De nuestros lectores
De nuestros lectores
Medio ambiente La serie de portada “¿Podemos salvar el medio ambiente?” (22 de noviembre de 2003) fue muy especial para mí. Estoy deseando que llegue el día en que Jehová limpie su preciosa Tierra y la devuelva a su estado original. Me entristece ver el desastre que el hombre ha causado a nuestro hogar.
D. L., Gran Bretaña
Soy un lector de 15 años de edad que antes me saltaba números de ¡Despertad! Pero después de terminar este reportaje, no quiero dejar ni una revista sin leer. Los artículos me han enseñado un montón de cosas interesantes sobre nuestro planeta. Usé esos datos en la escuela y me pusieron una nota alta.
S. V., Ucrania
Esclerosis múltiple Por favor acepten mi más sincero agradecimiento por el artículo “Cómo sobrellevar la esclerosis múltiple” (22 de noviembre de 2003). Hace casi un año se me diagnosticó esa enfermedad, y ya he perdido el uso de los brazos, las piernas y el ojo izquierdo. Antes era muy negativa, pero ahora, siguiendo las sugerencias de su artículo, intento tener sentido del humor y centrarme en cosas positivas. Gracias por proporcionar información tan animadora.
M. A., Japón
Sufro de esta enfermedad desde hace catorce años. En Japón no se conoce mucho, así que cuando supe que iba a salir este artículo, se lo dije a mi marido y a mis amigos de la congregación. Ahora mis amigos demuestran más interés y me ayudan.
N. S., Japón
El artículo describe con gran precisión la enfermedad, su desarrollo y las consecuencias. Por fin he recibido respuesta a las preguntas que he tenido en la cabeza durante años. Muchos de mis mejores amigos me han dicho que no se habían dado cuenta de lo que representaba sufrir de esclerosis múltiple.
M. W., Alemania
Soy una madre que cría sola a tres hijos. Leí este artículo mientras estaba en el hospital a causa de mi cuarto ataque de esclerosis múltiple. La información me conmovió profundamente. Por raro que parezca, esta enfermedad incurable ha fortalecido mucho mi relación con Jehová y mi confianza en él.
M. H., Alemania
Este artículo será de mucha ayuda para todos los que estamos afectados por la esclerosis múltiple. A pesar de que ahora estoy en silla de ruedas, participo en la predicación de tiempo completo, aunque principalmente desde casa, por teléfono. Debido a mi parálisis, una hermana escribió esta carta por mí.
M. G., Francia
Me diagnosticaron esclerosis múltiple hace unos veintiún años. Soy anciano cristiano, pero los hermanos han aliviado amorosamente mis responsabilidades para no agravar mi enfermedad. Sin duda será maravilloso el día en que, como afirma Isaías 33:24, “ningún residente dirá: ‘Estoy enfermo’”.
E. C., Estados Unidos
La catástrofe del Misisipí Me impactó el reportaje “El río que fluyó hacia atrás” (22 de noviembre de 2003). Me di cuenta de cuán poderosa es la naturaleza y cuán débil el ser humano cuando azota una calamidad. Su artículo ha fortalecido mi resolución de confiar en la Biblia.
M. J., Mauritania
Aunque los sucesos descritos ocurrieron hace casi doscientos años, me daba la sensación de que los estaba describiendo un testigo presencial. Mientras leía el artículo, me parecía estar allí tambaleándome por la furia del agua. Leí cada párrafo con gran interés.
V. R., Rusia