De nuestros lectores

¿Qué pasó con el amor? (Marzo de 2006) El mundo presenta una imagen distorsionada del amor, y además Satanás quiere acabar con él. Artículos como estos nos motivan a expresar amor con acciones y de forma desinteresada. Muchas gracias por ayudarme a comprender mejor cómo desea Jehová que empleemos esta poderosa fuerza.

Y. B., Estados Unidos

Me sentí muy sola cuando dos de mis mejores amigas se mudaron a una congregación de habla extranjera. No obstante, cuando toqué fondo recibí esta revista. Gracias por recordarme que “si queremos recibir amor, tenemos que dar amor”. De ahora en adelante voy a ‘ensancharme’, voy a mostrar amor sincero para así hacer nuevos amigos (2 Corintios 6:12, 13).

M. T., Japón

Cómo sobrellevar las dificultades de la vejez (Febrero de 2006) A veces me parece que a las personas mayores se nos tiene olvidadas. Llevo once años cuidando de mi esposo enfermo y en ocasiones me siento sola. He leído muchas veces los artículos de este número de ¡Despertad! y también los he escuchado en casete. Esta revista fue justo lo que necesitaba. Muchísimas gracias.

S. T., Japón

Miembros artificiales (Febrero de 2006) Muchas gracias por el artículo sobre las prótesis. Cuando estaba en mi cuarto mes de embarazo, nos dijeron que nuestro hijo iba a nacer sin las cuatro extremidades y que cuando tuviera un año podría utilizar piernas artificiales. Recibimos el artículo el mismo mes que Daryl cumplió un año. Ahora está aprendiendo a mantenerse en pie y a caminar. Mi esposo y yo anhelamos que llegue el día en que Daryl “trepará justamente como lo hace el ciervo” (Isaías 35:6).

Y. A., Francia

Merece la pena vivir (22 de octubre de 2001) He leído la ¡Despertad! del 22 de octubre de 2001 muchas veces, sobre todo cuando estoy desanimada. Para mí es como una medicina, solo que no caduca. Los consejos y soluciones que ofrece son muy útiles. ¡Despertad! me levanta el ánimo y me demuestra que ustedes se preocupan por personas como yo. ¡Qué bueno es poder contar con ustedes! Muchas gracias por recordarme que “merece la pena vivir”.

P. T., Madagascar

“Peregrinos” y puritanos, ¿quiénes eran? (Febrero de 2006) Me horrorizó la forma en que este artículo distorsionó los hechos. Existe una poderosa razón por la que los indios norteamericanos no celebran el día de Acción de Gracias, y ustedes sencillamente la pasaron por alto.

Nombre omitido, Estados Unidos

¡Despertad! responde: El propósito del artículo no era analizar en detalle la historia del día de Acción de Gracias. Varias obras de consulta, entre ellas la Encyclopædia Britannica, dicen que en el otoño de 1621, los peregrinos festejaron durante tres días junto con sus amigos indios la abundante cosecha que habían tenido. Los detalles se mencionan en una carta de Edward Winslow, con fecha del 11 de diciembre de 1621. No obstante, en los años siguientes, con esta festividad se celebraron toda clase de acontecimientos, además de la cosecha. El día de Acción de Gracias más infame tuvo lugar en 1637 y fue proclamado por el gobernador de la colonia de la bahía de Massachusetts, John Winthrop, tras la masacre de cientos de indios pequot. Por eso comprendemos que esta celebración ofenda a algunos de nuestros lectores.