Tesoros del mundo de los insectos

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Tesoros del mundo de los insectos

DE NUESTRO CORRESPONSAL EN ESPAÑA

LA ALTA bóveda selvática oculta miles de tesoros vivientes, que a menudo relucen como el oro o la plata, o como esmeraldas, rubíes o zafiros. Estas joyas silvestres, rara vez vistas por el hombre, son los escarabajos.

“¿Escarabajos? —tal vez piense el lector—. ¿Pero no son animalitos oscuros y grotescos que se mueven ágilmente por el suelo?” Pues no. Estas criaturas figuran entre las más coloridas del planeta, así como entre las más numerosas. Según la obra The Guinness Book of Animal Records, se han catalogado casi cuatrocientas mil especies de coleópteros —orden científico que comprende los escarabajos—, lo que constituye casi un tercio del total de las especies animales conocidas. Así que si desea encontrar una nueva, no haría mal en intentarlo con ellos, pues según el entomólogo Terry Erwin, en este orden pudieran quedar millones aún por descubrir. De hecho, él ha hallado unas mil doscientas en tan solo diecinueve árboles tropicales grandes.

Inmensa variedad

En vista de tal diversidad, no es de extrañar que haya escarabajos de todo tipo de formas y tamaños. Según la revista National Geographic, algunos son “tan colosales que eran abatidos por los antiguos coleccionistas con escopetas cargadas de arena”, mientras que otros “son tan minúsculos que viajan sobre los órganos bucales de las abejas. Ciertas especies incluso se introducen en los museos y devoran sus repertorios de coleópteros”.

Colecciones como esas valen muchísimo dinero. El precio de cada ejemplar dependerá de su colorido y rareza. La familia de los escarabeidos cubre la entera gama de verdes y rojos, así como de dorados y plateados. Un espécimen rojo intenso pudiera alcanzar los 200 dólares, mientras que otro con hermosos destellos dorados pudiera duplicar dicha cifra.

Algunos longicornios (llamados así por sus descomunales “cuernos”, o antenas) exhiben admirables dibujos multicolores. Y hay otros que resplandecen como diminutos mosaicos iridiscentes, cuyos deslumbrantes verdes y azules rivalizan con el cromatismo del colibrí. Pero sus tonalidades no son su único valor; estos coleópteros son esenciales para mantener los ecosistemas, ya que reciclan el estiércol y los residuos vegetales.

Uso en joyería

Los coleccionistas no son los únicos interesados en estos llamativos insectos. En el continente americano hay mujeres que realizan collares juntando sus élitros, es decir, los estuches que cubren las alas. En algunas regiones de México se adhiere a los bupréstidos (escarabajos de tonos brillantes) cuentas o pedazos de vidrio coloreado, así como una cadena corta, para convertirlos en broches vivientes que se llevan sobre la ropa.

Sea que prefiramos admirarlos de cerca o de lejos, estos tesoros son sin duda buenos exponentes de la belleza y complejidad de las criaturas terrestres.

[Ilustración y recuadro de la página 16]

Escarabajos de las hojas

Por hermosos que sean, algunos son una plaga. Por ejemplo, los crisomélidos, o escarabajos de las hojas, devoran el follaje, los tallos y las raíces de una amplia variedad de plantas y cultivos.

Aunque existen cerca de veinticinco mil especies, para muchos agricultores hay uno por excelencia: la dorífora del Colorado. Identificada en 1859 como amenaza para los cultivos de papa en Norteamérica, a principios del siglo XX invade Europa, y de allí se extiende a Asia.

Dada su capacidad de desarrollar resistencia a los pesticidas, este voraz devorador de hojas es un terrible enemigo. En la actualidad se combate con una combinación de técnicas agrícolas, biológicas y químicas.

[Ilustración]

Dorífora de la papa (EE.UU.)

[Reconocimiento]

Scott Bauer/Agricultural Research Service, USDA

[Ilustraciones y recuadro de la página 17]

Los campeones

▪ Los escarabajos ostentan la marca mundial de longevidad en su clase. Mientras que la mayoría de los insectos no sobrepasan los doce meses de vida, algunos bupréstidos superan los 30 años, e incluso hay constancia de que cierto espécimen alcanzó sus buenos 47. Según explica el libro The Guinness Book of Animal Records, estos coleópteros “ponen sus huevos bajo la corteza de un árbol vivo [...]. Si se tala, no es raro que sobrevivan larvas y sean llevadas por el mundo en la madera. Dado que existen especies que tardan años en llegar a la madurez, es posible que los adultos terminen emergiendo de muebles”.

▪ Los escarabajos goliat de África tropical son los pesos pesados de los insectos, pues algunos machos alcanzan los 100 gramos, tres veces más que un ratón doméstico.

▪ El premio al levantador de pesas más fuerte del mundo animal (en proporción a sus dimensiones) recae en el escarabajo rinoceronte de la subfamilia de los dinastinos. Esta robusta criatura aguanta ochocientas cincuenta veces su propio peso.

[Ilustración]

Escarabajo goliat (República Democrática del Congo)

[Reconocimiento]

Faunia (Madrid)

[Ilustración]

Escarabajo rinoceronte (Guinea Ecuatorial)

[Ilustración de la página 16]

Bupréstido (México)

[Ilustración de la página 16]

Bupréstido (Honduras)

[Ilustración de la página 16]

Bupréstido (Costa Rica)