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Una creencia muy extendida

Una creencia muy extendida

Una creencia muy extendida

“El infierno me aterrorizaba. Soñaba con que me echaban en un lugar en llamas, y me despertaba gritando. Como es natural, me esforzaba muchísimo por no pecar.” (Arline)

¿CREE usted que el infierno es un lugar de tortura destinado a los pecadores? Muchas personas así lo creen. Según un sondeo realizado en Escocia en 2005 por un investigador de la Universidad de Saint Andrews, 1 de cada 3 ministros religiosos creía que quienes se apartaban de Dios sufrirían una “eterna angustia mental en el infierno”. Y 1 de cada 5 pensaba que experimentarían tormento físico.

La creencia en el infierno está muy extendida entre los habitantes de muchos países. En Estados Unidos, por ejemplo, una encuesta Gallup llevada a cabo en 2007 reveló que el 70% de los entrevistados creían en el infierno. Otro estudio realizado en 2000 mostró que el 71% de los mexicanos creían lo mismo. Esta creencia sobrevive hasta en países que no se consideran religiosos. Según la encuesta antes mencionada, el 40% de los argentinos y el 30% de los españoles también estaban convencidos de la existencia del infierno. Lo mismo opinaban el 42% de los canadienses y el 32% de los británicos, de acuerdo con otra encuesta Gallup efectuada en 2004.

Qué se enseña en las iglesias

Muchos miembros del clero ya no enseñan que el infierno es un lugar literal en el que arden los pecadores. Ahora se acercan más a la definición que se hace en la edición de 1993 del Catecismo de la Iglesia Católica: “La pena principal del infierno consiste en la separación eterna de Dios”.

Con todo, muchas personas siguen creyendo que el infierno es un lugar de tormento físico y mental. Y los que defienden esta doctrina afirman que está basada en la Biblia. Así lo reflejan las palabras de Albert Mohler, presidente del centro teológico Southern Baptist Theological Seminary, quien sostiene que esta doctrina “es una realidad bíblica”.

¿Importa lo que usted crea?

Si el infierno es un lugar de tormento, hay razones para tenerle miedo. Sin embargo, si esta enseñanza es falsa, los clérigos que la defienden están causando mucha confusión y angustia innecesaria. Pero no solo eso: están difamando a Dios.

Pues bien, ¿qué dice la Biblia al respecto? Veámoslo en los siguientes artículos, donde se usarán diferentes versiones de la Biblia —tanto católicas como protestantes— para analizar las siguientes cuestiones: 1) adónde vamos cuando morimos, 2) qué enseñó Jesús sobre el infierno y 3) cómo nos acerca a Dios saber la verdad sobre el infierno.