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La Versión del Rey Jacobo: ¿por qué es tan popular?

La Versión del Rey Jacobo: ¿por qué es tan popular?

La Versión del Rey Jacobo: ¿por qué es tan popular?

ESTE año, Inglaterra celebró con múltiples actos el cuarto centenario de la Versión del Rey Jacobo (King James Version), conocida también como la Versión Autorizada. Se prepararon documentales especiales de radio y televisión, así como congresos, conferencias y seminarios.

El príncipe Carlos presidió los actos en homenaje a este tesoro nacional que lleva el nombre del rey Jacobo I de Inglaterra. Ahora bien, ¿cómo ganó la Versión del Rey Jacobo —publicada en mayo de 1611⁠— un lugar preferente en el corazón de las personas de habla inglesa?

La traducción cobra ímpetu

Para mediados del siglo XVI empezó a surgir en Europa el deseo de conocer las doctrinas bíblicas. Menos de dos siglos antes, hacia 1380, John Wycliffe había despertado el apetito del público anglosajón con su traducción de la Biblia a partir del latín. Y sus seguidores —los lolardos⁠— hicieron circular por toda la nación durante los siguientes doscientos años pasajes de las Escrituras copiados a mano.

El Nuevo Testamento del biblista William Tyndale, traducido del griego al inglés y publicado en 1525, marcó otro hito histórico. Varios años después, en 1535, Miles Coverdale produjo su Biblia completa en inglés. Un año antes, Enrique VIII había roto relaciones con Roma y había dado un paso estratégico: con objeto de fortalecer su posición como cabeza de la Iglesia de Inglaterra, había autorizado una traducción de la Biblia al inglés, que se imprimió en 1539 y se conoció como la Gran Biblia. Consistía en un voluminoso tomo con gruesas letras góticas.

Los puritanos y otros exiliados protestantes de toda Europa se establecieron en Ginebra (Suiza). En esta ciudad apareció en 1560 la Biblia de Ginebra, la primera en inglés con un tipo de letra fácil de leer y divisiones en capítulos y versículos. Fue importada a Inglaterra y pronto alcanzó gran popularidad. En 1576 se imprimió también allí. Aunque sus mapas y notas marginales ayudaban a clarificar el texto, estas últimas irritaron a algunos lectores porque criticaban al papado.

Se satisface una exigencia

La falta de aceptación general de la Gran Biblia y las notas polémicas de la Biblia de Ginebra condujeron a la decisión de publicar una Biblia revisada. Se eligió como modelo el texto de la Gran Biblia y se encargó la misión a los obispos de la Iglesia de Inglaterra. El resultado fue la Biblia de los Obispos, publicada en 1568, la cual consistía en un gran tomo con abundantes grabados. No obstante, los calvinistas, que repudiaban los títulos religiosos, se sintieron ofendidos por el uso de la palabra obispos, razón por lo que esta versión tampoco gozó de acogida general.

Tras su ascenso en 1603 al trono de Inglaterra, el rey Jacobo I ordenó la preparación de una nueva Biblia. * Como su intención era que resultara atractiva para todos, mandó que no contuviera notas o glosas ofensivas.

El rey Jacobo fue el promotor del proyecto. Con el tiempo, 47 eruditos repartidos en seis grupos en distintos puntos de la nación prepararon las secciones del texto. Auxiliándose de la obra de Tyndale y de Coverdale, estos escriturarios básicamente revisaron la Biblia de los Obispos. Además, consultaron la Biblia de Ginebra y el Nuevo Testamento católico inglés publicado en Rheims en el año 1582.

El rey mismo era un destacado biblista, y la dedicatoria de la traducción “al altísimo y poderosísimo príncipe, Jacobo”, fue un reconocimiento a su gestión. Su ejercicio de la autoridad como cabeza de la Iglesia de Inglaterra fue visto como un intento de unificar a la nación.

Una obra maestra de la literatura

Al clero le complació mucho recibir de manos de su rey una Biblia “destinada a ser leída en las iglesias”. Pero aún quedaba en el aire la pregunta de cómo la recibiría el pueblo.

En su extenso prefacio original, los traductores manifestaron sus temores al respecto. Sin embargo, a la Versión del Rey Jacobo le fue muy bien, a pesar de que le tomó unos treinta años desbancar a la Biblia de Ginebra en el afecto de la gente.

“Para entonces —dice el libro The Bible and the Anglo-Saxon People [La Biblia y el pueblo anglosajón]⁠— ya era la Versión Autorizada, aunque su única autorización emanaba de su propia excelencia.” La obra The Cambridge History of the Bible [La historia de la Biblia Cambridge] concluye: “Su texto adquirió una santidad atribuible únicamente a la voz directa de Dios. Multitud de cristianos de habla inglesa han considerado poco menos que una blasfemia alterar las palabras de la Versión del Rey Jacobo”.

Hasta los confines de la Tierra

Los primeros colonizadores ingleses que llegaron a Norteamérica llevaron consigo la Biblia de Ginebra. Sin embargo, con el tiempo, la Versión del Rey Jacobo ganó mayor aceptación en América. Conforme el imperio británico se expandía por la Tierra, los misioneros protestantes generalizaron su uso. Y como muchos de los que traducían las Escrituras a los idiomas locales desconocían el hebreo y el griego bíblicos, la tomaron como base para su trabajo.

Hoy por hoy, según la British Library, “la Versión del Rey Jacobo, o Versión Autorizada, es el texto más publicado en lengua inglesa”. Algunos calculan la cifra de ejemplares impresos en el mundo en más de mil millones.

Hora de cambios

A lo largo de los siglos, muchas personas han creído que la Versión del Rey Jacobo es la única Biblia “verdadera”. En 1870 se emprendió en Inglaterra una revisión completa del texto, la llamada English Revised Version. Posteriormente se llevó a cabo una revisión de menor envergadura para Estados Unidos, conocida como la American Standard Version. * En 1982 se hizo otra revisión, la Revised Authorised Version, cuyo prefacio explica que se realizaron esfuerzos por “mantener esa calidad lírica que tanta estimación le ha granjeado a la Versión Autorizada” de 1611.

Si bien es cierto que la Biblia sigue siendo el mayor éxito de ventas del mundo y que la del rey Jacobo es la versión más popular, también es verdad lo que dijo el profesor de Literatura Richard G. Moulton: “Hemos hecho casi todo lo que es posible hacer con estos escritos hebreos y griegos. [...] Los hemos traducido [y] hemos revisado las traducciones [...] Solo nos queda una cosa por hacer con la Biblia: leerla”.

La Versión del Rey Jacobo es, sin lugar a dudas, una joya de la literatura, apreciada y valorada por su excepcional belleza de expresión. Pero ¿qué decir de la importancia de su mensaje? Los escritos bíblicos inspirados revelan la solución definitiva a los problemas que nos acosan en los tiempos críticos en que vivimos. Sea cual sea la versión que usted use, los testigos de Jehová estamos dispuestos a ayudarlo en su estudio de la Biblia.

[Notas]

^ párr. 10 Jacobo nació en 1566 y fue coronado en 1567 con el nombre de Jacobo VI de Escocia. En 1603 fue coronado como el rey Jacobo I de Inglaterra, convirtiéndose en el gobernante de ambas naciones. En 1604 asumió el título de “Rey de Gran Bretaña”.

^ párr. 21 Véase el recuadro “La American Standard Version”.

[Ilustración y recuadro de la página 23]

LA AMERICAN STANDARD VERSION

En 1901 apareció la American Standard Version, basada en el texto de la Versión del Rey Jacobo. En su prefacio dice: “No somos insensibles a la belleza y el vigor de estilo de la Versión Autorizada [del rey Jacobo], que tantas alabanzas le han merecido”. Con todo, esta versión introdujo un cambio sorprendente.

El prefacio explica: “Tras un riguroso análisis, los revisores llegaron a la convicción unánime de que una superstición judía, según la cual el Nombre Divino era demasiado sagrado para pronunciarlo, ya no debe dominar en las versiones inglesas del Antiguo Testamento ni en ninguna otra, como no lo hace, afortunadamente, en numerosas versiones hechas por misioneros contemporáneos”.

No es que el nombre de Dios, Jehová, no aparezca en absoluto en la Versión del Rey Jacobo, pues se halla en cuatro pasajes, a saber, Éxodo 6:3, Salmo 83:18 e Isaías 12:2 y 26:4. Pero la American Standard Version de 1901 lo restablece en unos siete mil pasajes.

[Ilustración]

1901

[Ilustración y recuadro de la página 24]

SE CUBRE UNA NECESIDAD ESPECIAL

En 1907, la Sociedad Watch Tower Bible and Tract publicó una edición de la Versión del Rey Jacobo para los Estudiantes de la Biblia, con un extenso apéndice llamado “Manual bereano de los maestros de la Biblia”. Más adelante, los testigos de Jehová imprimieron la Versión del Rey Jacobo en sus propias prensas. Para 1992, ya habían producido 1.858.368 ejemplares.

[Ilustración]

1907

[Ilustración y recuadro de la página 24]

UNA VALIOSA TRADUCCIÓN MODERNA

En el último medio siglo han aparecido infinidad de traducciones de la Biblia (algunas impresas en numerosos idiomas). Una que reviste especial valor para un amplio público es la Traducción del Nuevo Mundo de las Santas Escrituras, de la cual se han distribuido —completa o en parte⁠— más de 170 millones de ejemplares en 100 idiomas. Los mapas, el índice alfabético y el apéndice de su edición con referencias han ayudado a los lectores a comprender con mayor claridad el mensaje de la Biblia para nuestros días.

[Ilustración]

1961

[Ilustración de la página 22]

1611

[Reconocimiento de la página 22]

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