De nuestros lectores

El día que no haya más enfermedades (Enero de 2007) Ustedes dicen en el artículo que algunas personas “invierten tiempo y dinero en tratamientos y remedios ineficaces o hasta perjudiciales”. Esta afirmación parece referirse a las distintas formas de medicina alternativa, dado que el artículo plantea dudas sobre la efectividad y lo seguro de algunos tratamientos alternativos. ¿Quiere decir que ¡Despertad! respalda la medicina convencional por considerarla más segura y eficaz? De acuerdo con la Oficina General de Contabilidad de Estados Unidos, existen muchas pruebas que hacen pensar justo lo contrario.

G. C., Estados Unidos

¡Despertad! responde: Algunos tratamientos ampliamente aceptados que hasta cierto punto se consideraban seguros y efectivos han demostrado ser peligrosos con el tiempo, tanto en el campo de la medicina convencional como en el de la alternativa. Lo prudente es obtener, a un grado razonable, suficiente información sobre los beneficios y los riesgos del tratamiento que se esté contemplando —sea convencional o alternativo— y asegurarse de que no entre en conflicto con los principios bíblicos. Eso exige tomar decisiones personales. Como hemos afirmado en otras ocasiones, ¡Despertad! no respalda ningún tratamiento en particular. Además, el cristiano se abstiene de juzgar o criticar las decisiones de otras personas en materia de salud. Como señalaron los artículos, al final de cuentas ni la medicina alternativa ni la medicina convencional tienen la solución para las enfermedades de la humanidad. Únicamente el Reino de Dios logrará que no haya más enfermedades (Revelación [Apocalipsis] 21:3, 4).

Treparé ‘justamente como el ciervo’ (Agosto de 2006) La paciencia y la humildad de Francesco Abbatemarco me hicieron reflexionar. Francesco no solo hizo cuanto pudo por superar su discapacidad física con el fin de servir a Jehová, sino que también luchó contra sus sentimientos negativos. Su experiencia me recuerda que sin importar en qué situación nos hallemos, podemos servir a Jehová al máximo de nuestras capacidades. Además, me animó ver los cambios espectaculares que efectuó en su vida al aplicar los principios de la Palabra de Dios.

N. G., Camboya

Eran muchos los obstáculos que Francesco tenía que vencer, pero al hallar la verdad, los afrontó sin acobardarse. Resulta extraordinario su ejemplo de determinación. Espero que su relato motive a otras personas como me ha motivado a mí.

M. D., Sudáfrica

¡Me encantó su experiencia! Quisiera poder decirle a Francesco en persona cuánto me animó su ejemplo; me he propuesto poner más empeño en ampliar mi servicio a Jehová.

J. B., Estados Unidos

Gracias, Francesco, por tu admirable ejemplo de celo y aguante. Estoy segura de que en el nuevo sistema vas a trepar como un ciervo. Quiero que sepas que tienes hermanos y hermanas que te quieren de verdad y oran por ti.

S. G., Rusia