Observando el mundo
Observando el mundo
Venta de carnes exóticas
A pesar de las leyes internacionales que prohíben en Europa su distribución y empleo culinario, algunas tiendas y restaurantes británicos venden ilegalmente carne de murciélago. “Existe la grave inquietud de que se estén matando e importando a escondidas murciélagos de especies protegidas, por no mencionar el peligro que representa para la salud pública el consumo de carne sin inspeccionar”, señala Richard Barnwell, del Fondo Mundial para la Naturaleza. En diversas regiones africanas, los murciélagos frugívoros constituyen tradicionalmente un importante alimento, y en Malaysia e Indonesia ha disminuido de modo drástico la población de algunas de las especies más raras por culpa del comercio de la carne. En las islas Seychelles, el murciélago al curry es un caro manjar. Pero, según el dominical londinense The Sunday Times, el mamífero volador “no es la única especie amenazada que goza de cierta demanda en Europa”. En plena capital de Bélgica, Bruselas, hay restaurantes que sirven carne de chimpancé.
Movimientos nerviosos
Un 15% de la población realiza movimientos repetitivos de carácter nervioso, señala el diario canadiense The Globe and Mail. De acuerdo con algunos investigadores, las acciones pudieran ser “retorcerse el cabello, zapatear, mover rítmicamente la pierna, hurgarse en las uñas y otras semejantes”. ¿A qué obedecen estos hábitos? Peggy Richter, psiquiatra del Centro para las Adicciones y la Salud Mental, de Toronto, cree que tales movimientos ritualistas brindan una sensación de desahogo. Por otro lado, Paul Kelly, psicólogo clínico, afirma que se deben a la tensión nerviosa y que constituyen una respuesta automática e inconsciente que pretende liberarnos de una situación agobiante. En opinión de algunos expertos, “es posible aprender a interrumpir los hábitos y con el tiempo detenerlos mediante la terapia de sustitución, por la que el paciente se concentra en otro objeto al percatarse de que realiza el movimiento”, menciona el citado diario.
¿Adictos a las bebidas de cola?
Cada mexicano consume unos 160 litros de bebidas de cola al año, según cifras de la Asociación Mexicana de Estudios para la Defensa del Consumidor. Los ciudadanos gastan anualmente en estos productos una cantidad que supera a la que dedican en conjunto a la adquisición de los diez alimentos más básicos. De acuerdo con algunos expertos, el elevado consumo de estas gaseosas es una de las causas principales de desnutrición en México. Los refrescos de cola contienen ingredientes que reducen la absorción de calcio y hierro. También se cree que su consumo aumenta las probabilidades de tener cálculos renales, caries, obesidad, hipertensión, insomnio, úlceras gástricas y ansiedad, entre otros problemas. “Se ha dicho que éramos ‘gente de maíz’ —señala la Revista del Consumidor—, pero ahora podríamos [...] decir que somos ‘gente [del refresco de cola]’.”
¿“Guerra justa”?
“La guerra de Yugoslavia suscita en las iglesias divisiones reales cuyo origen se sitúa en la interpretación del concepto tradicional de ‘guerra justa’”, señala el diario francés Le Monde. La teoría del “derecho a hacer la guerra” (ius ad bellum) se remonta a Agustín, teólogo del siglo V. Según Le Monde, entre las justificaciones “morales” que expuso un filósofo católico posterior —Tomás de Aquino— para dicha guerra figuran las siguientes: que tenga una “causa justa”, que sea el “último recurso”, que quien la declara tenga “autoridad legítima” y que “el empleo de las armas no entrañe males y desórdenes más graves que el mal que se pretende eliminar”. En el siglo XVII se añadió como condición la “probabilidad de éxito”. Aunque la mayoría de las iglesias rechazan hoy el concepto de “guerra santa”, aún debaten qué se considera “guerra justa”.
La vida sexual de los jóvenes brasileños
En Brasil, “el 33% de las chicas y el 64% de los muchachos tienen su primera relación íntima entre las edades de 14 y 19 años”, señala el periódico O Estado de S. Paulo. Además, el número de brasileñas de 15 a 19 años que inicia la actividad sexual antes de casarse se ha duplicado en solo un decenio. De acuerdo con la demógrafa Elizabeth Ferraz, se ha experimentado “un notable cambio de actitud con respecto a la sexualidad”. Sirva como ejemplo otro estudio, que revela que el 18% de las adolescentes brasileñas ya han tenido por lo menos un hijo o están actualmente embarazadas.
¿Cuánta seguridad ofrece su hospital?
“Las posibilidades de contraer infecciones hospitalarias en Irlanda superan el 10%”, señala el diario The Irish Times. Este tipo de infecciones requiere tratamiento adicional y una estancia más prolongada en el centro sanitario. Como promedio, una sola de ellas puede conllevar un gasto de 2.200 dólares por paciente y once días más de hospital si es una infección transportada por la sangre. Provocan particular inquietud las infecciones causadas por los “supermicrobios”, que, según el citado periódico, son “cada vez más resistentes a una amplia gama de antibióticos”. Los individuos más vulnerables son “los ancianos, los más jóvenes, los que pasan largos períodos internados [y] los pacientes de enfermedades crónicas como cardiopatías o bronquitis crónica”.
Aumenta el recuento de genes
Según los últimos estudios, se estima que cada una de nuestras células posee 140.000 genes, informa The New York Times. Dado que los cálculos anteriores oscilaban entre 50.000 y 100.000, es patente que el cuerpo humano es mucho más complejo de lo que se pensaba. Los genes indican a las células la secuencia en que han de colocar los aminoácidos para construir las proteínas. Esta drástica revisión al alza “muestra cuánto queda por aprender acerca de la programación genética del ser humano”, concluye el diario.
Cambia la definición del infierno
Por siglos, la Iglesia Católica ha enseñado que el infierno es el sitio donde sufren tormento eterno las almas de los malvados. Pero parece que el concepto de infierno ha cambiado. “No se trata de un castigo de Dios infligido desde el exterior —señala el papa Juan Pablo II—, sino del desarrollo de premisas ya puestas por el hombre en esta vida”, según refiere la edición semanal en lengua española de L’Osservatore Romano. “El infierno, más que un lugar —añade el pontífice—, indica la situación en que llega a encontrarse quien libre y definitivamente se aleja de Dios, manantial de vida y alegría.” De ahí que concluya que la “condenación [eterna]” no es obra de Dios, sino que “es la criatura la que se cierra a su amor [divino]”.
Caminar es saludable
Además de ayudar a perder peso y aliviar la tensión nerviosa, caminar contribuye a reducir “la presión sanguínea y el riesgo de sufrir infarto”, dice el periódico canadiense The Globe and Mail, de Toronto. ¿Cuánto tiempo hay que dedicar a esta actividad para estar sano? “Según la publicación Canada’s Physical Activity Guide to Healthy Active Living (Guía canadiense de actividades físicas para una vida activa y saludable), si se anda a paso moderado, hay que esforzarse por dedicar sesenta minutos diarios, en sesiones de al menos diez minutos.” Caminar enérgicamente o pedalear entre treinta y sesenta minutos (o correr a un ritmo moderado de veinte a treinta minutos) cada día también basta para mantenerse en forma. El citado diario recomienda utilizar calzado ligero transpirable con suela flexible, buen apoyo para el arco del pie, plantilla acolchada y puntera amplia.
Advertencia temprana
“Al mundo probablemente le aguarde una década de ‘supercatástrofes’”, asegura la revista World Press Review, que cita un artículo del rotativo londinense The Financial Times. Al mencionar desastres naturales como ciclones y terremotos, la Federación Internacional de las Sociedades Cruz Roja y Media Luna Roja señala que hay grandes poblaciones susceptibles de sufrir graves tragedias. “De las cincuenta ciudades del mundo de más rápido crecimiento, cuarenta están situadas en zonas sísmicas, y la mitad de la población del planeta vive en regiones costeras, expuestas a la elevación del nivel del mar”, señala la citada revista. Otro aspecto inquietante es que, a la par que aumentan las catástrofes, en muchas naciones disminuyen los fondos oficiales para socorrer a los damnificados.
Noche larga
“Majestuosa oscuridad.” Con estas palabras se refirió el noruego Fridtjof Nansen, explorador polar, a la Mörketid, la temporada en que el sol no sale nunca en las regiones septentrionales de Noruega. Durante dos meses, lo único que hay es un resplandor gris rojizo en las horas del mediodía. No a todos les gusta este tiempo de penumbra. Según el periódico Ibbenbürener Volkszeitung, el 21,2% de los noruegos que viven por encima del círculo polar padecen depresión invernal —tal vez por culpa de los bajos niveles de melatonina, hormona que elabora el cerebro—, que solo se remedia con la luz. Sin embargo, cada vez más turistas acuden al círculo polar atraídos por la titilante aurora, el brillo de la nieve a la luz de la luna y la cálida luz de los pueblos dispersos.