Ir al contenido

Ir al índice

Observando el mundo

Observando el mundo

Observando el mundo

Tiburones mutilados

Pescadores del mundo entero se ganan la vida surcando los mares en busca de tiburones, a los que matan, cortan las aletas y después arrojan por la borda. Según Science News, “el motivo de estas horribles mutilaciones es tan solo satisfacer la demanda de una carísima sopa” que se prepara con tales aletas. En agosto de 2002, los guardacostas de Estados Unidos confiscaron una embarcación hawaiana cerca de la costa de México tras descubrir en ella 32 toneladas de aletas de tiburón, la única parte del animal que se encontró a bordo. “La horrible carga supone al menos 30.000 tiburones muertos y 580.000 kilos de pescado desperdiciado —afirma la revista—. Por todo el mundo, las flotas pesqueras matan al año unos cien millones de ejemplares.” Pese a que el kilo de aletas sobrepasa los 400 dólares en el mercado, la demanda de este producto no deja de aumentar y resulta imposible de satisfacer.

Distribución del tiempo

Un estudio reciente reseñado en el periódico The Australian revela que “quien se queja de falta de tiempo se engaña a sí mismo”. El informe, preparado por la Universidad de Nueva Gales del Sur y la Universidad Nacional de Australia, señala: “Muchos de nosotros dedicamos más tiempo del necesario al empleo y las tareas domésticas”. Los investigadores calcularon cuánto debían trabajar los matrimonios sin hijos a fin de cubrir las necesidades básicas y lo contrastaron con el tiempo que en realidad dedican a esta actividad. El resultado mostró que las parejas sin hijos “pasaban en conjunto un total de 79 horas a la semana en el empleo, 37 atendiendo el hogar y 138 cuidando de su persona, pero en realidad solo necesitan dedicar 20 horas semanales al empleo [10 cada uno], 18 a la casa y 116 a la atención personal [incluidos la alimentación y el descanso]”. Si las parejas estuvieran dispuestas a simplificar su estilo de vida, obtendrían más de cien horas libres a la semana. Según The Australian, el estudio indica que los matrimonios que trabajan y no tienen hijos “se quejan de que disponen de menos tiempo, cuando en realidad es todo lo contrario; la verdad es que quienes sí andan escasos de tiempo son los padres”.

Aumenta la diabetes en la India

La Organización Mundial de la Salud calcula que hay más de 170 millones de diabéticos en el mundo. La India es el país que va a la cabeza, con 32.000.000 de pacientes, colectivo que superará los 57.000.000 en el año 2005, según el periódico Deccan Herald. En un congreso internacional sobre esta enfermedad celebrado en el país asiático de Sri Lanka, los especialistas culparon de este marcado incremento a la alimentación y los cambios en el estilo de vida, además de atribuirlo al estrés y los factores genéticos, así como al bajo peso de los recién nacidos y la costumbre de sobrealimentarlos posteriormente. Aunque en la India el tratamiento de la diabetes es uno de los más económicos del planeta, los problemas de salud y la mortalidad relacionados con este mal tienen índices elevados, en parte por la despreocupación y porque se diagnostica tarde. Un estudio efectuado en varias ciudades grandes de la India reveló que el 12% de la población adulta padece diabetes y que el 14% no metaboliza adecuadamente la glucosa, lo que suele ser la antesala de la enfermedad.

Corresponsales de guerra traumatizados

“Una cantidad considerable [de corresponsales de guerra] han quedado gravemente traumatizados por sus experiencias”, señala The New York Times. El diario aludió a “un estudio realizado entre [140] corresponsales de seis agencias de noticias importantes que suelen cubrir guerras y otros conflictos armados en diversos países”. El artículo explica que “tales periodistas registraban índices mucho más elevados de depresión grave y trastorno de estrés postraumático que [otro grupo de 107] reporteros que no se desplazaban a zonas de conflicto”. Entre los síntomas “había reviviscencias y pesadillas recurrentes, irritabilidad, dificultad en la concentración y un estado de alerta obsesivo”. Además, “los corresponsales presentaban varios problemas en su comportamiento social, [...] como incapacidad de adaptarse a la sociedad civil, renuencia a juntarse con los amigos, malas relaciones interpersonales y el uso del alcohol como sedante”. Como promedio, estos profesionales “habían pasado quince años en lugares como Bosnia, Ruanda, Chechenia, Somalia, Afganistán y otros países en guerra”.

Europeos de edad avanzada

“El Viejo Continente le hace cada vez más honor a su nombre”, afirma el diario español El País. En casi todos los países de la Unión Europea, el 20% de la población supera los 60 años de edad. A juicio de los demógrafos, para el año 2050, 4 de cada 10 ciudadanos de países como Austria, Italia y España serán sexagenarios. La II Asamblea Mundial sobre el Envejecimiento, celebrada en Madrid (España), señaló que esta tendencia progresiva exigirá cambios sociales y económicos. Como las pensiones y la atención médica serán más difíciles de financiar, es probable que los empresarios tengan que emplear a trabajadores de más edad, organizar horarios flexibles, contratar a más de una persona para un mismo puesto y ofrecer planes de jubilación escalonados. Además, “cada vez hay menos jóvenes, así que si las empresas quieren crecer, deben dirigirse a los mayores”, comenta el empresario español Josep Maria Riera.

Educación sexual: más necesaria que nunca

Según fuentes oficiales alemanas mencionadas en Der Spiegel, de 1996 a 2001 se registró un aumento del 60% en la cantidad de abortos entre muchachas de 15 a 17 años de edad, y del 90% en chicas aún más jóvenes. Norbert Kluge, de la Universidad de Koblenz-Landau, afirma que aunque los jóvenes llegan antes a la pubertad, ‘su educación sexual no es apropiada, sobre todo porque no llega a tiempo’. Los niños deben estar bien informados en materia sexual antes de cumplir los 10 años, pero según Kluge, muchos padres eluden su responsabilidad. De acuerdo con el Berliner Morgenpost, el director del Consejo Federal de Padres, con sede en Bonn, recomienda que al hablar de sexualidad, se ponga el acento en el aspecto emocional, como el “amor y las relaciones afectivas”, más bien que en el proceso biológico.

El correo electrónico y la comunicación

Existe la misma probabilidad de que alguien le envíe un mensaje electrónico a un compañero que trabaje en la misma planta de su edificio de oficinas que a uno que trabaje en otro huso horario, afirman dos investigadores en el rotativo canadiense The Globe and Mail. Con respecto al efecto del correo electrónico en la comunicación, David Crystal, profesor de Lingüística de la Universidad de Gales, afirma: “La intervención simultánea es una característica fundamental de la conversación”, y los mensajes electrónicos impiden que esta se produzca, pues se crea un lapso entre el mensaje y la respuesta. Además, quien escribe un mensaje electrónico puede monopolizar la conversación sin ninguna interrupción. “Turnarse para hablar y para escuchar —señala el Globe— son facetas básicas de la comunicación.”

¿Dos redes nerviosas?

Los seres humanos estamos dotados de un sistema nervioso especial que nos permite sentir el amor y la ternura, afirma la revista científica germana Bild der Wissenschaft. Varios científicos suecos descubrieron que una mujer que había perdido los principales receptores táctiles notaba una sensación placentera cuando la acariciaban con un pincel suave. Tal placer lo provocaba otra red nerviosa presente en la piel compuesta por fibras de conducción lenta de tipo C. La red solo responde a una presión suave y activa las regiones del cerebro relacionadas con las emociones. Al exponer por qué quizá tenemos dos conjuntos diferentes de nervios, el International Herald Tribune observa: “Las fibras de conducción lenta comienzan a funcionar en las primeras horas de vida, tal vez incluso en el vientre materno, mientras que las fibras de conducción rápida se forman lentamente tras el nacimiento. Es posible que los recién nacidos perciban el cariño de la caricia de su padre o su madre antes de sentir la caricia misma”.