El pasado jueves 7 de septiembre, un terremoto de magnitud 8,2 sacudió la costa sur del Pacífico de México. Es el terremoto más fuerte que se ha producido en México durante el último siglo, y han muerto al menos 45 personas. Lamentablemente, hemos recibido la confirmación de que un hermano y dos hermanas han perdido la vida.

Además, los primeros informes indican que las casas de muchos hermanos y varios Salones del Reino han sufrido daños o han sido destruidos. También se han producido daños en dos Salones de Asambleas del estado de Chiapas. Se están llevando a cabo evaluaciones más detalladas.

Seguimos orando por nuestros hermanos y hermanas, seguros de que Jehová los consolará y les dará fuerzas (2 Tesalonicenses 2:16, 17).

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