Un espléndido golfo
Un espléndido golfo
DE NUESTRO CORRESPONSAL EN MÉXICO
ENTRE el México continental y la península de Baja California se encuentran las aguas azul turquesa del golfo de California (vea abajo), conocido en un tiempo como el mar de Cortés. Gran parte de esta región —de costas desérticas e islas de terreno escarpado— ha sido declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. ¿Por qué es tan especial esta zona?
El golfo de California tiene una longitud de más de 1.000 kilómetros (700 millas), y su anchura promedio es de 153 kilómetros (95 millas). Al igual que las tierras que lo bordean, es hermoso y rebosa de vida. Las mareas de este golfo se encuentran entre las mayores del planeta, pues se han medido fluctuaciones de hasta 9 metros (30 pies) en su extremo norte. Goza de una inmensa concentración de organismos microscópicos y de una extraordinaria diversidad biológica gracias a la abundante luz solar y a las aguas ricas en nutrientes. Estos factores, así como las aguas cristalinas, impulsaron al oceanógrafo Jacques-Yves Cousteau a llamar a este lugar “el acuario del mundo”.
Dado que contiene más de ochocientas noventa especies de peces —unas noventa son exclusivas de la región—, el golfo constituye un laboratorio natural para el estudio de la vida del mar. Lo triste es que están disminuyendo los ejemplares de muchas especies, entre ellas una marsopa difícil de encontrar: la vaquita marina.
La vaquita es el miembro más pequeño de la familia de las marsopas, pues mide un metro y medio de largo (casi cinco pies). El color de su piel varía desde el gris tenue hasta el pardo rojizo, y tiene manchas negras alrededor de los ojos. Este animalito tímido casi nunca se deja ver y no se sabe mucho de él, ya que solo habita en las aguas poco profundas y turbias del golfo, cerca del delta del río Colorado. De hecho, no fue descubierto sino hasta 1958, cuando se hallaron
los cráneos de tres ejemplares en una playa de Baja California.Como solo cuenta con una población de pocos centenares, la vaquita ha sido incluida en la lista de especies en grave peligro de extinción. A pesar de ello, decenas mueren cada año al quedar atrapadas en redes de pesca. Para garantizar la supervivencia de este mamífero único, México ha creado una reserva natural que incluye parte del hábitat de la vaquita. Los demás residentes y visitantes migratorios del golfo incluyen ballenas, la manta voladora gigante, la tortuga laúd, el león marino, el pez vela, marlines y grandes bancos de atún.
En la zona sur del golfo, muy al fondo, los científicos han encontrado formas de vida exóticas que muy pocas personas han visto, y con razón, pues tales organismos viven en la cuenca de Guaymas, a una profundidad de casi 2.000 metros (7.000 pies). Este abismo tiene fuentes hidrotermales que sustentan comunidades florecientes de criaturas que obtienen energía, no de la luz solar, sino del sulfuro de hidrógeno. Una de las criaturas que viven en estas fuentes es un tipo de gusano tubícola. Este animalito no tiene ni boca ni estómago, pero ostenta un penacho carmesí en la parte superior. Vive junto a otros gusanos y permanece erguido y aferrado por un extremo al fondo marino. Se mece como una varita tanto en las aguas frías del océano como en las aguas cálidas que emanan de las fuentes. Cada gusano alberga bacterias dentro de su cuerpo, que le ayudan a mantenerse vivo. El penacho es en realidad su branquia.
Aunque la biodiversidad de este golfo ahora está en peligro, su futuro es prometedor. ¿Por qué? Porque al Creador le interesa. De hecho, se interesa tanto por la Tierra que pronto intervendrá para protegerla de más daño, y luego la restaurará a su estado original (Génesis 1:26-28; Revelación [Apocalipsis] 11:18). Es difícil imaginarse lo precioso que será entonces el golfo de California. Lo cierto es que la palabra “espléndido” tal vez no le hará justicia a esta hermosa región.
[Ilustración de la página 25]
Ballena de aleta
[Ilustración de la página 25]
Gusanos tubícolas
[Reconocimientos de la página 24]
Imagen de satélite: NASA/The Visible Earth (http://visibleearth.nasa.gov/); arrecife: © Dirscherl Reinhard/age fotostock
[Reconocimientos de la página 25]
Playa: Mexico Tourism Board; ballena: © Mark Jones/age fotostock; gusanos tubícolas: © Woods Hole Oceanographic Institution