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Por qué envejecemos y morimos

Por qué envejecemos y morimos

Capítulo 4

Por qué envejecemos y morimos

1. (a) ¿Qué desean las personas normales respecto a salud y vida? (b) Debido a que la enfermedad y la muerte están por todas partes, ¿qué preguntas se presentan acerca del propósito de Dios para el hombre?

TODA persona normal desea la vida con buena salud. Buscamos alivio del dolor y el sufrimiento que las enfermedades ocasionan, y anhelamos escapar de alguna manera del efecto debilitador que tiene en nuestro cuerpo la edad avanzada. Nos duele, también, ver a personas a quienes amamos afligidas por estas cosas. Debido a esto, muchos se preguntan: “¿Era todo esto parte del propósito original de Dios? Cuando Dios creó al hombre, ¿era el propósito de él que el hombre envejeciera, y quedara sordo o ciego? ¿Quería él que la piel del hombre se arrugara con la edad, que su corazón enfermara y sus otros órganos dejaran de funcionar bien? Verdaderamente, ¿hizo Dios al hombre para que muriera?”

2. (a) ¿Creó Dios al hombre con algún defecto? (b) ¿Qué perspectiva, entonces, les dio Dios a Adán y Eva?

2 No, Jehová Dios no creó al hombre para un futuro tan miserable. La Biblia nos dice que Jehová proveyó un hermoso jardín como hogar para la primera pareja humana, y los bendijo. Repasando su obra creativa, Dios correctamente declaró que todo era “muy bueno.” (Génesis 1:28, 31) Esto significa que Adán y Eva fueron creados perfectos, sin defecto en mente o en cuerpo. (Deuteronomio 32:4; Proverbios 10:22) Tenían la perspectiva de vivir para siempre.

3. ¿Qué dicen los científicos acerca de la posibilidad de vida para el hombre?

3 Es interesante el hecho de que los científicos modernos saben que el cuerpo humano continuamente se renueva. Y dicen que, en medio de las condiciones adecuadas, pudiera vivir para siempre. Un ganador del Premio Nobel, el Dr. Linus Pauling, explicó que los tejidos corporales del hombre experimentan reemplazo y, teóricamente, deberían continuar haciendo eso para siempre. El bioquímico William Beck también hizo esta observación: “No veo razón para que la muerte, en la naturaleza de las cosas, tenga que ser inevitable.” Sin embargo, a pesar de estar hechos de este modo, los hombres continúan envejeciendo y muriendo. ¿Por qué? La Palabra de Dios, la Biblia, nos da la respuesta que satisface.

RESULTADOS DE LA DESOBEDIENCIA

4. ¿Qué prueba les impuso Dios a Adán y Eva, dando énfasis a la seria importancia de obedecer?

4 Cuando Jehová creó a Adán y Eva, ellos llegaron a ser la parte terrestre de la gran familia de Dios, que ya incluía a un gran número de criaturas espirituales en los cielos. Dios era el Padre de la pareja humana, puesto que les había dado vida. La dádiva de la vida, no obstante, era condicional; es decir, continuaría siendo de ellos solo mientras cumplieran con la condición de dar obediencia amorosa a su Padre celestial. La obediencia a la ley es necesaria si la paz y el buen orden han de continuar, de modo que ellos tenían que reconocer a Dios como su Gobernante Supremo. ¿Sabían esto ellos? Sí, porque Jehová les impuso a ellos una prueba que daba énfasis a la seria importancia de obedecer. Le dijo a Adán: “De todo árbol del jardín puedes comer hasta quedar satisfecho. Pero en cuanto al árbol del conocimiento de lo bueno y lo malo no debes comer de él, porque en el día que comas de él positivamente morirás.”—Génesis 2:16, 17.

5. (a) ¿Impondría dificultad y privación a Adán y Eva la prueba de obediencia? (b) ¿Por qué no eran las relaciones sexuales el ‘fruto prohibido’?

5 Esta prueba de obediencia no era difícil. No se les privó del alimento necesario, ni se les probó más allá de lo que podían resistir. No obstante, su obediencia mostraría que apreciaban su relación con Dios. (1 Juan 5:3) Aunque algunas personas tienen la idea de que ‘el fruto prohibido’ tenía que ver con las relaciones sexuales entre hombre y mujer, no era así. Dios mismo ya les había dicho que ‘fueran fructíferos y se hicieran muchos y llenaran la tierra.’ (Génesis 1:28) Cuando Dios ordenó que no comieran del fruto de cierto árbol, esto meramente significó que Dios escogió uno de los muchos árboles frutales de Edén y le mandó a la pareja humana que no comiera de su fruto.

6. (a) ¿Por qué se le llamó al árbol “el árbol del conocimiento de lo bueno y lo malo”? (b) Cuando Adán y Eva comieron del fruto, ¿qué cosa mala estaban haciendo en cuanto a su Padre celestial?

6 ¿Por qué se le llamó al árbol “el árbol del conocimiento de lo bueno y lo malo”? Porque, como resultado del mandato de Dios, su fruto simbolizaba el derecho que Dios tiene de decidir para sus criaturas lo que es “bueno” y lo que es “malo” para ellos. Por lo tanto, el que la pareja humana tomara de este fruto significaría que estaban volviéndole la espalda a su Padre celestial y rechazando su guía divina y perfecta voluntad. Aunque sencilla, la prueba implicaba mucho. Envolvía el hecho de que el hombre dependiera de su Creador y de que el hombre reconociera la autoridad divina. Recuerde, también, que Jesucristo aplicó a hombres imperfectos la regla de que “la persona fiel en lo mínimo es fiel también en lo mucho, y la persona injusta en lo mínimo es injusta también en lo mucho.” (Lucas 16:10) ¡Cuánto más aplicaba esto a criaturas perfectas!

7. (a) ¿Qué le dijo a Eva acerca del fruto del árbol una criatura invisible que habló por medio de una serpiente? (b) ¿Qué hizo entonces Eva, y cuando lo supo su esposo, qué hizo él?

7 ¿Por qué quebrantó Eva la ley de Dios y comió del fruto? La idea no empezó con ella, sino que se la presentó una criatura espíritu que usó a una baja serpiente para hablar por medio de ella. A esa criatura espíritu, identificada en la Biblia como Satanás el Diablo, se le llama, por lo tanto, “la serpiente original.” (Revelación 12:9) La criatura invisible que habló por medio de la serpiente negó abiertamente la verdad del mandato de Dios que Eva citó. Representó el fruto del árbol como algo que podía hacer que ella fuera como Dios, decidiendo por sí misma lo que era “bueno” y lo que era “malo.” Eva entonces empezó a considerar el fruto como muy deseable y desobedeció a Dios comiendo de él. Adán, su esposo y cabeza, cuando supo lo que ella había hecho, no se opuso al proceder de ella, sino que se unió a ella en el mismo proceder.—Génesis 3:1-6; Santiago 1:14, 15; 1 Corintios 11:3.

8. (a) Por el acto de desafuero de ellos, ¿de qué fueron culpables Adán y Eva? (b) ¿Por qué no debemos juzgar lo grave de lo que Adán y Eva hicieron por la manera en que la gente considera la desobediencia y el robar hoy?

8 Por este acto de desafuero se hicieron culpables de pecado, y por lo tanto se acarrearon la pena del pecado. (1 Juan 3:4) Al considerar lo correcto de la decisión de Dios no debemos cometer el error de juzgar lo grave de lo que Adán y Eva hicieron por la manera en que muchas personas consideran las cosas en nuestro tiempo. Hoy es común la desobediencia a los padres, y a menudo no se castiga. El robar también es común, y muchos piensan que, si lo que se roba es pequeño, el robo no importa mucho. La rebelión y el hablar contra la autoridad también son frecuentes hoy. ¡Pero eso no hace que estas cosas sean correctas! Mucho del fruto podrido que vemos hoy día en la forma del aumento de la delincuencia y los crímenes se debe a que los padres y otros que están en autoridad no han corregido los asuntos desde el principio.—Proverbios 13:24; Eclesiastés 8:11.

9. (a) Al considerar lo que Adán y Eva verdaderamente hicieron, ¿por qué era lo apropiado para él mismo y para su familia universal el que Dios sostuviera la ley? (b) ¿Qué pena sufrió la pareja desaforada por su pecado?

9 Dios no iba a estimular el hacer lo malo por medio de no poner en vigor su propia ley. Por su desobediencia Adán y Eva mostraron gran falta de amor a Aquel que les había suministrado todo tan maravillosamente. Fueron culpables de robar, porque tomaron lo que el Creador de ellos les dijo que no era de ellos. Peor aun, se unieron al enemigo de Dios, y por sus acciones, llamaron a Dios un mentiroso. Como lo apropiado para él mismo y para toda su familia universal, Jehová tenía que sostener la ley. Lo hizo. Como resultado del pecado deliberado de ellos, la pareja desaforada fue echada de Edén para morir.—Génesis 3:22-24.

10. ¿Cómo se puede ilustrar el efecto del pecado con una máquina, y a qué llevó el pecado a Adán y Eva?

10 El efecto que tuvo en ellos el pecado se podría ilustrar por lo que le sucede a una máquina excelente cuando no se usa apropiadamente, según las instrucciones del que la ha hecho. La máquina desarrolla debilidades, y, con el tiempo, se daña. De manera parecida, como resultado de pasar por alto las instrucciones de su Hacedor, Adán y Eva perdieron su perfección. La mente y el cuerpo de ellos comenzaron a dañarse, y finalmente cesaron de funcionar, al sobrevenir la muerte. Eso es lo que significó para ellos la desobediencia y el ser quitados del favor de Dios. (Génesis 3:16-19) Después que Adán había gastado la tremenda vitalidad de su cuerpo que en un tiempo había sido perfecto, murió a la edad de 930 años. Esto quedó dentro del simbólico “día” de mil años que Dios había fijado.—Génesis 5:5; 2 Pedro 3:8.

EFECTOS EN LA PROLE

11. ¿Cómo explica la Biblia por qué hoy enfermamos y morimos?

11 Pero, puesto que nosotros hoy no desobedecimos aquella ley de Edén, ¿por qué es que nosotros también enfermamos y morimos? Es por esta razón: Toda la prole de Adán nació después de la desobediencia de él. Así, su prole heredó de él el pecado y la muerte. Todos los hombres heredan la imperfección, porque todos vienen de Adán y Eva. Como nos dice el libro bíblico de Job: “¿Quién puede producir a alguien limpio de alguien inmundo? No hay ninguno.” (Job 14:4) Además, en Romanos 5:12 la Biblia explica: “Por medio de un solo hombre [Adán] el pecado entró en el mundo y la muerte por medio del pecado, y así la muerte se extendió a todos los hombres.” Tal como no se puede producir una máquina perfecta usando un molde imperfecto, así Adán en su imperfección no podía producir hijos perfectos y libres del pecado.—Salmo 51:5 [50:7, TA].

12. ¿Cómo se puede comparar el efecto del pecado de Adán y Eva con lo que sucede cuando personas que viven inmoralmente tienen hijos?

12 El efecto del pecado de Adán y Eva en su prole se puede comparar con lo que frecuentemente sucede cuando personas que pasan por alto la ley de Dios y viven inmoralmente tienen hijos. Estas personas quizás contraigan enfermedad en los órganos sexuales que Dios les dio para producir sus hijos. Los hijos de tales padres “inmundos” quizás nazcan con daño físico o mental debido al pecado de sus padres. Así, también, nuestros primeros padres se hicieron “inmundos,” imperfectos, sujetos a enfermedad y finalmente a muerte. Ellos podían pasar a su prole solo lo que ellos mismos tenían: imperfección, con un futuro de enfermedad y muerte. Es por eso que todos envejecemos y morimos, y por eso que tan fácilmente hacemos lo que es incorrecto.

13. ¿Hay diferencia entre el pecado deliberado y el pecado involuntario? Explique.

13 No obstante, una cosa es cometer errores involuntarios debido al pecado heredado, pero es otra cosa enteramente diferente el practicar deliberadamente lo que uno sabe que es incorrecto. (1 Juan 5:16) Si uno verdaderamente se arrepiente de errores que comete debido a debilidades heredadas, puede esperar perdón misericordioso de parte de Dios. (Proverbios 28:13) Pero tiene que ejercer cuidado para que, una vez que sepa lo que es correcto, no escoja deliberadamente seguir un proceder contrario a la voluntad de Dios. El hacer eso significaría la pérdida del favor de Dios y de la vida misma.—Deuteronomio 30:15-20; Hebreos 10:26, 27.

14. ¿Qué provisión ha hecho Dios para salvar a la humanidad del pecado y la muerte?

14 Felizmente, Jehová ha hecho una provisión amorosa para salvar de los malos efectos del pecado y la muerte heredados a los arrepentidos. Este grandioso alivio vendrá por medio del sacrificio de rescate de Jesucristo. Acerca de esta provisión la Biblia dice: “Dios envió a su Hijo unigénito al mundo para que nosotros consiguiésemos la vida por medio de él.” (1 Juan 4:9) De modo que, al tiempo debido de Dios, bajo el dominio del Reino de su Hijo, la imperfección humana heredada será gradualmente quitada, y la humanidad ya no sentirá los efectos del pecado de Adán. Pues, ¡hasta la muerte que heredamos de Adán ya no tendrá poder sobre nosotros! (Revelación 21:3, 4) Usted puede ser uno que disfrute de tales bendiciones. ¿Cómo? Aprovechando las provisiones que Jehová ha hecho y probando que le tiene amor por medio de guardar sus mandamientos.—Eclesiastés 12:13.

[Preguntas del estudio]

[Ilustración de la página 30]

Adán violó deliberadamente la ley clara dada por Dios