Las crepes de tapioca: exquisitez brasileña

De nuestro corresponsal en Brasil

EN Brasil, la palabra tapioca puede referirse a varios productos de la planta de la mandioca (también llamada casava o yuca). Uno de ellos es un simple panecillo, más parecido a una tortita delgada, que se conoce en portugués como crepe de tapioca. Este tipo de panecillos se elaboran con una fécula en polvo conocida como polvilho doce, o goma, que se extrae de las raíces carnosas de la planta de la mandioca.

Tras rallar y prensar las raíces, se obtiene un líquido de aspecto lechoso que se deja reposar para que los elementos sólidos que contiene se depositen en el fondo. Entonces se escurre el líquido y queda una pasta de fécula que se pone a secar al sol.

La tapioca era un alimento básico de los indígenas brasileños. Posteriormente, los colonos portugueses descubrieron que era un buen sustituto del pan. Sin embargo, no fue sino hasta hace pocos años que la tapioca atrajo la atención de algunos innovadores chefs brasileños, que decidieron convertirla en un plato de moda en los menús de sus restaurantes.

En su afán de agradar a un público más selecto, los chefs crearon versiones nuevas de las crepes tradicionales, dándoles su toque personal. En la actualidad, las de tapioca son muy populares y añaden un encanto especial a la cocina brasileña. Son muchos los restaurantes que deben su fama a esta especialidad.

¿Por qué no se anima a prepararlas? Serán un deleite y una nueva experiencia para el paladar de su familia y amigos.

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Receta de las crepes de tapioca

Ingredientes para ocho crepes:

3 tazas [350 g] de polvilho doce, 1 1⁄2 tazas [350 ml] de agua y un poco de sal.

Preparación: En un tazón de tamaño mediano eche un poco de agua sobre el polvilho doce y la sal, y mézclelo todo con los dedos. Añada el resto del agua poco a poco mientras amasa la mezcla hasta que adquiera la textura de migas gruesas y pueda formar una bola sin que se le pegue a las manos. Entonces pase la bola por un cedazo. La masa ya está lista para hacer las crepes.

Caliente una sartén pequeña y antiadherente a fuego mediano. Ponga un octavo de la mezcla en la sartén y extiéndala de manera uniforme con el dorso de una cuchara. Deje que se cocine de dos a cuatro minutos, o hasta que la mezcla se compacte formando una tortita plana y los bordes se despeguen de la sartén. Dele la vuelta con una espátula de plástico y déjela cocinarse por el otro lado durante un minuto. Repita el proceso con el resto de la mezcla. Vaya apilando las crepes que ya estén listas.

Se puede variar la presentación de las crepes de tapioca con diferentes rellenos. Para el desayuno, pruebe a untarlas con mantequilla mientras todavía están calientes y después añada un par de cucharadas de coco recién rallado. Otra opción es cubrirlas de leche condensada, añadir coco, doblarlas y servirlas.

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Raíces de mandioca

[Ilustración de la página 24]

Crepe de tapioca rellena de leche condensada y coco