Desde el 16 de octubre de 2019, una serie de fuertes terremotos sacudieron el sur de Filipinas. Murieron 21 personas, hubo más de 400 heridos y más de 35.000 personas tuvieron que abandonar sus hogares. Por lo menos tres de los terremotos fueron de más de 6,0 grados de magnitud y durante días se registraron réplicas en la zona. No murió ningún testigo de Jehová, pero una de nuestras hermanas sufrió heridas menores.

Cuatro Salones del Reino y 195 casas de Testigos resultaron gravemente dañados. Además, 9 Salones del Reino y 351 casas sufrieron daños. Muchos de nuestros hermanos están viviendo en tiendas, o carpas, porque es peligroso quedarse en sus casas.

La sucursal de Filipinas organizó dos Comités de Socorro para coordinar las labores de ayuda. Seis representantes de la sucursal, entre ellos tres miembros del Comité de Sucursal, visitaron a los Testigos del área afectada para consolarlos con la Biblia y darles ánimo.

Le pedimos a Jehová que siga ayudando a los hermanos que están sufriendo las consecuencias de estos terremotos (Salmo 70:5).