De nuestros lectores
De nuestros lectores
Ritmo frenético La serie “¿Cómo soportar el ritmo frenético de hoy?” (8 de febrero de 2001) llegó al meollo de los problemas de nuestra sociedad moderna. Captó mi atención la pregunta: “¿Damos prioridad a las cosas, o a las personas?”. Les ruego que sigan publicando artículos tan buenos para los lectores.
Y. K., Japón
El reportaje me ayudó a evaluar mis prioridades y actividades diarias que, sin darme cuenta, fueron entrampándome en el cansancio crónico, la ansiedad y el agotamiento mental. Ahora estoy cambiando mis hábitos y dando prioridad a lo que verdaderamente la tiene. Gracias por ayudarme a simplificar mi vida.
L. D. C., Guatemala
El sistema inmunológico Le entregué a un doctor que trabaja en medicina preventiva el número de ¡Despertad! del 8 de febrero de 2001, que trataba del tema “Centinelas que velan por su salud”. Le gustó tanto la ilustración de la página 15 (“Los leucocitos atacan bacterias”), que la amplió, la enmarcó y ahora la usa en sus explicaciones del sistema inmunitario.
H. K., Japón
Llevo treinta años leyendo ¡Despertad! y aprecio mucho sus temas de actualidad. El artículo “Centinelas que velan por su salud” me conmovió porque me aclaró el maravilloso funcionamiento del sistema inmunológico que Jehová implantó en nosotros.
L. G., México
Soy médico, y estudié inmunología en la facultad. La explicación de los libros de texto era complicada, pero este artículo fue grandioso. Resume el tema de tal forma que resulta fácil entenderlo. Un profesor universitario dijo en cierta ocasión que cuando se estudia el sistema inmunitario, es difícil no pensar que Dios lo creó. Espero con ansias más artículos cautivadores sobre el cuerpo humano.
N. K., Japón
Tsunamis Tengo 12 años y leo todas sus revistas. Me gustó muchísimo el artículo “Mitos y realidades de las olas asesinas” (8 de febrero de 2001). Esas olas me fascinan, y me encantó el ejemplo que dieron para ilustrar lo potentes que son.
K. S., Estados Unidos
Lluvia radiactiva Quedé embelesada con las explicaciones tan sencillas del artículo “La lluvia radiactiva, motivo de preocupación” (22 de febrero de 2001). Sabía que los elementos como el estroncio 90 eran sumamente dañinos, pero no que afectaran al ser humano desde la infancia. Es muy útil comprender temas tan complejos, pues nos permite ver cuánto necesita el hombre al Gran Creador para solucionar sus problemas. Al simplificar ustedes materias tan complejas para que todos podamos sacarles provecho, se nota su constante preocupación por los lectores. Muchísimas gracias.
M. Z., Italia
Los jóvenes preguntan Leo la revista ¡Despertad! desde que se llamaba Consolación. A pesar de estar entrada en años, me gustan los artículos de la sección “Los jóvenes preguntan...”. Adaptando las situaciones que presentan a un marco de circunstancias más adulto, logro asimilar gran parte de la información y sacar buenos consejos. Los artículos educan hasta a la gente mayor, como yo.
R. S., Estados Unidos