“Luz ideal”
“Luz ideal”
SI ALGUNA vez ha tocado una lámpara incandescente que llevara tiempo encendida, sabrá que puede alcanzar temperaturas elevadas. El calor que despide se debe a la energía desaprovechada. Por lo general, transforma en luz solo el 10% de la electricidad que recibe y en calor el 90% restante. En contraste, el rendimiento de un diminuto insecto bioluminiscente llamado luciérnaga (que aparece ampliado arriba) es casi del 100%.
Las luciérnagas desperdician tan poca energía en forma de calor que se ha dicho que producen “luz ideal”. ¿Cómo lo hacen? Su abdomen contiene una sustancia orgánica denominada luciferina. Cuando el oxígeno, que les llega al abdomen a través de las tráqueas abdominales, se combina con dicha sustancia, se produce una reacción química y la consiguiente emisión de destellos que van del amarillento pálido al rojizo o el verdoso.
Las células que emiten este resplandor también contienen cristales de ácido úrico, con los cuales reflejan la luz abdominal. Los científicos sostienen que las luciérnagas emiten señales luminosas para atraer a la pareja, y que la frecuencia y el ritmo de los destellos varían de una especie a otra.
¿No es verdad que el diseño de estos diminutos insectos alaba a su Creador, Jehová Dios? Sí, como dijo el salmista: “Toda cosa que respira... alabe a Jah” (Salmo 150:6).
[Reconocimiento de la página 31]
© Darwin Dale/Photo Researchers, Inc.