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¿Del “mundo del ARN”, o de otro mundo?

¿Del “mundo del ARN”, o de otro mundo?

Apéndice B

¿Del “mundo del ARN”, o de otro mundo?

Ante la dificultad de explicar el equipo ADN-ARN-proteína, algunos investigadores han presentado la teoría del “mundo del ARN”. ¿Cuál es esta? En vez de afirmar que el ADN, el ARN y las proteínas se originaron simultáneamente para producir la vida, dicen que el ARN mismo fue la primera chispa de la vida. ¿Es esta una teoría creíble?

En los años ochenta los investigadores descubrieron en el laboratorio que las moléculas de ARN podían actuar como sus propias enzimas dividiéndose en dos y uniéndose luego de nuevo. De modo que se especuló que el ARN pudo haber sido la primera molécula con capacidad replicativa. Se teorizó que con el tiempo, estas moléculas de ARN aprendieron a formar membranas celulares y que, finalmente, el organismo de ARN dio lugar al ADN. “Los apóstoles del mundo del ARN —escribe Phil Cohen en New Scientist— creen que su teoría debe tomarse, si no como el evangelio, sí como lo más próximo a la verdad.”

Ahora bien, no todos los científicos aceptan este postulado. Los escépticos, dice Cohen, “razonaron que era un salto demasiado grande pasar del hecho de que dos moléculas de ARN se automutilaran de algún modo en el tubo de ensayo, a que el ARN fuera capaz de producir una célula por sí solo y desencadenar el surgimiento de la vida en la Tierra”.

Se presentan también otras objeciones. El biólogo Carl Woese dice que “la teoría del mundo del ARN [...] está mortalmente herida porque no explica de dónde vino la energía para provocar la formación de las primeras moléculas de ARN”. Los investigadores, por otra parte, nunca han localizado ARN que pueda replicarse partiendo de cero. Tampoco han resuelto la cuestión de cómo se formó, en primer lugar, el ARN. Aunque la teoría del “mundo del ARN” aparece en muchos libros de texto, la mayor parte de esta, dice el investigador Gary Olsen, “es optimismo especulativo”.

Otra teoría que han propugnado algunos científicos es que la vida llegó a nuestro planeta procedente del espacio exterior. Pero esta teoría no contesta la pregunta “¿Qué originó la vida?”. Afirmar que la vida proviene del espacio exterior, dice el escritor sobre temas científicos Boyce Rensberger, “solo cambia la ubicación del misterio”. No explica el origen de la vida. Sencillamente elude la cuestión reubicando el origen de la vida en otro sistema solar o galaxia. La cuestión de fondo permanece.