Dio buen testimonio en la escuela

De nuestro corresponsal en México

AL COMENZAR el nuevo año académico, Daniel, de 17 años, estaba decidido a decirles a sus compañeros que era testigo de Jehová. La oportunidad se le presentó cuando su profesor de Inglés pidió a la clase que cada alumno entrevistara a un extranjero cuya lengua materna fuera el inglés. Tenían que dirigirse a lugares de la ciudad de México frecuentados por los turistas, grabar el diálogo y reproducirlo luego en clase.

Daniel optó por hacer las preguntas a un misionero que trabajaba en las oficinas centrales de los testigos de Jehová de México, y al mismo tiempo, filmar un breve reportaje en inglés sobre las instalaciones. Además, preparó una exposición en la que incluyó varios folletos en lenguas indígenas editados en el país, así como ejemplares de La Atalaya y ¡Despertad! en otros idiomas. Luego pidió permiso al maestro para presentar a la clase la videocinta y la exposición.

Tanto los alumnos como el profesor se quedaron asombrados al enterarse de la labor que realizan los Testigos en México. Lo que más les impresionó fue el empeño que ponen en ayudar a la población indígena del país.

Tras la presentación de veinticinco minutos, por la que recibió la máxima calificación, Daniel ofreció a todos revistas La Atalaya y ¡Despertad!, así como ejemplares del libro Lo que los jóvenes preguntan. Respuestas prácticas. Muchos aceptaron las publicaciones, lo que sentó la base para conversaciones posteriores. Daniel expresa así sus sentimientos: “Le doy gracias a Jehová por permitirme honrar su nombre con algo tan sencillo como una tarea de la escuela”.