Este artículo le permitirá encontrar en su propia Biblia la respuesta a algunas preguntas que tal vez se haya hecho. Si lo desea, los testigos de Jehová pueden analizar estas preguntas con usted.

1. ¿Son concretas las profecías bíblicas?

Solo el Dios todopoderoso puede predecir el futuro con detalle (Amós 3:7). Por ejemplo, casi al principio de la historia humana anunció la llegada del Mesías, o Cristo. Además, predijo que este sería un descendiente del fiel Abrahán y un gobernante que llevaría a la humanidad obediente a una vida perfecta, libre de enfermedades (Génesis 22:18; Isaías 53:4, 5). Dios también indicó que el Mesías prometido nacería en Belén. (Lea Miqueas 5:2.)

Unos setecientos años antes de su nacimiento, la Biblia ya había revelado que el Mesías —que resultó ser Jesús— vendría de una virgen, sería despreciado, daría su vida para borrar los pecados de muchos y sería enterrado con los ricos (Isaías 7:14; 53:3, 9, 12). Y con más de cinco siglos de antelación declaró que entraría en Jerusalén a lomos de un asno y que sería traicionado por treinta piezas de plata. Todo se cumplió hasta el más mínimo detalle. (Lea Zacarías 9:9 y 11:12.)

2. ¿Predice Dios fechas exactas?

Con más de cinco siglos de anticipación, la Biblia profetizó el año en que se presentaría el Mesías. El tiempo que transcurriría hasta su llegada se midió usando un patrón simbólico de semanas de años, en el que una “semana” equivale a siete años. La profecía distingue dos períodos: uno de 7 semanas y otro de 62. Al sumarlos, dan un total de 69 semanas de años, o 483 años. ¿Desde cuándo se empezaron a contar? Según la Biblia, desde que un siervo de Dios llamado Nehemías llegó a Jerusalén y comenzó a reedificarla. La historia persa fija ese momento en el 455 antes de nuestra era (Nehemías 2:1-5). Jesús se bautizó 483 años después, en el 29 de nuestra era. ¡Justo cuando se había predicho! (Lea Daniel 9:25.)

  3. ¿Hay profecías bíblicas que se estén cumpliendo hoy?

Jesús habló de sucesos trascendentales que tendrían lugar en nuestro tiempo. En su profecía hizo referencia a las buenas nuevas del Reino de Dios, las cuales aliviarían a las personas que amaran al Creador. Ese Reino acabará con este mundo malvado. (Lea Mateo 24:14, 21, 22.)

Las profecías bíblicas dan una descripción detallada de las condiciones que existirían antes del fin de este sistema. Revelan que, contrario a lo que podría esperarse en una era de progreso, el hombre arruinaría la Tierra. Se incrementaría el sufrimiento provocado por las guerras, las escaseces de alimento, los terremotos y las epidemias (Lucas 21:11; Revelación [Apocalipsis] 11:18). Los valores morales se derrumbarían. Y en esos tiempos difíciles, los seguidores de Cristo predicarían las buenas nuevas del Reino en todas las naciones. (Lea Mateo 24:3, 7, 8; 2 Timoteo 3:1-5.)

4. ¿Qué futuro le espera a la humanidad?

El Todopoderoso tiene preparadas muchas bendiciones para los seres humanos que le obedezcan. El Reino celestial, compuesto por Jesucristo —el Mesías— y un grupo escogido de personas, gobernará la Tierra por mil años. Los muertos volverán a vivir y tendrán la oportunidad de que Dios les conceda vida eterna. Todas las personas serán sanadas de sus males, pues la enfermedad y la muerte habrán dejado de existir. (Lea Revelación 5:10; 20:6, 12; 21:4, 5.)

Si desea más información, consulte las páginas 23 a 25 y 197 a 201 del libro ¿Qué enseña realmente la Biblia?