Malvavisco
(heb. jal·la·múth).
Planta perenne relacionada estrechamente con la malva real. Los tallos leñosos del malvavisco (Althaea officinalis) alcanzan 1,8 m. de altura. Las hojas de la planta, grandes y anchas, son dentadas y terminan en una punta afilada. Tanto los tallos como las hojas están cubiertos de una pelusa suave y aterciopelada. Las flores son de cinco pétalos y de color rosa pálido, y tienen unos 5 cm. de diámetro. La raíz blanca del malvavisco, parecida a una zanahoria, se ha usado como alimento en tiempos de hambre. La única referencia bíblica al malvavisco alude a su insipidez. (Job 6:6.)
El término hebreo jal·la·múth, que únicamente se encuentra en Job 6:6, se ha traducido “huevo” (CI, RH, LT), “leche” (NBE), “queso” (CTL, nota), “malva(s)” (FS; PIB; Val, 1989), “planta(s)” (BAS, nota; Str), “verdolaga” (CI, nota) y “altea” o “malvavisco” (CJ, NM), que es la traducción que ofrece el léxico hebreo y arameo de L. Koehler y W. Baumgartner. (Lexicon in Veteris Testamenti Libros, Leiden, 1958, pág. 304.)