1, 2. Después de pasar toda la noche pescando, ¿qué lección aprendió Pedro?

SIETE de los discípulos de Jesús habían estado pescando toda la noche en el mar de Galilea, pero no lograron atrapar ni un solo pez. Al amanecer, alguien estaba observándolos desde la playa. Era Jesús resucitado. Él les dijo: “‘Echen la red al lado derecho de la barca, y hallarán’. Entonces la echaron, pero ya no podían sacarla a causa de la multitud de peces” (Juan 21:1-6).

² Jesús les dio a sus discípulos pan y pescado para desayunar. Luego miró a Simón Pedro y le preguntó: “Simón hijo de Juan, ¿me amas más que a estos?”. Jesús sabía que Pedro amaba la pesca. Así que parece que Jesús le estaba preguntando a Pedro si lo amaba más a él y sus enseñanzas que a su negocio de pesca. Pedro le respondió a Jesús: “Señor, tú sabes que te tengo cariño” (Juan 21:15). Pedro aprendió una importante lección: que debía amar a Cristo por encima de todas las cosas. Desde ese día en adelante, Pedro demostró que amaba a Cristo manteniéndose  ocupado en la predicación. Así se convirtió en un valioso apoyo para la congregación cristiana.

3. ¿Por qué debemos tener cuidado los cristianos?

³ ¿Qué nos enseña lo que Jesús le dijo a Pedro? Que debemos tener cuidado y no dejar que se debilite el amor que le tenemos a Cristo. Jesús sabía que la vida en este mundo sería estresante y que tendríamos inquietudes y problemas. En su historia sobre el sembrador, Jesús dijo que algunas personas aceptarían “la palabra del reino” con entusiasmo. Pero también dijo que con el tiempo “las inquietudes de este sistema de cosas y el poder engañoso de las riquezas” ahogarían la palabra y esas personas perderían el entusiasmo (Mateo 13:19-22; Marcos 4:19). Si no tenemos cuidado, las preocupaciones de la vida podrían afectar nuestro servicio a Jehová. Por eso, Jesús les advirtió a sus discípulos: “Presten atención a sí mismos para que sus corazones nunca lleguen a estar cargados debido a comer con exceso y beber con exceso, y por las inquietudes de la vida” (Lucas 21:34).

4. ¿Qué nos ayudará a ver si nuestro amor a Cristo es fuerte? (Vea las imágenes del principio del artículo).

⁴ Al igual que Pedro, nosotros también podemos demostrar que amamos a Cristo poniendo la predicación en primer lugar en nuestra vida. ¿Cómo podemos asegurarnos de que seguimos haciéndolo así? Podemos preguntarnos lo siguiente: “¿Qué es lo más importante para mí? ¿Qué me hace más feliz? ¿Servir a Jehová o hacer otras cosas?”. Para responder estas preguntas, veremos tres campos de la vida que podrían debilitar el amor que sentimos por Cristo. Estos campos son el trabajo, el entretenimiento y las cosas materiales.

5. ¿Qué responsabilidad tienen los cabezas de familia?

⁵ Pedro no pescaba solo por placer. Lo hacía para mantener a su familia. Hoy día, los cabezas de familia también tienen la responsabilidad que Jehová les ha dado de mantener a su familia (1 Timoteo 5:8). Para cumplir con esta responsabilidad, deben trabajar duro. Pero en estos últimos días, el trabajo puede causar mucha ansiedad.

6. ¿Por qué puede ser estresante el trabajo?

⁶ En la actualidad, hay más personas buscando trabajo que puestos de trabajo disponibles. Por esta razón, compiten para conseguir un empleo. Mucha gente se siente obligada a trabajar más horas, a menudo por menos dinero. Hoy más que nunca, las empresas tratan de producir más con menos empleados. Esto a menudo hace que los trabajadores se estresen, se agoten y hasta se enfermen. Muchos temen perder su empleo si no hacen todo lo que les exige el jefe.

7, 8. a) ¿A quién somos leales por encima de todo? b) ¿Qué valiosa lección aprendió un hermano de Tailandia sobre el trabajo?

 ⁷ Los cristianos somos más leales a Jehová que a cualquier otra persona, incluso a nuestro jefe (Lucas 10:27). Trabajamos para cubrir nuestras necesidades básicas y para poder seguir sirviéndole a Jehová. Pero si no tenemos cuidado, el trabajo podría afectar nuestro servicio a Dios. Veamos qué nos enseña lo que le pasó a un hermano de Tailandia. Él cuenta: “Reparaba computadoras, un trabajo muy interesante, pero que me ocupaba muchas horas. Así que no tenía prácticamente tiempo para los asuntos espirituales. Al final me di cuenta de que debía cambiar de trabajo si quería poner primero el Reino”. ¿Qué hizo este hermano?

⁸ Él explica: “Después de hacer planes por más o menos un año, decidí dedicarme a vender helados en la calle. Al principio, me costó ganar suficiente dinero, y me sentí desanimado. Cuando veía a mis antiguos compañeros, se reían de mí y me preguntaban por qué creía que vender helados era mejor que arreglar computadoras en un lugar con aire acondicionado. Le pedí a Jehová que me ayudara a aguantar y alcanzar mi meta de tener más tiempo para actividades espirituales. Las cosas no tardaron en mejorar. Conocía mejor los gustos de mis clientes y mis helados eran mejores. Al poco tiempo, vendía a diario todo el helado que hacía. La verdad es que ganaba más que cuando reparaba computadoras. Soy más feliz porque no tengo la presión ni las preocupaciones que tenía antes. Y, lo más importante, me siento más cerca de Jehová” (lea Mateo 5:3, 6).

9. ¿Cómo podemos mantener un punto de vista equilibrado sobre el trabajo?

⁹ A Jehová le gusta que seamos trabajadores, y vale la pena serlo (Proverbios 12:14). Pero no podemos permitir que el trabajo llegue a ser más importante que el servicio a Jehová. Hablando de nuestras necesidades materiales básicas, Jesús dijo: “Sigan, pues, buscando primero el reino y la justicia de Dios, y todas estas otras cosas les serán añadidas” (Mateo 6:33). Ahora bien, ¿cómo podemos saber si tenemos un punto de vista equilibrado sobre el trabajo? Podemos preguntarnos: “¿Me parece apasionante mi trabajo mientras que mi servicio a Jehová me parece poco especial y hasta aburrido?”. La respuesta que demos a esta pregunta nos ayudará a ver con claridad a quién o qué amamos de verdad.

10. ¿Qué valiosa lección enseñó Jesús?

¹⁰ Jesús nos enseñó qué debe ser lo más importante en la vida. Un día, él fue a casa de María y Marta, que eran hermanas. Enseguida, Marta se puso a prepararle comida a Jesús, pero María se sentó junto a él para escucharlo. Entonces, Marta se quejó de que María no la estaba ayudando. Pero Jesús le dijo a Marta: “María escogió la buena porción, y no le será quitada” (Lucas 10:38-42). Así, Jesús enseñó una valiosa lección. ¿Cuál? Que para que las cosas de la vida no nos distraigan y para demostrar que amamos a Cristo, debemos escoger “la buena porción”. Esto  significa que nuestra amistad con Jehová debe ser siempre lo más importante en la vida.

11. ¿Qué dice la Biblia sobre el descanso y el entretenimiento?

¹¹ Todos llevamos vidas muy ocupadas. Por eso a veces necesitamos descansar y relajarnos. La Biblia dice: “En cuanto al hombre, no hay nada mejor que el que coma y en realidad beba y haga que su alma vea el bien a causa de su duro trabajo” (Eclesiastés 2:24). Jesús sabía que sus discípulos necesitaban descansar. Por ejemplo, después de que habían pasado mucho tiempo predicando, Jesús les dijo: “Vengan, ustedes mismos, en privado, a un lugar solitario, y descansen un poco” (Marcos 6:31, 32).

12. ¿Por qué debemos tener cuidado con el entretenimiento? Dé un ejemplo.

¹² El entretenimiento nos permite descansar y relajarnos. Pero debemos tener cuidado para que este no se convierta en lo más importante de nuestra vida. En el siglo primero, muchas personas tenían esta actitud: “Comamos y bebamos, porque mañana hemos de morir” (1 Corintios 15:32). Hoy día, también es común esta actitud. Por ejemplo, un joven de Europa occidental comenzó a asistir a nuestras reuniones. Pero le gustaba tanto divertirse que dejó de asistir a ellas. Más tarde, se dio cuenta de que centrar su vida en las diversiones le causó muchos problemas. Así que empezó a estudiar de nuevo la Biblia. Con el tiempo, empezó a predicar el mensaje del Reino. Después de bautizarse, él dijo que lo único que lamentaba era haber perdido tanto tiempo. Dijo que servir a Jehová lo hacía mucho más feliz que ir tras las diversiones que ofrece el mundo.

13. a) Explique con un ejemplo por qué no es bueno que dediquemos demasiado tiempo al entretenimiento. b) ¿Qué podría ayudarnos a tener un punto de vista equilibrado sobre el entretenimiento?

¹³ El entretenimiento debe servir para relajarnos y recuperar fuerzas. Entonces, ¿cuánto tiempo deberíamos dedicarle? El siguiente ejemplo puede ayudarnos a responder esta pregunta. A muchos de nosotros nos gustan los bizcochos y los dulces. Pero sabemos que podemos enfermarnos si los comemos todo el tiempo. Si queremos estar sanos, debemos comer alimentos nutritivos. Pues bien, si pasamos la mayor parte de nuestro tiempo divirtiéndonos, dañaremos nuestra amistad con Jehová. ¿Qué nos puede ayudar a averiguar si tenemos un punto de vista equilibrado sobre el entretenimiento? Podemos escoger una semana y anotar la cantidad de horas que dedicamos al servicio a Jehová en actividades como las reuniones, la predicación y el estudio de la Biblia. Después, podemos anotar la cantidad de horas que dedicamos esa misma semana a los deportes, la televisión, los videojuegos o cualquier otro tipo de diversión. Al comparar el número de horas, veremos si necesitamos hacer algún cambio (lea Efesios 5:15, 16).

14. ¿Qué nos ayudará a escoger entretenimiento sano?

¹⁴ Jehová nos deja escoger nuestro  entretenimiento. Y los cabezas de familia también pueden escoger el entretenimiento de su familia. En la Biblia, hay principios que muestran lo que piensa Jehová. Estos principios nos ayudan a tomar buenas decisiones * (vea la nota). El entretenimiento sano es un regalo de Dios (Eclesiastés 3:12, 13). Es verdad que todos tenemos distintos gustos a la hora de divertirnos (Gálatas 6:4, 5). Pero sin importar cuáles sean nuestros gustos, debemos tener cuidado. Jesús dijo: “Donde está tu tesoro, allí también estará tu corazón” (Mateo 6:21). Si amamos a nuestro Rey, Jesús, demostraremos con lo que pensamos, decimos y hacemos que el Reino es lo más importante para nosotros (Filipenses 1:9, 10).

15, 16. a) ¿Por qué puede ser el materialismo una trampa? b) ¿Qué sabia advertencia dio Jesús sobre las cosas materiales?

¹⁵ Muchas personas hoy día desean tener lo último en moda, teléfonos, computadoras y otras cosas. Han caído en el materialismo, que es dar demasiada importancia a las cosas materiales y al dinero. Los cristianos debemos examinarnos para ver qué es lo más importante para nosotros. Preguntémonos: “¿Paso más tiempo pensando en  los últimos modelos de automóviles o en la última moda que preparándome para las reuniones? ¿Estoy tan ocupado con las actividades diarias que ahora paso menos tiempo orando o leyendo la Biblia?”. Si no tenemos cuidado, el amor a las cosas materiales puede hacerse más fuerte que nuestro amor a Cristo. Debemos pensar en lo que dijo Jesús: “Guárdense de toda suerte de codicia” (Lucas 12:15). ¿Por qué dijo esto Jesús?

¹⁶ Jesús dijo: “Nadie puede servir como esclavo a dos amos; porque u odiará al uno y amará al otro, o se apegará al uno y despreciará al otro. No pueden ustedes servir como esclavos a Dios y a las Riquezas” (Mateo 6:24). No podemos darle a Jehová lo mejor y al mismo tiempo centrar nuestra vida en las cosas materiales. Como somos imperfectos, debemos seguir luchando contra “los deseos de nuestra carne”, entre ellos los deseos materialistas (Efesios 2:3).

17. a) ¿Por qué les cuesta a algunas personas tener un punto de vista equilibrado sobre las cosas materiales? b) ¿Qué nos ayudará a luchar contra el materialismo?

¹⁷ Muchas personas están tan centradas en satisfacer sus deseos que no logran tener un punto de vista equilibrado sobre las cosas materiales (lea 1 Corintios 2:14). Como no piensan con claridad, no son capaces de distinguir lo que está bien de lo que está mal (Hebreos 5:11-14). Quizá su deseo de conseguir cosas se vuelva cada vez más fuerte. Y mientras más cosas tienen, más cosas quieren (Eclesiastés 5:10). Pero podemos luchar contra esta forma de pensar. ¿Cómo? Leyendo a menudo la Biblia. Esto nos dará fuerzas para luchar contra el materialismo (1 Pedro 2:2). Jesús dedicó tiempo a pensar en la sabiduría de Jehová, por eso pudo aguantar las tentaciones del Diablo (Mateo 4:8-10). De igual manera, si nosotros no queremos caer en el materialismo, debemos poner en práctica los sabios consejos de Jehová. Así le demostraremos a Jesús que lo amamos más que a las cosas materiales.

18. ¿De qué debemos asegurarnos?

¹⁸ Cuando Jesús le preguntó a Pedro: “¿Me amas más que a estos?”, le estaba enseñando que el servicio a Jehová debía ser el centro de su vida. Es interesante que Pedro significa “Trozo de Roca”, pues él demostró que era firme como una roca en su servicio a Jehová (Hechos 4:5-20). Nosotros también debemos asegurarnos de que nuestro amor a Cristo se mantenga firme como una roca. Asegurémonos de mantener el trabajo, las diversiones y las cosas materiales en su debido lugar. Si lo hacemos, será como si le dijéramos a Jesús lo mismo que Pedro: “Señor, tú sabes que te tengo cariño”.