De nuestros lectores

Pruebas a favor de la creación Trabajé muchos años con científicos, y siempre me irritaron sus afirmaciones de que la creencia en la creación era muy simplista. La serie “Se puede ver más de lo que perciben los ojos” (22 de agosto de 2000) es la respuesta perfecta a tales aseveraciones. En tan solo unas páginas se ofrecieron pruebas convincentes a favor de la creación. Aplaudo el calibre de la redacción e investigación de ¡Despertad!

B. E., Nueva Zelanda

Estudio la Biblia con los testigos de Jehová, y mi fe en la existencia de Dios se vio muy fortalecida cuando leí la información referente a los átomos, las células y el ADN.

T. K., Japón

Ya sé explicar por qué se forma el arco iris, por qué la hierba es verde y qué es un átomo. Aunque ¡Despertad! no sea una revista científica, aporta pruebas acreditadas que apoyan la fe en el Creador.

M. F., Estados Unidos

Recuperación sin transfusiones de sangre El artículo “Un asunto de conciencia” (22 de agosto de 2000) me conmovió mucho. Me vi en la misma situación cuando me diagnosticaron leucemia promielocítica aguda. Lo que ocurrió después fue casi idéntico a lo que le sucedió a Darlene. Me dieron solo unos cuantos días de vida, pero hace ya tres años de aquello.

A. B., Alemania

Acoso sexual Quisiera agradecerles el artículo “Los jóvenes preguntan... ¿Cómo puedo hacer frente al acoso sexual?” (22 de agosto de 2000). En la escuela me apodaban de diferentes maneras porque no consentía en participar en conducta inmoral. Cuando terminé la secundaria, pensé que el acoso cesaría, pero varias chicas me han hecho proposiciones indecentes. Lo que me ha ayudado a resistir tales insinuaciones ha sido dar a conocer a todos mis creencias cristianas. Gracias por suministrarnos el alimento espiritual.

H. C., Zambia

El artículo me ha ayudado mucho. Un niño de mi clase de tercer grado no deja de observarme. Por fin sé qué hacer.

H. K., Estados Unidos

¡Llegó justo a tiempo! Me sentía emocionalmente agotada, pues soy víctima de acoso sexual en mi lugar de trabajo. Cuando estaba a punto de derrumbarme, apareció el artículo. Ya sé cómo hacer frente a mis compañeros.

L. T., Estados Unidos

La ciudad rusa Me gusta leer reportajes de diversos países, ya que mi empresa mantiene contactos comerciales en el extranjero. Como una compañera de trabajo tiene un hijo que vive en Rusia, le hablé del artículo “Una visita a ‘la ciudad más antigua de Rusia’” (22 de agosto de 2000). Le hizo mucha ilusión recibirlo, y cuando lo leyó, me pidió otra revista. Le di la del 22 de mayo de 2000, que contenía el artículo “El singular reloj de Praga”, lo que la llevó a suscribirse a ¡Despertad! Gracias por proporcionarnos tan valiosa información.

S. O., Estados Unidos

¿Un goulash aguado? Pensé que sería buena idea probar la receta de goulash húngaro que aparecía en el artículo “La especia que recorrió medio mundo” (8 de septiembre de 2000). Todo me estaba saliendo muy bien hasta que añadí los dos litros de agua. Mi goulash parecía una sopa en vez de un estofado como el de la foto. ¿Lo entendí mal?

L. P., Canadá

No. Nos equivocamos al llamarlo estofado, porque la receta en realidad es para una sopa de goulash húngaro. Algunos libros de cocina recomiendan utilizar menos agua de la que indicamos. Curiosamente, algunos lectores nos han escrito diciendo que les gustó mucho como les quedó el plato.—La Redacción.