Jóvenes, ¡alaben a Jehová!
Jóvenes, ¡alaben a Jehová!
“Alaben a Jehová desde la tierra, [...] ustedes los jóvenes y también ustedes las vírgenes.” (SALMO 148:7, 12.)
1, 2. a) ¿De qué tipo de restricciones son conscientes muchos jóvenes? b) ¿Por qué no deben los jóvenes resentirse por las restricciones que les imponen los padres?
LOS jóvenes suelen ser muy conscientes de las cosas que aún no se les permite hacer. Muchos de ellos le dirán sin vacilar qué edad deben tener antes de que los dejen cruzar la calle solos o quedarse levantados hasta cierta hora de la noche o conducir un automóvil. En ocasiones puede parecerles que muchas de sus peticiones encuentran siempre la misma respuesta: “Espera a que seas mayor”.
2 Joven, tú sabes que si tus padres te imponen tales restricciones es porque piensan que es lo más prudente; quizás lo hacen para tu propia protección. Sabes también que a Jehová le agrada que obedezcas a tus padres (Colosenses 3:20). No obstante, ¿sientes a veces como si tu vida aún no hubiera empezado? ¿Tienes prohibidas todas las cosas importantes hasta que seas mayor? Nada más alejado de la realidad. Hoy se lleva a cabo una actividad mucho más valiosa que cualquier derecho o permiso que estés esperando que te concedan. ¿Se te permite participar en ella? Sí, y más importante aún: el propio Dios Altísimo te invita a que lo hagas.
3. Jehová invita a los jóvenes a que tengan ¿qué privilegio?, y ¿qué preguntas analizaremos a continuación?
3 ¿De qué actividad hablamos? Observa las palabras de nuestro texto temático: “Alaben a Jehová desde la tierra, [...] ustedes los jóvenes y también ustedes las vírgenes, viejos junto con muchachos” (Salmo 148:7, 12). He aquí el gran privilegio que tienes a tu alcance: el de alabar a Jehová. Como joven que eres, ¿te entusiasma tener parte en ello? A muchos jóvenes sí. Analicemos tres preguntas para ver por qué vale la pena sentir tal entusiasmo. Primero, ¿por qué debes alabar a Jehová?; segundo, ¿cómo puedes alabarlo eficazmente?, y tercero, ¿cuándo es apropiado comenzar a alabarlo?
¿Por qué alabar a Jehová?
4, 5. a) Según el Salmo 148, ¿en qué fascinante situación nos encontramos? b) ¿Cómo es posible que alaben a Jehová creaciones que no pueden hablar ni razonar?
4 Una de las principales razones para alabar a Jehová es que él es el Creador. El Salmo 148 dirige nuestra atención a esta verdad. Imagínate lo siguiente: ¿qué sentirías si te acercaras a una gran multitud que estuviera entonando al unísono un bello y conmovedor cántico? Y si oyeras que la letra expresa verdades que tú conoces e ideas que sabes que son importantes, alegres y edificantes, ¿sentirías el deseo de aprenderla y unirte al canto? A la mayoría de nosotros nos gustaría hacerlo. Pues bien, el Salmo 148 indica que te hallas en una situación parecida, pero más fascinante aún. En él se describe a una inmensa multitud que alaba a Jehová en un conjunto armónico. Sin embargo, a medida que vayas leyendo el salmo tal vez notes algo insólito. ¿A qué nos referimos?
5 Muchos de los alabadores descritos en el Salmo 148 carecen de la facultad de hablar y razonar. Por ejemplo, leemos que el Sol, la Luna, las estrellas, la nieve, el viento, las montañas y las colinas alaban a Jehová. ¿Cómo puede hacer tal cosa la creación inanimada? (Sl 148 Versículos 3, 8, 9.) Bueno, del mismo modo que lo hacen los árboles, las criaturas marinas y los demás animales (Sl 148 Versículos 7, 9, 10). ¿Has contemplado alguna vez una esplendorosa puesta de sol o has visto una luna llena surcando un mar de estrellas? ¿Te has reído encantado al ver jugar a los animales o te has quedado boquiabierto frente a un imponente paisaje? Entonces has “oído” el cántico de alabanza procedente de la creación. Todo lo que Jehová ha hecho nos recuerda que él es el Creador todopoderoso y que en el universo entero no hay nadie tan poderoso, tan sabio ni tan amoroso como él (Romanos 1:20; Revelación [Apocalipsis] 4:11).
6, 7. a) ¿A qué criaturas inteligentes incluye el Salmo 148 entre los alabadores de Jehová? b) ¿Por qué deberíamos sentirnos motivados a alabar a Jehová? Dé un ejemplo.
6 El Salmo 148 también incluye a la creación inteligente entre los alabadores de Jehová. En el Sl 148 versículo 2 hallamos a su “ejército” celestial, es decir, los ángeles, alabándolo. En el Sl 148 versículo 11 se invita a los seres humanos poderosos e influyentes, como reyes y jueces, a unírseles. Si para los poderosos ángeles es un deleite ensalzar a Jehová, ¿podría un simple ser humano creer justificadamente que es demasiado importante para hacerlo? A renglón seguido, en los Sl 148 versículos 12 y 13, se te invita también a ti, joven, a incorporarte al coro de alabanza. ¿Te sientes motivado a ello?
7 Supongamos que un buen amigo tuyo poseyera una habilidad sorprendente —tal vez para los deportes, el arte o la música—. ¿Les hablarías de él a tu familia y a otros amigos? Claro que lo harías. Pues bien, conocer todo cuanto Jehová ha hecho puede producir en nosotros el mismo efecto. Por ejemplo, Salmo 19:1, 2 dice que los cielos estrellados “hace[n] salir burbujeando el habla”. En cuanto a nosotros, cuando reflexionamos en los impresionantes logros de nuestro Dios, Jehová, difícilmente podemos contenernos de hablar acerca de él.
8, 9. ¿Por qué razones desea Jehová que lo alabemos?
8 Otra razón de peso para alabar a Jehová es que él quiere que lo hagamos. ¿Por qué? ¿Acaso precisa la alabanza de los seres humanos? No. Aunque los seres humanos sí necesitamos que se nos alabe de vez en cuando, Jehová es mucho más encumbrado (Isaías 55:8). Él no tiene dudas sobre sí mismo o sus cualidades (Isaías 45:5). Aun así, desea que lo alabemos y le complace que lo hagamos. Analicemos dos razones para ello. En primer lugar, él sabe que nos hace falta alabarlo, pues nos creó con la necesidad espiritual de adorarlo (Mateo 5:3). A Jehová le place vernos satisfacer dicha necesidad, tal como a tus padres les place verte comer alimentos sanos (Juan 4:34).
9 En segundo lugar, Jehová sabe que otras personas necesitan oír que lo alabamos. El apóstol Pablo escribió estas palabras al joven Timoteo: “Presta constante atención a ti mismo y a tu enseñanza. Persiste en estas cosas, pues haciendo esto te salvarás a ti mismo y también a los que te escuchan” (1 Timoteo 4:16). Efectivamente, cuando alabas a Jehová Dios enseñando la verdad acerca de él, les das a otras personas la oportunidad de que también lleguen a conocerlo y de que, gracias a ese conocimiento, se encaminen a la salvación eterna (Juan 17:3).
10. ¿Por qué nos sentimos impelidos a alabar a nuestro Dios?
10 Existe otro motivo más para alabar a Jehová. Recuerda el ejemplo que pusimos sobre tu talentoso amigo. Si escucharas a otras personas diciendo falsedades sobre él y difamándolo, ¿no te sentirías aún más determinado a defenderlo? Pues a Jehová también se le difama mucho en este mundo (Juan 8:44; Revelación 12:9). Por lo tanto, quienes lo amamos nos sentimos impulsados a decir la verdad sobre él, a poner las cosas en su sitio. ¿Quisieras tú también expresar tu amor y gratitud a Jehová, y demostrar que prefieres someterte a él y no a su principal enemigo, Satanás? Puedes lograr todo esto alabando a Jehová. La siguiente pregunta, entonces, es cómo hacerlo.
Cómo alabaron a Jehová algunos jóvenes
11. ¿Qué ejemplos bíblicos muestran que los jóvenes pueden ser eficaces alabadores de Jehová?
11 La Biblia muestra que los jóvenes suelen ser eficaces alabadores de Jehová. Por ejemplo, una niña israelita que había sido capturada por los sirios habló con valor a su ama sobre Eliseo, el profeta de Jehová. Sus palabras llevaron a que se obrara un milagro, lo que dio un impactante testimonio (2 Reyes 5:1-17). Jesús también dio testimonio con intrepidez cuando era niño. De todos los sucesos ocurridos en su juventud que pudieron haberse recogido en las Escrituras, Jehová escogió solo uno: la ocasión en que Jesús, a sus 12 años, interrogó valerosamente a los maestros religiosos en el templo de Jerusalén y los dejó extasiados por su comprensión de los caminos divinos (Lucas 2:46-49).
12, 13. a) ¿Qué hizo Jesús en el templo poco antes de su muerte, y qué efecto tuvo esto en los presentes? b) ¿Cómo se sintió Jesús ante las alabanzas de unos muchachos?
12 De adulto, Jesús también inspiró a los niños a alabar a Jehová. Por ejemplo, pocos días antes de su muerte pasó algún tiempo en el templo de Jerusalén, donde, según cuenta la Biblia, hizo “cosas maravillosas”. Echó a los que estaban convirtiendo aquel lugar sagrado en una cueva de ladrones; además, curó a ciegos y cojos. Todos los presentes, en particular los líderes religiosos, tendrían que haber alabado a Jehová y a su Hijo, el Mesías. Lamentablemente, muchas personas de aquel entonces no lo hicieron. Aunque sabían que Jesús había sido enviado por Dios, temían a las autoridades religiosas. Sin embargo, hubo un grupo que se expresó con resolución. ¿Sabes quiénes fueron? La Biblia relata: “Cuando los sacerdotes principales y los escribas vieron las cosas maravillosas que [Jesús] hizo, y a los muchachos que estaban clamando en el templo y diciendo: ‘¡Salva, rogamos, al Hijo de David!’, se indignaron, y le dijeron [a Jesús]: ‘¿Oyes lo que estos están diciendo?’” (Mateo 21:15, 16; Juan 12:42).
13 Aquellos sacerdotes esperaban que Jesús acallara a los niños que lo alababan. ¿Lo hizo? ¡Ni mucho menos! Jesús les replicó: “Sí. ¿Nunca leyeron esto: ‘De la boca de los pequeñuelos y de los lactantes has proporcionado alabanza’?”. Queda claro que a Jesús y a su Padre les complacía el clamor de alabanza de los niños. Ellos estaban haciendo lo que los adultos tendrían que haber hecho. En sus jóvenes mentes, todo debía de estar muy claro. Habían visto a este hombre ejecutar obras maravillosas, hablar con fe y con valor, y demostrar amor intenso a Dios y a su pueblo. Él era quien afirmaba ser: el prometido “Hijo de David”, el Mesías. Como premio a su fe, a estos niños incluso se les concedió el privilegio de cumplir una profecía (Salmo 8:2).
14. ¿Cómo se prestan para alabar a Jehová los dones que tienen los jóvenes?
14 ¿Qué aprendemos de estos ejemplos? Que los jóvenes pueden ser eficaces alabadores de Jehová. Por lo general poseen el don de ver la verdad de una forma clara y sencilla, así como de expresar su fe con celo y sinceridad. Además, tienen el don mencionado en Proverbios 20:29: “La hermosura de los jóvenes es su poder”. Ciertamente, los jóvenes tienen la dicha de gozar de fuerza y energía, que son recursos muy valiosos para alabar a Jehová. ¿De qué maneras concretas puedes emplear estos dones?
¿Cómo puedes tú alabar a Jehová?
15. ¿Qué motivación se necesita para alabar a Jehová correctamente?
15 Para que la alabanza a Jehová sea eficaz, debe brotar del corazón. Por eso, no puede estar motivada solo por el deseo de complacer a otros. Recuerda cuál es el mandamiento más importante: “Tienes que amar a Jehová tu Dios con todo tu corazón y con toda tu alma y con toda tu mente” (Mateo 22:37). ¿Has llegado a conocer a Jehová personalmente por tu propio estudio de su Palabra? El fruto lógico de este conocimiento es el amor a Jehová, y la forma natural de expresar dicho amor es alabándolo. Una vez que tengas una motivación clara y fuerte, estarás listo para alabar a Jehová con entusiasmo.
16, 17. ¿Qué papel desempeña la conducta en alabar a Jehová? Dé un ejemplo.
16 Ahora bien, antes de siquiera pensar en lo que dirás, piensa en cómo actuarás. Si aquella niña israelita del tiempo de Eliseo se hubiera comportado habitualmente de una manera grosera, irrespetuosa o poco honrada, ¿crees que sus captores sirios habrían escuchado lo que dijo sobre el profeta de Jehová? Tal vez no. Así mismo, será más probable que la gente te escuche si ve que eres respetuoso y honrado, y te portas bien (Romanos 2:21). Veamos un ejemplo.
17 En Portugal, a una niña de 11 años la presionaron en la escuela para que participara de festividades que iban en contra de su conciencia educada por la Biblia. Cuando explicó respetuosamente el porqué de su negativa a la maestra, esta se rió de ella. Aunque la maestra intentó repetidas veces avergonzarla burlándose de su religión, la niña siguió tratándola con respeto. Años más tarde, la joven hermana, que servía de precursora regular (ministra de tiempo completo), asistió a una asamblea. Mientras observaba a las personas que se bautizaban, reconoció a una de ellas: ¡era su antigua maestra! Después de abrazarse con lágrimas en los ojos, la mujer le dijo a la joven que nunca había olvidado su conducta respetuosa. Una testigo de Jehová la había visitado, y ella le había contado del comportamiento de una de sus anteriores estudiantes. Entonces había empezado a estudiar la Biblia y había terminado aceptando la verdad. Como ves, tu conducta puede ser una forma muy eficaz de alabar a Jehová.
18. ¿Qué pudiera hacer un joven si titubea a la hora de iniciar conversaciones sobre la Biblia y Jehová Dios?
18 ¿Te resulta a veces difícil entablar conversaciones sobre tu fe cuando estás en la escuela? No eres el único. Sin embargo, puedes preparar el camino para que otros te pregunten. Por ejemplo, si está permitido hacerlo, ¿por qué no llevas publicaciones bíblicas y las lees durante la hora del almuerzo o en otros momentos apropiados? Tal vez tus compañeros te pregunten qué lees. Al responderles y mencionar aspectos interesantes del artículo o del libro que tienes en la mano, habrás empezado una conversación casi sin darte cuenta. No olvides hacer preguntas para averiguar lo que ellos creen. Escucha con respeto y diles lo que has aprendido de la Biblia. Como muestran las experiencias de la página 29, hay muchos jóvenes que alaban a Dios en la escuela, lo que les proporciona mucho gozo y contribuye a que un gran número de personas llegue a conocer a Jehová.
19. ¿Cómo pueden los jóvenes hacerse más diestros en el ministerio de casa en casa?
19 El ministerio de casa en casa es un modo muy eficaz de alabar a Jehová. Si todavía no participas en él, ¿por qué no te lo propones? Y si ya lo estás haciendo, ¿hay otras metas que puedas fijarte? Por ejemplo, en lugar de repetir básicamente lo mismo en todas las puertas, busca maneras de mejorar pidiendo sugerencias a tus padres y a otras personas con experiencia. Aprende a emplear más la Biblia, a hacer revisitas eficaces y a comenzar estudios bíblicos (1 Timoteo 4:15). Cuanto más alabes a Jehová de estas maneras, más diestro te harás en el ministerio y más disfrutarás de él.
¿Cuándo deberías empezar a alabar a Jehová?
20. ¿Por qué no debes pensar que eres muy joven para alabar a Jehová?
20 De las tres preguntas analizadas en este artículo, esta última es la más sencilla de contestar. Fíjate en la respuesta directa que da la Biblia: “Acuérdate, ahora, de tu Magnífico Creador en los días de tu mocedad” (Eclesiastés 12:1). Así es. El momento de empezar a alabar a Jehová es ahora. Es muy fácil decir: “Soy muy joven para alabar a Jehová. No tengo experiencia. Es mejor que espere a que sea mayor”. No serías el primero en sentirse de esa manera. El joven Jeremías, por ejemplo, le dijo a Jehová: “¡Ay, oh Señor Soberano Jehová! Mira que realmente no sé hablar, pues solo soy un muchacho”. Sin embargo, Jehová le aseguró que no había razón para temer (Jeremías 1:6, 7). De igual manera, nosotros no tenemos nada que temer cuando alabamos a Jehová. Él es capaz de reparar por completo cualquier daño que alguien pueda causarnos (Salmo 118:6).
21, 22. ¿Por qué se asemejan a gotas de rocío los jóvenes que alaban a Jehová, y por qué es animadora la comparación?
21 Exhortamos, pues, a todos los jóvenes a no titubear en cuanto a alabar a Jehová. El mejor momento para participar en la obra más importante que se está realizando en la Tierra es ahora que eres joven. Si lo haces, formarás parte de algo maravilloso, a saber, la familia universal de alabadores de Jehová. Al Creador le encantará tenerte entre los miembros de esta familia. Fíjate en las siguientes palabras inspiradas que le dirigió el salmista: “Tu pueblo se ofrecerá de buena gana en el día de tu fuerza militar. En los esplendores de la santidad, desde la matriz del alba, tienes tu compañía de hombres jóvenes justamente como gotas de rocío” (Salmo 110:3).
22 Las gotas de rocío que resplandecen en la mañana presentan un cuadro hermoso, ¿verdad? Son refrescantes, relucientes y prácticamente imposibles de contar. Así los ve Jehová a ustedes, los jóvenes que lo alaban fielmente en estos tiempos críticos. No hay duda de que su decisión de alabarlo le regocija el corazón (Proverbios 27:11). Por consiguiente, jóvenes, no dejen que nada les impida alabar a Jehová.
¿Cómo respondería?
• ¿Cuáles son algunas razones importantes para alabar a Jehová?
• ¿Qué ejemplos bíblicos demuestran que los jóvenes pueden ser eficaces alabadores de Jehová?
• ¿Cómo pueden alabar a Jehová los jóvenes de hoy?
• ¿Cuándo deben los jóvenes empezar a alabar a Jehová, y por qué?
[Preguntas del estudio]
[Ilustraciones de la página 25]
Si tu amigo tuviera una habilidad sobresaliente, ¿verdad que se lo contarías a otros?
[Ilustración de la página 27]
Puede que tus compañeros de clase se interesen por tus creencias
[Ilustración de la página 28]
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