El Comité de Sucursal de Brasil ha formado 18 Comités de Socorro para ayudar a los testigos de Jehová afectados económicamente por la pandemia del coronavirus. Los Comités de Socorro están cuidando de unas 12.000 congregaciones por todo el país. Eso incluye a Testigos que viven en lo más profundo y remoto de la Amazonia, donde hasta la fecha se han entregado provisiones a 131 familias.

El Comité de Socorro de Manaos —capital del estado de Amazonas— preparó paquetes con artículos de primera necesidad para un mes. Los paquetes contenían alimentos básicos como frijoles, harina de yuca, arroz y leche en polvo, y también artículos de aseo personal como jabón, papel higiénico, cepillos de dientes y pasta de dientes. Los hermanos enviaron los paquetes al puerto de Manacapuru y desde allí los distribuyeron en barco a varias zonas apartadas, como Membeca y Lago do Castanho.

Marinelma es una Testigo que vive en la región de Lago do Castanho. Después de recibir su paquete de provisiones, dijo: “En primer lugar quiero darle las gracias a Jehová por cuidar de nosotros. Nos hacía falta mucha ayuda; no teníamos dinero ni para comprar alimentos. Y también quiero darles las gracias a los hermanos por su amor y por ser tan generosos. Mi hijo de seis años me vio abriendo el paquete y sacando las provisiones. Así que aproveché la oportunidad para explicarle que Jehová había usado a los hermanos para ayudarnos. Entonces mi pequeñín me dijo: ‘Mamá, ¿podemos hacer una oración para darle las gracias a Jehová?’”.

Jonas Monteiro, un Testigo que vive junto con su familia en la ciudad de Caapiranga, envió una carta al Comité de Socorro que decía en parte: “Muchísimas gracias por toda su ayuda. Sentimos el amor de Jehová por medio de ustedes. Es un privilegio enorme formar parte de esta familia mundial”.

Los hermanos que sirven en los Comités de Socorro también han recibido ánimo. Isaac Emannuel Ramalho de Oliveira, un anciano que trabaja en el Comité de Socorro, dijo: “Cada día que paso en el Comité de Socorro, siento que mi fe se hace más fuerte. Estoy seguro de que todo esto me ayuda mucho más a mí que a los hermanos”.

Está claro que en esta pandemia Jehová cuida a sus siervos estén donde estén. Ver eso fortalece nuestra fe (Salmo 94:14).