1-3. a) ¿Qué pudo haber pasado entre Evodia y Síntique? (Vea el dibujo del principio del artículo). b) ¿Cómo podemos evitar tener problemas con los hermanos?

LOS cristianos valoramos muchísimo la Biblia porque sabemos que es el libro de Dios. Sus consejos nos ayudan a evitar problemas y nos corrigen cuando nos equivocamos. ¿Cómo reaccionamos a estos consejos? Pensemos en lo que pasó entre dos hermanas ungidas del siglo primero llamadas Evodia y Síntique. La Biblia dice que hubo un problema entre ellas, aunque no dice por qué. Imaginemos lo que pudo haber pasado.

² Quizás Evodia invitó a algunos hermanos a comer en su casa, pero no invitó a Síntique. Después, cuando Síntique escuchó a los hermanos hablar del buen rato que habían pasado, se molestó mucho. Quizás pensó: “No puedo creer que Evodia no me invitara. ¡Creí que éramos buenas amigas!”. Tal vez Síntique pensó que Evodia tenía algo contra ella y que estaba tratando de evitarla. Así que invitó a los mismos hermanos a una comida en su casa, pero no invitó a Evodia.  Esta situación quizás llegó a disgustar a otros hermanos de la congregación. La Biblia dice que Pablo corrigió a las dos hermanas y que las animó a hacer las paces. Seguro que ellas obedecieron su consejo y siguieron sirviendo felices a Jehová (Filipenses 4:2, 3).

³ Hoy día, nosotros también podríamos tener un problema con algún hermano de la congregación. Pero podemos resolver o incluso evitar estos problemas. ¿Cómo? Obedeciendo los consejos de la Biblia. Cuando obedecemos estos consejos, demostramos que de verdad apreciamos el libro de Dios, la Biblia (Salmo 27:11).

4, 5. ¿Qué consejos nos da la Palabra de Dios para controlar las emociones?

⁴ A veces es difícil controlar las emociones. Por ejemplo, quizás nos sintamos muy tristes o enojados cuando alguien nos ofende o nos trata mal por nuestra cultura, raza o aspecto físico. Esto puede herirnos mucho más si el que nos ofende es alguien de la congregación. ¿Qué consejos de la Palabra de Dios pueden ayudarnos a enfrentar esta situación?

⁵ Jehová sabe lo que puede pasar si no controlamos las emociones. Cuando estamos ofendidos o enojados, podemos decir o hacer cosas que después lamentemos. En la Biblia, Jehová nos aconseja que controlemos las emociones. Nos dice: “No te des prisa en tu espíritu a sentirte ofendido”. Pensemos en todos los problemas que nos evitaremos si seguimos este consejo y no nos ofendemos con facilidad (lea Eclesiastés 7:9 y Proverbios 16:32). La Biblia también nos dice que perdonemos a los demás. De hecho, Jesús dijo que si no lo hacemos, Jehová no nos perdonará a nosotros (Mateo 6:14, 15). ¿Necesitamos ser más pacientes y estar más dispuestos a perdonar?

6. ¿Qué podría pasar si no controlamos las emociones?

⁶ Si no controlamos las emociones, podríamos estar siempre enojados y hasta llegar a odiar a alguien. Incluso podríamos hacer que otros hermanos de la congregación se sintieran como nosotros. Quizás trataríamos de disimular el enojo o el odio que sentimos. Pero tarde o temprano otros lo notarían y quizás se alejarían de nosotros (Proverbios 26:24-26). Si algo así nos sucediera, los ancianos intentarían ayudarnos con la Biblia para que venciéramos esos sentimientos y perdonáramos a los demás (Levítico 19:17, 18; Romanos 3:11-18). Si estuviéramos en esta situación, ¿obedeceríamos los consejos de la Biblia?

7, 8. a) ¿Cómo dirige Jehová a su pueblo? b) ¿Qué instrucciones nos da la Biblia, y por qué debemos obedecerlas?

⁷ Hoy día, Jehová dirige y educa a quienes componen la parte de su organización que está en la Tierra. ¿Cómo lo hace? Ha nombrado “cabeza de la congregación” a Cristo (Efesios 5:23). Y Cristo ha nombrado al “esclavo fiel y discreto” para que enseñe y dirija al pueblo de Dios (Mateo 24:45-47). Como la Biblia es la Palabra de Dios, este esclavo  la valora muchísimo. Esto es lo mismo que hacía el cuerpo gobernante del siglo primero (lea 1 Tesalonicenses 2:13). ¿Qué instrucciones nos da la Biblia?

⁸ La Biblia nos dice que nos reunamos con regularidad (Hebreos 10:24, 25). Nos anima a todos a tener las mismas creencias (1 Corintios 1:10). También nos dice que sigamos “buscando primero el reino” (Mateo 6:33). Además, nos manda predicar de casa en casa, en lugares públicos y en todo lugar donde haya gente (Mateo 28:19, 20; Hechos 5:42; 17:17; 20:20). Les da instrucciones a los ancianos para que mantengan limpias las congregaciones (1 Corintios 5:1-5, 13; 1 Timoteo 5:19-21). Y nos dice que mantengamos limpio nuestro cuerpo y que evitemos pensamientos y costumbres que Jehová odia (2 Corintios 7:1).

9. ¿A quién ha estado usando Jesús para ayudarnos a entender la Palabra de Dios?

⁹ Algunas personas quizás piensen que no necesitan que les expliquen lo que enseña la Biblia. Pero desde 1919, Jesús ha estado usando al “esclavo fiel y discreto” para ayudar al pueblo de Dios a entender la Biblia y obedecerla. Cuando obedecemos los consejos de la Biblia, mantenemos la congregación limpia, unida y en paz. Preguntémonos: “¿Seré leal a Jesús y seguiré las instrucciones del esclavo fiel?”.

10. ¿Cómo se representa en el libro de Ezequiel a la parte de la organización de Jehová que está en el cielo?

¹⁰ La Biblia enseña que los siervos de Jehová en el cielo también están organizados. Por ejemplo, Ezequiel tuvo una visión en la que vio a Jehová sobre un carro que se movía a toda velocidad en cualquier dirección que Jehová quería (Ezequiel 1:4-28). Este carro representa la parte de la organización de Dios que está en el cielo. Esta parte de la organización de Jehová siempre está lista para seguir su guía. Y además, dirige la parte de la organización de Dios que está en la Tierra. Pensemos en todos los cambios que se han hecho en la organización de Dios en los últimos 10 años. Recordemos que Jehová dirige a su organización para que haga esos cambios. Su Hijo Cristo y los ángeles pronto destruirán este mundo malvado. Así todos respetarán a Jehová, su nombre y el derecho que él tiene de gobernar.

11, 12. ¿Qué ha logrado la organización de Jehová en estos últimos días?

¹¹ Pensemos en todo lo que ha logrado la organización de Jehová en estos últimos días. Primero, en el campo de la construcción. Cientos de hermanos y hermanas han trabajado muchísimo en la construcción de la nueva central de los testigos de Jehová, en Warwick (Nueva York, Estados Unidos). Otros miles de voluntarios están construyendo Salones del Reino y sucursales por todo el mundo. A estos voluntarios los dirige el Departamento Mundial de Diseño y Construcción. ¿Verdad que estamos muy agradecidos por los grandes esfuerzos de todos estos hermanos? La construcción de esos edificios es posible gracias al dinero que los siervos de Jehová de todo el mundo donan con tanto esfuerzo. Jehová bendice a su  pueblo por su apoyo humilde y leal (Lucas 21:1-4).

¹² Segundo, veamos lo que se ha logrado en el campo de la educación. A Jehová le encanta educar a su pueblo (Isaías 2:2, 3). Pensemos en las escuelas que él usa para educarnos. Tenemos la Escuela del Servicio de Precursor, la Escuela para Evangelizadores del Reino, la Escuela de Galaad, la Escuela de Nuevos Betelitas, la Escuela para Superintendentes de Circuito y sus Esposas, la Escuela para Ancianos de Congregación, la Escuela del Ministerio del Reino y la Escuela para Miembros de Comités de Sucursal y sus Esposas. También tenemos nuestro sitio de Internet jw.org, donde podemos encontrar la Biblia y publicaciones en cientos de idiomas. Este sitio también tiene secciones especiales para los niños y las familias, y una sección de noticias. ¿Estamos usando nuestro sitio de Internet jw.org en la predicación y la adoración en familia?

13. ¿Qué responsabilidad tenemos los siervos de Jehová?

¹³ Es un gran honor formar parte de la organización de Jehová y saber lo que él quiere que hagamos. Claro, como sabemos lo que a él le agrada, tenemos la responsabilidad de obedecerle y hacer lo que está bien. A mucha gente le gusta hacer cosas malas. Pero nosotros debemos odiar lo que es malo, como Jehová lo odia (Salmo 97:10). No debemos ser como los que piensan que “lo bueno es malo y lo malo es bueno” (Isaías 5:20). Queremos agradar a Jehová. Por eso estamos decididos a estar limpios en sentido físico, moral y espiritual (1 Corintios 6:9-11). Sabemos que lo que Jehová nos dice en la Biblia es para nuestro propio bien. Además, amamos a Jehová y queremos ser leales a él. Por eso obedecemos sus normas en la casa, la congregación, el trabajo, la escuela o en cualquier otro lugar (Proverbios 15:3). Veamos algunas situaciones en las que debemos ser leales a Jehová.

14. ¿Cómo pueden demostrar los padres que son leales a Jehová?

¹⁴ Al educar a los hijos. En la Biblia, Jehová les dice a los padres cómo deben educar a sus hijos. Los padres cristianos demuestran que son leales a Jehová cuando le obedecen. Ellos deben tener cuidado de no pensar como piensan las personas de este mundo (Efesios 2:2). Por ejemplo, en algunas culturas quizás un padre diga que son las mujeres las que deben educar a los hijos. Pero la Biblia dice con claridad que el padre tiene la responsabilidad de enseñarles a sus hijos sobre Jehová (Efesios 6:4). Los padres y las madres que aman a Jehová quieren que sus hijos tengan una buena amistad con él, tal como la tuvo Samuel desde que era muy niño (1 Samuel 3:19).

15. ¿Cómo le demostramos a Jehová que somos leales al tomar decisiones importantes?

¹⁵ Al tomar decisiones. Antes de tomar decisiones importantes, debemos averiguar lo que piensa Jehová. ¿Cómo? Buscando la guía que él da mediante la Biblia y su organización. Así le demostramos a Jehová que somos leales a él. Por ejemplo, algunas personas que van a trabajar a otro país y tienen hijos allí deciden enviarlos recién nacidos a su país de origen para que los críen sus parientes. De esta manera, el padre y la madre pueden seguir trabajando en el extranjero. Claro, esta decisión es personal. Pero los padres deben preguntarse cómo ve Jehová su decisión (lea Romanos 14:12). Recordemos que antes de tomar decisiones importantes sobre la familia y el trabajo, debemos pensar en lo que dice la Biblia. Necesitamos que nuestro Padre celestial nos ayude a dirigir nuestros pasos (Jeremías 10:23).

16. ¿Qué decisión tuvo que tomar una madre cuando nació su hijo? ¿Qué la ayudó a tomar la decisión correcta?

 ¹⁶ Cierta pareja se fue a vivir a otro país y allí tuvieron un niño. Planeaban enviarlo a vivir con los abuelos a su país de origen. Pero en esa época, la esposa empezó a recibir clases de la Biblia con una testigo de Jehová. Ella aprendió que tenía el deber de enseñarle a su hijo sobre Jehová (Salmo 127:3; Proverbios 22:6). Así que tuvo que decidir si enviaría al niño con los abuelos o no. Tal como manda la Biblia, la joven le rogó a Jehová que la ayudara a tomar la decisión correcta (Salmo 62:7, 8). También habló de su problema con la hermana que le daba clases y con otros hermanos de la congregación. Sus parientes y amigos le insistían para que enviara al niño con los abuelos. Pero ella entendió que eso no estaba bien. Su esposo vio que los hermanos de la congregación ayudaban mucho a su esposa y su hijo. Esto lo impresionó tanto que empezó a estudiar la Biblia y a asistir a las reuniones con su familia. Imaginemos lo feliz que se sintió esta madre al ver que Jehová había respondido su oración.

17. ¿Qué instrucciones debemos seguir cuando damos cursos de la Biblia?

¹⁷ Al recibir instrucciones. Un modo de demostrar que somos leales a Dios es obedeciendo las instrucciones que recibimos de su organización. Por ejemplo, pensemos en lo que debemos hacer poco después de comenzar un curso de la Biblia con el libro Enseña. Se nos ha dicho que debemos sacar unos minutos al terminar cada clase para ayudar a los estudiantes a conocer mejor la organización de Jehová. Podemos ayudarlos usando el video ¿Cómo son nuestras reuniones? y el folleto ¿Quiénes hacen la voluntad de Jehová en nuestros días? Se nos ha aconsejado que al terminar el libro Enseña estudiemos con ellos el libro “Manténganse en el amor de Dios” aunque ya estén bautizados. Así los ayudaremos a estar más “estabilizados en la fe” (Colosenses 2:7). ¿Seguimos estas instrucciones que nos da la organización de Jehová?

18, 19. ¿Por qué debemos darle las gracias a Jehová?

¹⁸ Hay muchas cosas por las que debemos darle gracias a Jehová. Primero, “porque por él tenemos vida y nos movemos y existimos” (Hechos 17:27, 28). Segundo, porque nos ha dado su libro, la Biblia. Como los cristianos de la ciudad de Tesalónica, nosotros también apreciamos este regalo porque es “la palabra de Dios” (1 Tesalonicenses 2:13).

¹⁹ Tercero, debemos estar agradecidos con Jehová porque nos ha enseñado en la Biblia cómo ser sus amigos (Santiago 4:8). Y cuarto, debemos agradecerle que nos deje formar parte de su organización. Nos sentimos como el escritor del Salmo 136, que dijo: “Den gracias a Jehová, porque él es bueno: porque su bondad amorosa es hasta tiempo indefinido” (Salmo 136:1). En cada versículo de este salmo se repiten las palabras “su bondad amorosa es hasta tiempo indefinido”. Si somos leales a Jehová y seguimos las instrucciones que nos da mediante su organización, disfrutaremos de su bondad amorosa por toda la eternidad.