El martes 30 de octubre, el tifón Yutu tocó tierra en Luzón, la isla más grande de Filipinas. Yutu ya había azotado las islas Marianas del Norte el día 24 del mismo mes cuando era considerado un supertifón. Las intensas lluvias de esta tormenta provocaron inundaciones y deslizamientos de tierra que causaron varias muertes. Miles de personas tuvieron que ser evacuadas y 11 perdieron la vida.

La sucursal de Filipinas informa que ningún Testigo murió ni resultó herido a causa de la tormenta. Sin embargo, 73 casas de nuestros hermanos sufrieron daños y lo mismo ocurrió con 6 Salones del Reino. La sucursal ya está coordinando las labores de socorro.

Seguimos orando por nuestros hermanos y hermanas de Filipinas, que se han visto afectados por 18 tifones durante el 2018. Como ellos, confiamos en que Jehová sostendrá a sus siervos (Salmo 55:22).