Observando el mundo

Patitos de plástico surcando los mares

En enero de 1992, un barco que zarpó de Hong Kong rumbo a Estados Unidos se topó con una fuerte tormenta y perdió un cargamento de 29.000 patitos de plástico, según refiere el periódico alemán Frankfurter Allgemeine Zeitung. Los primeros patitos en llegar a tierra arribaron a la isla Baranof (Alaska) en noviembre del mismo año; otros fueron encontrados en “aguas heladas al norte del estrecho de Bering” dos años más tarde, y se espera que los resistentes juguetes aparezcan también en las costas estadounidenses de Nueva Inglaterra. Lo curioso es que, de acuerdo con el rotativo, el infortunio resultó útil a la ciencia, pues corroboró la teoría de que las corrientes marítimas fluyen “del Pacífico directamente al océano Glacial Ártico y luego al Atlántico”.

 ¡Escarabajos al rescate!

“La intervención de dos especies de escarabajo ha ahorrado 260 millones de dólares a la economía de Benín (África occidental) por espacio de veinte años —comenta la revista New Scientist—. Entre ambas especies derrotaron [al jacinto de agua,] una mala hierba muy invasiva que mata a los peces, entorpece la navegación y altera la ecología de los lagos.” La noticia añade que “las islas flotantes de mala hierba son capaces de crecer el doble en menos de dos semanas, y son tan densas que hacen imposibles la pesca y el paso de los botes”. Esta plaga le quita oxígeno al agua, eleva su acidez y enlentece su flujo, provocando mayor acumulación de lodo. Además, sirve de escondite a los cocodrilos, lo cual es un peligro para la gente que va a sacar agua. Los héroes (dos especies de gorgojo que se alimentan exclusivamente de jacinto de agua) triunfaron donde la maquinaria había fracasado y donde los herbicidas habrían contaminado el agua y matado otras plantas, indica New Scientist.

Amas de casa jugadoras

En Gran Bretaña, “cantidades crecientes de amas de casa están aficionadas al juego por Internet, al que dedican varias horas al día y con el que acumulan deudas de miles de libras esterlinas”, informa el semanario londinense The Sunday Telegraph. Mujeres que lo pensarían dos veces antes de entrar a una casa de apuestas encuentran a la Red mucho menos intimidante y, lo que es más, han logrado acomodar sus partidas de juego dentro de sus tareas domésticas diarias. Aunque muchas se están haciendo adictas, a menudo no lo admiten por la imagen negativa que proyecta la mujer jugadora. Según el rotativo, el profesor Mark Griffiths, de la Universidad de Nottingham, opina que la tendencia refleja un “gran cambio cultural que saca el juego del casino y lo introduce al hogar y al trabajo”. Y agrega: “El adicto al juego [...] probablemente tenga prohibida la entrada a casinos y casas de apuestas. Con Internet, no encontrará vigilantes”.

Más jóvenes viven en la calle

En Madrid, el “grupo de jóvenes [sin techo] [...] está creciendo”, expone el diario español El País. “Una cuarta parte de las 5.000 personas sin hogar [...] se quedó en la calle con menos de [20] años”, indica un estudio universitario. Dicho estudio reveló que estos muchachos, en su mayoría “procedentes de hogares rotos”, “acumulan demasiados episodios traumáticos en su corta vida”, y que, de hecho, “el 66% son hijos de drogodependientes o alcohólicos” y “el 62% sufrió malos tratos”. Manuel Muñoz, coautor del estudio, mencionó que “los lazos familiares propios de culturas mediterráneas como la nuestra están fallando”.

Aumentan los casos de gonorrea en Canadá

“Tras dos décadas de descenso constante, los índices de gonorrea han subido más del cuarenta por ciento en los últimos cinco años”, comenta el rotativo canadiense The Vancouver Sun. Esta enfermedad de transmisión sexual causa infertilidad y “puede diseminarse por el torrente sanguíneo y llegar a las articulaciones, provocando inflamación y acumulación de pus, o ‘artritis gonocócica’”. Es más, la bacteria que la produce se está haciendo resistente a “cualquier fármaco con el que se enfrenta”, dice el Sun. Otro temor es que “al aumentar la incidencia de la gonorrea haya más casos de VIH (el virus asociado con el sida), pues las enfermedades venéreas elevan el riesgo de adquirirlo o transmitirlo”. De hecho, los médicos atribuyen el aumento de casos de gonorrea a que ha disminuido el miedo al VIH. “La gente adopta menos precauciones en cuanto al número y el tipo de personas con quienes mantiene relaciones íntimas”, señala el doctor David Fisman, especialista en infecciones de transmisión sexual.

Alquiler de abuelos

“Más de mil madres y padres solos con hijos de hasta 10 años de edad han podido elegir abuelos para sus niños”, informa el periódico alemán Nassauische Neue Presse. “Mis verdaderos abuelos viven muy lejos de Berlín —dice Melanie, de siete años—. Abuelita Klara vive a la vuelta de la esquina. Me va a buscar a la escuela y me acompaña al zoológico, al parque y a nadar. También cocina y come conmigo y con mamá en casa.” Abuelita Klara es parte de un servicio de “abuelos” que permite a los padres sin cónyuge contratar a gente mayor pagando de 3 a 5 dólares la hora. “Es la solución perfecta para los padres solos con presupuesto limitado”, señala la información.

Playa para llenitos

Un hotel de México tiene reservada una sección para quienes se avergüenzan de ir a playas repletas de gente esbelta, reseña el periódico El Economista. Con el lema “Sea gordo y sea feliz”, el hotel ubicado en una playa de Cancún se propone “atraer a los individuos que temen salir en traje de baño a la arena debido a sus kilos de más”. El personal incluye empleados de todos los pesos, adiestrados para no discriminar a los vacacionistas con sobrepeso, comenta la noticia, “porque ya hay demasiada discriminación en la vida diaria”.

Calentamiento del Mediterráneo

“Llevamos diez años registrando [...] la tropicalización del mar Mediterráneo”, señala Maurizio Wurtz, biólogo marino de la Universidad de Génova (Italia). Según el periódico italiano La Repubblica, las aguas cálidas atraen nuevas plantas y animales acuáticos. “Numerosas especies se están desplazando de la costa africana hacia el norte del Mediterráneo”, señala Wurtz. Entre los inmigrantes se hallan el pez loro, originario de aguas tropicales; el pez doncella, del Atlántico tropical; el pez ballesta, nativo de los océanos Índico y Pacífico, y un tipo de alga que llegó por el canal de Suez.