Se exigen reformas
Se exigen reformas
DE NUESTRO CORRESPONSAL EN ALEMANIA
—Si tuviera unos años menos, fundaría un movimiento reformista —exclamó una octogenaria alemana llamada Anna.
—¿Y qué cambiaría? —preguntó Robert.
—Todo.
SON muchos los que concuerdan con la opinión de esta señora. En un sondeo realizado en Alemania a mediados de la década de 1990, 2 de cada 3 encuestados afirmaron que hacían falta “reformas [...] de largo alcance y cambios sociales importantes”. Tal vez ocurra lo mismo donde usted vive.
Cuando la ciudadanía reclama cambios, suelen prometerse reformas. Con respecto a la enseñanza, Frederick Hess, profesor adjunto de Ciencias de la Educación y Gobierno, escribió: “La reforma es en * Hasta hay feligreses que proponen modificar las doctrinas de su Iglesia.
gran parte una medida simbólica para sosegar los ánimos de las comunidades impacientes”. Los periódicos anuncian todo tipo de planes o propuestas de reforma, sea fiscal, sanitaria, judicial, agraria, educativa, asistencial, carcelaria o de otro tipo.Reformismo frente a inmovilismo
¿Qué subyace tras estas demandas? El eterno afán del ser humano por mejorar su entorno, sea valiéndose del voto, el dinero, la legislación o la fuerza bruta. Obra así porque anhela progresar, asegurar el futuro de sus hijos o lograr que la sociedad refleje sus ideales de bienestar, moralidad y justicia. Mientras haya quien luche por romper las cadenas de la ignorancia, la enfermedad, la pobreza y el hambre, habrá quien pida reformas.
Aunque las reformas tengan muchos partidarios, hay quienes ven de distinto modo a los innovadores y sus metas. Puede que prefieran mantener la sociedad tal cual es, preservar el estado de cosas actual. Opinan que el progresista es un soñador con ganas de cambiar el mundo, pero que no tiene los pies en la tierra. Según el Handbuch der deutschen Reformbewegungen 1880-1933 (Manual de los movimientos reformistas alemanes 1880-1933), ese tipo de persona “es presa fácil de las críticas, caricaturas políticas, parodias e ironías”. El famoso dramaturgo francés Molière escribió: “Es locura sin igual dedicarse a corregir el mundo”.
Ahora bien, ¿qué opina usted? ¿Lograrán las reformas arreglar el mundo, o son sus defensores simples visionarios idealistas? ¿Qué nos enseñan las tentativas del pasado? ¿Lograron sus promotores materializar sus objetivos? Los siguientes artículos tratarán dichas cuestiones.
[Nota]
^ párr. 5 Conforme a la declaración de principios que publica ¡Despertad!, esta revista “siempre mantiene una postura neutral en lo que respecta a la política”. Por consiguiente, este reportaje pretende tan solo informar al lector y traer a su atención el único remedio definitivo para las necesidades del hombre.