusalén y que apoyan lealmente el arreglo gubernamental de Jehová. Cuando los rebeldes bajo Satanás lanzan un ataque contra aquellos fieles, el Señor Jesús lo considera un ataque contra él. (Mateo 25:40, 45.) “Aquellas naciones” tratarán de borrar todo lo que la Nueva Jerusalén celestial ha logrado al hacer de la Tierra un paraíso. Por eso, cuando atacan “el campamento de los santos”, atacan también a “la ciudad amada”.

El lago de fuego y azufre

25. ¿Qué descripción da Juan del resultado del ataque de los rebeldes al “campamento de los santos”, y qué significará esto para Satanás?

25 ¿Tendrá éxito ese esfuerzo final de Satanás? De ninguna manera, ¡tal como no tendrá éxito el ataque que Gog de Magog va a lanzar contra el Israel espiritual en nuestros días! (Ezequiel 38:18-23.) Juan describe vívidamente el resultado: “Pero descendió fuego del cielo, y los devoró. Y el Diablo que los estaba extraviando fue arrojado al lago de fuego y azufre, donde ya estaban tanto la bestia salvaje como el falso profeta”. (Revelación 20:9b-10a.) En vez de simplemente ser arrojado al abismo de nuevo, esta vez realmente se aplasta a Satanás, la Serpiente original, y él deja de existir; se le pulveriza, se le aniquila completamente como si fuera por fuego.

26. ¿Por qué no puede ser un lugar literal de tormento el “lago de fuego y azufre”?

26 Ya hemos notado que “el lago de fuego y azufre” no podría ser un lugar literal de tormento. (Revelación 19:20.) Si Satanás tuviera que sufrir terrible tortura allí durante toda la eternidad, Jehová tendría que conservarlo vivo. Sin embargo, la vida es una dádiva, no un castigo. La muerte es el castigo por el pecado, y, según la Biblia, las criaturas muertas no sienten ningún dolor. (Romanos 6:23; Eclesiastés 9:5, 10.) Además, después leemos que tanto a la muerte misma como al Hades se les arroja a este mismo lago de fuego y azufre. ¡Ciertamente la muerte y el Hades no pueden sufrir dolor! (Revelación 20:14.)

27. ¿Cómo nos ayuda a entender el término “lago de fuego y azufre” lo que les sucedió a Sodoma y Gomorra?

27 Todo esto refuerza el punto de vista de que el lago de fuego y azufre es simbólico. Además, la mención de fuego y azufre nos hace recordar lo que les sucedió a las antiguas Sodoma y Gomorra, que fueron destruidas por Dios por su crasa iniquidad. Cuando les llegó el tiempo, “Jehová hizo llover azufre y fuego desde Jehová, desde los cielos, sobre Sodoma y sobre Gomorra”. (Génesis 19:24.) Lo que aquellas dos ciudades experimentaron se llama “el castigo judicial de fuego eterno”. (Judas 7.) Sin embargo, aquellas dos ciudades no sufrieron tormento eterno. Más bien, fueron borradas de la existencia, totalmente aniquiladas, junto con sus depravados habitantes. Esas ciudades no existen hoy, y nadie puede decir con seguridad dónde estaban.

28. ¿Qué es el lago de fuego y azufre, y cómo se distingue de la muerte, el Hades y el abismo?

28 En armonía con esto, la Biblia misma explica el significado del lago de fuego y azufre: “Esto significa la muerte segunda: el lago de fuego”. (Revelación 20:14.) Está claro que es lo mismo que el Gehena de que habló Jesús, un lugar donde se destruye para siempre a los inicuos, no donde se les tortura. (Mateo 10:28.) Es destrucción completa, absoluta, sin esperanza de resurrección. Así, aunque hay llaves para la muerte, el Hades y el abismo, no se menciona una llave que abra el lago de fuego y azufre. (Revelación 1:18; 20:1.) Este nunca soltará a sus cautivos. (Compárese con Marcos 9:43-47.)

Atormentados día y noche para siempre

29, 30. ¿Qué dice Juan acerca del Diablo, así como de la bestia salvaje y del falso profeta, y cómo debe entenderse esto?

29 Con referencia al Diablo, así como a la bestia salvaje y al falso profeta, Juan ahora nos dice: “Y serán atormentados día y noche para siempre jamás”. (Revelación 20:10b.) ¿Qué pudiera significar esto? Como ya se ha mencionado, no es lógico decir que símbolos, tales como la bestia salvaje y el falso profeta, así como la muerte y el Hades, puedan sufrir tormento de manera literal. Por eso, no hay motivo para creer que Satanás estará sufriendo durante toda la eternidad. Va a ser aniquilado.

30 La palabra griega que aquí se usa para “tormento”, ba·sa·ní·zo, significa principalmente “probar (metales) por la piedra de toque”. “Interrogar por la aplicación de tortura” es un significado secundario. (The New Thayer’s Greek-English Lexicon of the New Testament.) En el contexto, el uso de esta palabra griega indica que lo que le sucede a Satanás servirá para toda la eternidad como una piedra de toque sobre la cuestión de lo correcto y lo justo de la gobernación de Jehová. Esa cuestión de la gobernación soberana habrá sido resuelta de una vez para siempre. Nunca más habrá que someter a prueba, durante un largo espacio de tiempo, un desafío a la soberanía de Jehová para probar que está equivocado. (Compárese con Salmo 92:1, 15.)

31. ¿Cómo nos ayudan a entender el castigo que recibe Satanás el Diablo dos palabras griegas que se relacionan con la que significa “tormento”?

31 Además, la palabra relacionada ba·sa·ni·stés, “atormentador”, se usa en la Biblia con el significado de “carcelero”. (Mateo 18:34, Kingdom Interlinear.) En armonía con esto, Satanás será aprisionado en el lago de fuego para siempre; nunca se le soltará. Finalmente, en la Septuaginta griega, bien conocida para Juan, la palabra relacionada bá·sa·nos se usa para referirse a humillación que lleva a muerte. (Ezequiel 32:24, 30.) Esto nos ayuda a ver que el castigo que Satanás recibe es una humillante muerte eterna en el lago de fuego y azufre. Sus obras mueren con él. (1 Juan 3:8.)

32. ¿Qué castigo recibirán los demonios, y cómo lo sabemos?

32 De nuevo, no se menciona a los demonios en este versículo. ¿Serán soltados junto con Satanás al fin de los mil años y entonces recibirán el castigo de muerte eterna junto con él? La evidencia responde que sí. En la parábola de las ovejas y las cabras Jesús dijo que las cabras se irían “al fuego eterno preparado para el Diablo y sus ángeles”. (Mateo 25:41.) La expresión “fuego eterno” tiene que referirse al lago de fuego y azufre donde se arrojará a Satanás. Los ángeles del Diablo fueron echados del cielo con él. Evidentemente fueron al abismo con él al principio del Reinado de Mil Años. Por consiguiente, pues, también serán destruidos con él en el lago de fuego y azufre. (Mateo 8:29.)

33. ¿Qué detalle final de Génesis 3:15 se cumplirá entonces, y a qué asunto llama la atención de Juan ahora el espíritu de Jehová?

33 De este modo se cumple el detalle final de aquella primera profecía registrada en Génesis 3:15. Cuando se arroja a Satanás en el lago de fuego, él llega a estar tan muerto como una culebra cuya cabeza ha sido aplastada bajo un talón de hierro. Él y sus demonios habrán desaparecido para siempre. No se les vuelve a mencionar en el libro de Revelación. Ahora, cuando proféticamente se ha dispuesto de ellos, el espíritu de Jehová llama atención a un asunto de interés urgente para los que tienen la esperanza de vivir en la Tierra: ¿Qué le sucederá a la humanidad como resultado del reinado celestial del “Rey de reyes” y “los llamados y escogidos y fieles que con él están”? (Revelación 17:14.) Para contestar esa pregunta, Juan nos lleva otra vez al principio del Reinado de Mil Años.

[Notas]

^ párr. 7 Otros textos bíblicos dicen que Jesús estuvo en el Hades mientras estuvo muerto. (Hechos 2:31.) Sin embargo, no debemos llegar a la conclusión de que el Hades y el abismo son siempre lo mismo. Aunque la bestia salvaje y Satanás bajan al abismo, solo de humanos se dice que van al Hades, donde duermen en la muerte hasta su resurrección. (Job 14:13; Revelación 20:13.)

^ párr. 11 Parece que el hacha (griego: pé·le·kus) era el instrumento tradicional de ejecución en Roma, aunque para los días de Juan la espada se había generalizado más. (Hechos 12:2.) Por lo tanto, la palabra griega que se usa aquí, pe·pe·le·kis·mé·non (“ejecutados con hacha”), sencillamente significa “ejecutados”.

^ párr. 13 Un dato interesante es que, según un informe del historiador Eusebio, del siglo IV (en su Historia eclesiástica), Papías de Hierápolis, quien supuestamente recibió parte de su conocimiento bíblico de personas que aprendieron de Juan, el escritor de Apocalipsis o Revelación, creía que Cristo tendría un Reinado de Mil Años literal (aunque Eusebio disentía vigorosamente de Papías a este respecto).

[Preguntas del estudio]

[Foto de la página 293]

El mar Muerto. Posible ubicación de Sodoma y Gomorra

[Ilustraciones de la página 294]

“Pondré enemistad entre ti y la mujer, y entre tu descendencia y la descendencia de ella. Él te magullará en la cabeza y tú le magullarás en el talón”