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Instrucción en clase

Instrucción en clase

Instrucción en clase

Otro aspecto en el cual los puntos de vista de los testigos de Jehová pueden afectar su paso por la escuela tiene que ver con el programa de enseñanza. Por eso, lo que aquí se presenta se hace con la intención de promover entendimiento y cooperación entre los maestros y los padres Testigos, puesto que creemos que particularmente los padres son los responsables de escoger lo que se ha de enseñar a sus hijos.

Religión y oración: En algunas escuelas se incluye instrucción religiosa en la sala de clases. En los Estados Unidos hubo un tiempo en que se requería que los padres dijeran si querían que sus hijos fueran instruidos en la religión católica, la protestante o la judía. Si no se firmaba para que un niño recibiera instrucción religiosa, el joven tenía que salir de la sala de clases y pasar a otro lugar a efectuar sus estudios seglares. Pero después, en 1948, el Tribunal Supremo de los Estados Unidos declaró:

“La Primera Enmienda se basa sobre la premisa de que tanto a la religión como al gobierno se les hace mejor el logro de sus elevados propósitos si a cada uno se le deja libre del otro dentro de su esfera respectiva. [...] la Primera Enmienda ha erigido entre la Iglesia y el Estado un muro que tiene que mantenerse alto e impenetrable”. (McCollum, v. Board of Education, 1948.)

Posteriormente, el 17 de junio de 1963, el Tribunal Supremo de los Estados Unidos también decidió en contra de que hubiera lectura de la Biblia y oración en las escuelas públicas. El juez Brennan explicó lo siguiente en su opinión: “Desde el principio el espíritu de nuestras constituciones, la federal y las estatales, [...] [ha] sido el de dejar la instrucción religiosa a discreción de los padres”.

Los testigos de Jehová concuerdan con el hecho de que el dar a los hijos instrucción religiosa es responsabilidad de los padres. Por eso, en los casos en que en la escuela se da instrucción religiosa, los padres Testigos solicitan que se dispense de tal instrucción a sus hijos. Si el curso religioso incluye participar en una forma de adoración que nosotros consideramos antibíblica, como la de inclinarse ante imágenes, los padres Testigos no aprueban esto bajo ninguna circunstancia.

Por otra parte, si en la sala de clases hay simplemente un estudio objetivo de varias religiones o de la Biblia, los testigos de Jehová no tienen objeción a eso. Por tanto, si una escuela hace arreglos para que representantes de diversas religiones presenten discursos, no para hacer prosélitos, sino sencillamente para dar información acerca de esas religiones a los estudiantes, los estudiantes Testigos escucharán respetuosamente. De manera similar, cuando se invita a los testigos de Jehová, ellos se complacen en pronunciar discursos a grupos escolares y explicar sus creencias religiosas.

En algunas escuelas se repite la Oración del Señor, o el Padrenuestro, con regularidad. Aunque nosotros los testigos de Jehová aceptamos esa oración, no nos unimos a otros en una repetición de ella como un rito. Esto se debe a que, en la misma ocasión en que Jesús proveyó esa oración modelo, aconsejó contra decir en oración “las mismas cosas repetidas veces” (Mateo 6:7, 8). Otra razón por la cual no participamos en esto es que no tomamos parte en servicios religiosos de unión de fes.

Educación sexual: Por mucho tiempo en las escuelas públicas se ha dado instrucción respecto a la salud y la higiene. Comprendemos que estos cursos han sido muy útiles al enseñar el valor de la limpieza, la prevención de enfermedades, el cuidado de los hijos, la responsabilidad familiar, y así por el estilo. Pero hoy día muchas escuelas también están suministrando educación explícita sobre asuntos sexuales, entre ellos las medidas anticoncepcionales, la masturbación, la homosexualidad y el aborto.

Por lo general la educación sexual se provee sin guía moral. De hecho, no es raro el que educadores mismos critiquen las normas morales de la Biblia. Por eso, los padres Testigos se preocupan mucho por lo que se enseña en las clases de educación sexual.

Un libro que se usa en algunas escuelas, que lleva el título de Dreng og pige, mand og kvinde (Niño y niña, hombre y mujer), dice: “Todo individuo debe tener el derecho de satisfacer sus necesidades sexuales prescindiendo de edad, sexo y —mientras no invada los derechos de otras personas— el método que se use”. Así, pues, en cuanto a relaciones sexuales con animales este libro declara: “En este país [Dinamarca], [...] es lícito satisfacer los deseos sexuales de este modo”. Sin embargo, la Ley de Dios a Israel dijo: “Cualquiera que se acueste con una bestia ha de ser muerto positivamente”. (Éxodo 22:19.)

Como ya hemos señalado enfáticamente, los testigos de Jehová tratan de seguir los principios morales de la Biblia e inculcarlos en sus hijos. Por tanto, no desean que sus hijos reciban educación sexual de personas que no respetan esos principios. Así, si padres que son Testigos creen que sus hijos están siendo adoctrinados con ideas, y/o materia visual, que violentamente socavan los principios que ellos enseñan en el hogar, quizá soliciten que a sus hijos se los exima de las clases sobre educación sexual.

Ciencia y evolución: Los testigos de Jehová están profundamente interesados en la ciencia. Respetan a los científicos dedicados que en gran manera han ampliado nuestro entendimiento del mundo que nos rodea. Estimulamos a nuestros jóvenes a estudiar los diversos ramos de la ciencia, puesto que esto contribuye a aumentar su aprecio de la sabiduría y poder de nuestro Creador.

Pero no todo lo que se llama ciencia es necesariamente hecho real. También hay teorías, como la teoría de la evolución, que con frecuencia se comunican a la gente como si fueran hecho científico. La evolución asegura que el primer organismo animado evolucionó de la materia inanimada. Entonces, al reproducirse aquel organismo, su prole cambió y se ramificó hasta finalmente producir todas las cosas vivas, incluso todas las personas que hasta ahora han vivido en la Tierra.

Los testigos de Jehová no creen que esta teoría sea cierta. Tampoco vamos al otro extremo de creer que la creación tomó siete días literales. Creemos que el primer hombre y la primera mujer fueron creados por Dios, así como lo fue toda otra forma de vida. Por eso, si en la sala de clases se consideran teorías acerca de los orígenes de las cosas animadas, apreciamos el que los maestros respeten las creencias bíblicas de los jóvenes Testigos. De hecho, creemos que estas creencias están en armonía con hechos científicos, que los jóvenes Testigos con gusto compartirán con usted.

Instrucción en la música y las artes: Los testigos de Jehová no creen que haya nada malo en la instrucción en la música y las artes misma. Con todo, los jóvenes Testigos no participan en ninguna clase de instrucción musical o artística que esté conectada con días de fiesta religiosos o patrióticos. Cuando se trata de participar en el programa de educación musical de una escuela, hay factores que los jóvenes Testigos y sus padres toman en consideración.

Por ejemplo, consideran dónde y en medio de qué circunstancias se recibe la instrucción, así como la naturaleza de la música que se toca. Si la instrucción envuelve servir en una banda de la cual quizá se espere que toque música en ocasiones relacionadas con la política o la religión, un testigo de Jehová no podría participar en ello. Hasta durante sesiones de ensayo, los estudiantes Testigos no participarían en tocar himnos nacionales ni canciones que tuvieran que ver con días festivos religiosos o nacionales. Otro asunto que se consideraría sería la cantidad de tiempo implicada, y si esto afectaría la presencia de los jóvenes en las reuniones cristianas y las actividades de la familia.

Adiestramiento para combate: En algunas escuelas se da instrucción militar a los estudiantes. Sin embargo, los testigos de Jehová desean estar entre aquellos de quienes la Biblia dice: “Tendrán que batir sus espadas en rejas de arado y sus lanzas en podaderas. No alzará espada nación contra nación, ni aprenderán más la guerra” (Isaías 2:4). En vista de eso, los testigos de Jehová piden que se los dispense de las clases de instrucción militar en la escuela.

La Biblia dice también: “Si es posible, en cuanto dependa de ustedes, sean pacíficos con todos los hombres” (Romanos 12:18). La aplicación de estos principios en nuestra vida también afecta la actitud que manifestamos hacia otras formas de combate. Entre éstas están las artes marciales, tales como el yudo, el karate y el kendo, así como el boxeo y la lucha libre. Aunque algunos llamen deportes a estas actividades, nosotros consideramos que la participación en ellas es entrenamiento con el propósito de pelear contra otros o causarles daño. Por consiguiente, los testigos de Jehová no participan en tales actividades de combate. Aunque los jóvenes Testigos piden que se los dispense de participar en ellas, con gusto cooperan hasta el grado posible con otros programas de educación física que se efectúan durante las horas escolares.

[Comentario en la página 28]

Estimulamos a nuestros jóvenes a estudiar las varias ramas de la ciencia

[Ilustración en la página 26]

Algunos tribunales han decidido que la instrucción religiosa debe dejarse a discreción de los padres