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¿Masajes para bebés?

¿Masajes para bebés?

¿Masajes para bebés?

DE NUESTRO CORRESPONSAL EN ESPAÑA

ANITA, una joven madre de Nigeria, baña a su hijita y a continuación la masajea con cuidado. Tanto ella como la pequeña se divierten mucho. “Para las madres nigerianas es una antigua costumbre que forma parte del cuidado de los bebés —explica Anita—. Mi madre nos daba masajes a mis hermanos y a mí. Es una excelente forma de tonificar los músculos del bebé y de relajarlo. Mientras lo hago, le canto a mi hija y le hablo, y ella balbucea y me sonríe. Es una experiencia maravillosa.”

El masaje infantil es común en muchos países y está ganando aceptación en Occidente. La Asociación Española de Masaje Infantil explica que es una técnica sutil, tierna y agradable, que permite a los padres comunicarse física y emocionalmente con el niño. Consiste en una serie de caricias suaves, pero firmes, en los pies y en las piernas del pequeño, así como en la espalda, el pecho, el estómago, los brazos y la cara.

¿Qué beneficios tiene el masaje para el bebé? Sobre todo, le transmite cariño y ternura. Un recién nacido no solo necesita que se le alimente, también ha de percibir que sus padres lo quieren. En vista de que el sentido del tacto se desarrolla muy pronto, cuando el padre o la madre lo masajean con delicadeza, le manifiestan su amor de una forma tangible. Mediante el tacto puede trasmitirse mucha información física y emocional al bebé. Por eso los masajes contribuyen desde un principio a fortalecer el lazo afectivo entre padres e hijos.

El masaje, además de expresar amor, enseña al bebé a relajarse, lo que contribuye a que duerma mejor y se sienta menos estresado. También tonifica los músculos y regula los sistemas circulatorio, digestivo y respiratorio. Algunas personas afirman que incluso fortalece el sistema inmunológico. Por otro lado, estimular el tacto, la vista y el oído, favorece la memoria y el aprendizaje.

Algunos hospitales también han investigado los beneficios del masaje infantil. Por ejemplo, un estudio reveló que los bebés prematuros que recibieron este tratamiento fueron dados de alta hasta siete días antes y aumentaron de peso incluso un 47% más que los que no lo recibieron.

Está claro que los adultos no son los únicos a quienes les beneficia un buen masaje. Obviamente, para los bebés es algo más que una simple técnica de relajación: es amor expresado con el calor de las manos, los delicados movimientos de los dedos y una gran sonrisa.