limpio; puro
En la Biblia, los términos originales que se traducen como “limpio” y “puro” no solo se refieren a la limpieza física; también se pueden referir a mantener o recuperar un estado sin defectos ni manchas o sin nada que ensucie, adultere o corrompa en sentido moral o espiritual. Bajo la Ley mosaica, estos términos se refieren a la limpieza ceremonial (Le 10:10; Sl 51:7; Mt 8:2; Snt 1:27).