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¿Y si alguien quiere que seamos “amigos con derechos”?

¿Y si alguien quiere que seamos “amigos con derechos”?

Los jóvenes preguntan...

¿Y si alguien quiere que seamos “amigos con derechos”?

“Hay quienes buscan amigos ‘muy especiales’ para ver hasta dónde les dejan llegar y con cuánta gente pueden acostarse.”—Rosa. *

“Los chicos te lo cuentan a las claras. Presumen de tener novia, pero luego tienen relaciones con todas las que quieren.”—Jaime.

“Los que me hacían proposiciones no se andaban con rodeos. Y aunque les decía que no, se ponían muy, pero que muy pesados.”—Leticia.

EN VEZ de la expresión “amigos con derechos”, en muchos lugares se habla de “amigos con privilegios” (o con “ventajas” o “derecho a roce”), “amigos cariñosos”, “amigovios”, “amores (o aventuras) de una noche”, “vacilones”, “rollos”, “líos”, “ligues”, “enredos”, “levantes” y así por el estilo.

Etiquetas aparte, la idea es la misma: encuentros sexuales pasajeros, sin compromiso, sin ataduras emocionales, sin las complicaciones de las relaciones a largo plazo. * “De lo que se trata es de darse el gusto aquí y ahora, conseguir lo que se anda buscando, y luego, cada uno por su lado”, señala una mujer joven.

Como joven cristiano, conoces este mandato: “Huyan de la fornicación” (1 Corintios 6:18). * Por eso, seguramente evitas las situaciones que pudieran meterte en problemas. Pero a veces los problemas salen a buscarte. “En la escuela muchos chicos me han hecho proposiciones”, explica Cindy. Y lo mismo ocurre en los empleos. “El jefe me invitaba a ‘pasar un buen rato’ con él. Andaba siempre con lo mismo, así que tuve que renunciar”, dice Margarita.

Por otro lado, no te extrañe que la tentación venga en parte de ti, pues ya lo dice la Biblia: “El corazón es más traicionero que cualquier otra cosa, y es desesperado” (Jeremías 17:9). Una joven llamada Lourdes admite que, como bien pudo comprobar, esas palabras son muy ciertas: “Me gustaba una barbaridad el chico que me hizo proposiciones”. Katia explica que su experiencia fue parecida: “Los sentimientos eran muy fuertes, así que negarme fue una de las cosas más difíciles que he hecho”. Y Jaime, mencionado al principio, reconoce que no le fue fácil mantenerse puro: “Muchas chicas se me ofrecen, y decirles que no es toda una lucha. Yo diría que es lo que más me cuesta como cristiano. ¡Es superduro!”.

Si te has sentido como Lourdes, Katia o Jaime, pero has actuado como Jehová manda, mereces las más sinceras felicitaciones. Te animará saber que, como tú, el apóstol Pablo siempre tuvo que estar batallando con sus malas tendencias (Romanos 7:21-24).

Ahora bien, ¿qué principios bíblicos debería uno tener presentes si lo invitaran a tener relaciones íntimas sin compromiso?

¿Por qué son inmorales esas relaciones?

La Biblia condena la fornicación, o, lo que es lo mismo, los actos sexuales fuera del matrimonio. De hecho, es un pecado tan grave que quienes lo practiquen “no heredarán el reino de Dios” (1 Corintios 6:9, 10). Para no caer en la tentación, tienes que ver la inmoralidad como la ve Jehová. En tus manos está la decisión de mantener la pureza moral.

“Estoy segurísima de que no hay mejor manera de vivir que como nos ha enseñado Jehová.”—Karen (Canadá).

“Si se pasan por alto las leyes morales de Jehová a cambio de unos instantes de placer, la pérdida es enorme.”—Viviana (México).

“No olvides que tienes a tus padres, y también a muchísimos amigos y hermanos en la fe. Si cedes a la tentación, les fallarás a todos ellos.”—Peter (Gran Bretaña).

El apóstol Pablo escribió: “Sigan asegurándose de lo que es acepto al Señor” (Efesios 5:10). Si tú adoptas la postura de Jehová acerca de la fornicación, serás una de las personas que “odien lo que es malo”, aunque por tu imperfección te resulte atrayente (Salmo 97:10).

Lectura recomendada: Génesis 39:7-9. Fíjate en la valentía con que rechazó José las tentaciones sexuales y en lo que le ayudó a resistirlas.

Orgulloso de tus creencias

No es raro que los jóvenes defiendan con orgullo las causas en las que creen. Pues bien, como cristiano que eres, tienes el honor de dar gloria al nombre de Dios con tu conducta ejemplar. Así que no te avergüences de tu firme postura sobre las relaciones premaritales.

“Desde el principio, déjales muy claro que tienes valores morales.”—Allen (Alemania).

“No te disculpes por lo que crees.”—Esther (Nigeria).

“Tus compañeros no van a respetar tu postura sobre las relaciones sexuales si les dices: ‘Es que mis padres no me dejan’. Tienes que explicarles que eres quien no quiere tenerlas.”—Janet (Sudáfrica).

“Cuando estaba en la enseñanza media, los chicos sabían bien quién era yo y que perdían el tiempo tratando de convencerme.”—Vicky (Estados Unidos).

Si adoptas una postura firme a favor de tu fe, demostrarás que vas camino de la madurez cristiana (1 Corintios 14:20).

Lectura recomendada: Proverbios 27:11. Piensa en la manera en que tus acciones respaldan la causa más importante de toda la historia: la santificación del nombre de Dios.

Actúa con firmeza

Aunque es importante que digas que no, hay quienes van a creer que actúas así “para no parecer fácil”.

“Cuando te niegas, la otra persona pudiera verlo como un reto o incitación a mejorar sus dotes de cazador.”—Lauren (Canadá).

“Todo tiene que reforzar tu negativa: la forma de arreglarte, la manera de expresarte, las personas con quienes hablas y el trato que das a la gente.”—Joy (Nigeria).

“Tienes que dar un no rotundo y decidido.”—Daniel (Australia).

“Hay que ser fuerte. Cuando un chico me hizo proposiciones, le contesté: ‘¡Quítame las manos de encima!’ y me fui de allí fulminándolo con la mirada.”—Elena (Gran Bretaña).

“Hay que cortar por lo sano y decirle que ni te interesa ni te interesará jamás de los jamases. No puedes parecer un corderito.”—Jean (Gran Bretaña).

“Un muchacho me estaba molestando siempre con invitaciones y comentarios burlones. Hasta que un día me puse firme, y entonces dejó de acosarme.”—Juanita (México).

“Deja muy claro que jamás vas a ceder. Nunca aceptes regalos de chicos que tratan de ablandarte. Si no, a lo mejor luego te lo echan en cara, como si les debieras el favor.”—Lara (Gran Bretaña).

Si te mantienes firme, Jehová te ayudará. Por experiencia propia, el rey David pudo decirle lo siguiente a Jehová: “Con alguien leal tú actuarás en lealtad” (Salmo 18:25).

Lectura recomendada: 2 Crónicas 16:9. Fíjate en lo deseoso que está Jehová de ayudar a quienes le sirven de todo corazón.

Adelántate a los problemas

La Biblia señala: “Sagaz es el que ha visto la calamidad y procede a ocultarse” (Proverbios 22:3). ¿Qué te enseña este versículo? Que debes adelantarte a los problemas.

“De la gente que habla de esas cosas, cuanto más lejos, mejor.”—Naomi (Japón).

“Huye de las compañías y situaciones peligrosas. Conozco gente que cayó porque había tomado unos tragos.”—Isha (Brasil).

“No des datos personales, como la dirección o el teléfono.”—Diana (Gran Bretaña).

“No andes repartiendo besos y abrazos a los compañeros de clase.”—Esther (Nigeria).

“Ten cuidado con la manera como te vistes. No te pongas ropa provocativa.”—Heidi (Alemania).

“Algo que te protegerá siempre es llevarte bien con tus padres y tratar este asunto con ellos.”—Akiko (Japón).

Piensa en tu manera de hablar y comportarte, así como en las personas y lugares que frecuentas. Luego pregúntate: “¿Me estoy metiendo en situaciones donde es más probable que reciba proposiciones inmorales? ¿Estoy dando a entender involuntariamente que estoy en la disposición de aceptarlas?”.

Lectura recomendada: Génesis 34:1, 2. Fíjate en la tragedia que sufrió la joven Dina por estar donde no debía.

Recuerda que el asunto de las aventuras “sin importancia” sí tiene importancia, y mucha, para Jehová, y también debería tenerla para ti. La Biblia dice: “Ningún fornicador, ni inmundo [...] tiene herencia alguna en el reino del Cristo y de Dios” (Efesios 5:5). Si te plantas a favor de lo correcto, mantendrás la conciencia limpia y no perderás tu dignidad. Es como dijo Carol: “¿Por qué vas a permitir que te tomen solo como un juguete para pasar un buen rato? No eches a perder lo que tanto trabajo te ha costado”.

Encontrarás más artículos de la sección “Los jóvenes preguntan...” en www.watchtower.org/yps

[Notas]

^ párr. 3 Se han cambiado los nombres.

^ párr. 7 El concepto de tales “amistades” es bastante amplio, y abarca otras prácticas íntimas, como tocarse y besarse apasionadamente.

^ párr. 8 Fornicación es todo uso indebido de los órganos genitales fuera del matrimonio. Además del coito propiamente dicho, incluye prácticas como el sexo oral y anal, y la masturbación a la pareja, sea que intervengan personas del mismo o de distinto sexo.

PARA PENSAR

▪ Aunque por nuestra tendencia al pecado tal vez nos resulten atrayentes las relaciones prohibidas, ¿por qué están mal?

▪ ¿Qué harás si te invitan a tener relaciones inmorales?

[Recuadro de la página 27]

▪ La Biblia dice que “el que practica la fornicación peca contra su propio cuerpo” (1 Corintios 6:18). ¿De qué maneras hace eso? Anota las que se te ocurran.

․․․․․

Pistas: Para contestar la pregunta anterior, consulta Razonamiento a partir de las Escrituras, página 183, y Perspicacia para comprender las Escrituras, volumen 1, página 963. Ambas publicaciones están editadas por los testigos de Jehová.

[Recuadro de la página 29]

NOTA A LOS PADRES

“Un compañero de clase me invitó a ser ‘amigos con derechos’. Tardé un rato en imaginarme a qué se refería, pues yo solo tenía 11 años.”—Leonor.

Los niños se ven expuestos al tema del sexo a edades sorprendentemente tempranas. Como bien predijo la Biblia hace siglos, en estos “últimos días” vivimos en “tiempos críticos, difíciles de manejar”. Muchos individuos se comportan “sin autodominio” y son “amadores de placeres más bien que amadores de Dios” (2 Timoteo 3:1, 3, 4). Las relaciones sexuales esporádicas y sin compromiso de las que habla el artículo dirigido a los jóvenes no son más que una de las múltiples indicaciones de que se está cumpliendo esta profecía.

El mundo en que ustedes se criaron es muy distinto del actual. Sin embargo, hasta cierto punto las cuestiones son las mismas. Por eso, no permitan que los agobien o intimiden las malas influencias a las que se enfrentan sus hijos. Más bien, adopten la firme resolución de ayudarlos a seguir este consejo que dirigió el apóstol Pablo a los cristianos hace casi dos mil años: “Pónganse la armadura completa que proviene de Dios para que puedan estar firmes contra las maquinaciones del Diablo” (Efesios 6:11). La realidad es que muchos jóvenes cristianos realizan un esfuerzo loable por hacer lo que está bien, a pesar de las influencias nocivas que los rodean. ¿Cómo pueden ustedes, padres, ayudar a sus hijos a actuar así?

Una forma es valiéndose de esta información para iniciar una charla con ellos. Las secciones tituladas “Lectura recomendada” contienen referencias a pasajes bíblicos que invitan a la reflexión. A veces contienen ejemplos reales de personas que se pronunciaron a favor de lo correcto y fueron bendecidas, o de individuos que pasaron por alto las leyes de Dios y sufrieron las consecuencias. Otros versículos citados destacan principios que pueden ayudar a sus hijos a reconocer el gran privilegio que tanto ellos como ustedes comparten: vivir de acuerdo con las leyes de Dios. ¿Por qué no fija ahora mismo un momento para repasar esta información con ellos?

Seguir las normas de Dios siempre nos beneficia (Isaías 48:17, 18). Si las desobedecemos, no podremos menos que padecer dolores. Los editores de ¡Despertad! están seguros de que Jehová bendecirá su empeño por inculcar las leyes y principios de Dios en el corazón de sus hijos (Deuteronomio 6:6, 7).

[Ilustración de la página 28]

Deja muy claro que jamás vas a ceder