De nuestros lectores

El Vasa Quiero expresarles mi agradecimiento por la publicación del artículo “El Vasa: del naufragio al museo” (8 de abril de 2000). Soy historiador y he realizado diversos trabajos sobre el tema, por lo que puedo confirmar que el reportaje estaba muy bien documentado. Proporcionaron una magnífica y equilibrada explicación de los acontecimientos.

T. W., Alemania

Victorias legales Acudí recientemente a los tribunales por causa de la custodia de mis hijos, y mi ex esposo ha convertido en objeto de controversia mis creencias religiosas. Ha sido difícil. Lloré al leer el artículo “La batalla no es de ustedes, sino de Dios” (22 de abril de 2000).

D. B., Estados Unidos

Después de leer el artículo, se lo ofrecí a algunos abogados de la localidad. Ninguno lo rechazó. Algunos incluso me invitaron a su despacho para tomar café y seguir la conversación. Varios de ellos pidieron más ejemplares de la revista para sus socios. Todos los abogados quedaban muy sorprendidos cuando les señalaba que Hayden Covington había ganado 36 de 45 casos llevados ante el Tribunal Supremo de Estados Unidos.

C. M., Estados Unidos

Padres adolescentes Les escribo con el fin de expresarles mi profundo agradecimiento por el artículo “Los jóvenes preguntan... ¿Hará de ti un hombre la paternidad?” (22 de abril de 2000). Tengo 28 años, soy soltero y sirvo de precursor especial, o evangelizador de tiempo completo. En esta región de África occidental, a alguien de mi edad que no tenga esposa o novia se le considera incivilizado e impotente. Con frecuencia se burlan de mí y me desprecian por esa razón. Pues bien, su artículo reafirmó mi resolución de mantenerme casto.

A. E., Ghana

Perdí la virginidad cuando era adolescente, y cometí fornicación con un muchacho tras otro. Cada vez que lo hacía me sentía sucia, además de que siempre se aprovechaban de mí. Esa situación hizo que me deprimiera. Pero Jehová me ayudó a limpiar mi vida, y ahora estoy felizmente casada con un hombre magnífico. Es muy conveniente que publiquen información como esa, que haga comprender a los varones jóvenes que sus acciones pueden perjudicar a una muchacha por el resto de su vida.

F. A. S., Alemania

Me siento impulsada a darles las gracias porque al menos atribuyen la mitad de la responsabilidad de las madres solteras a quienes corresponde: los padres. Muchas personas creen que, como las mujeres son las que quedan embarazadas, la naturaleza indica que es un problema femenino y que los hombres no tienen que asumir ninguna responsabilidad. Sigan sensibilizando a los jóvenes sobre cómo quiere Dios que se trate a las mujeres.

J. M. O., Italia