MAPUTO (Mozambique). Unas lluvias más fuertes de lo normal que cayeron desde diciembre hasta mediados de enero provocaron graves inundaciones en la provincia de Zambezia. Como resultado, murieron 158 personas. Según la sucursal de los testigos de Jehová en Mozambique, ningún Testigo murió ni resultó herido. Sin embargo, las inundaciones dañaron dos Salones del Reino, lugares donde se reúnen los testigos de Jehová, y destruyeron 225 de sus hogares.

La sucursal puso en marcha varios grupos de socorro para ayudar a los Testigos que vivían en las zonas afectadas. Algunos de los salones se usaron como refugio y centros de distribución de alimentos. En el distrito de Chire, a unos 1.500 kilómetros (950 millas) de Maputo, las aguas destruyeron dos puentes que daban acceso a la zona, por lo que más de 1.300 Testigos quedaron aislados. El Instituto de Aviación Civil de Mozambique permitió a los Testigos lanzar 17 toneladas de suministros desde un helicóptero.

Alberto Libombo, un portavoz de los testigos de Jehová en Mozambique, declaró: “Ha sido maravilloso ver a tantos compañeros nuestros ayudando con las labores de socorro. La sucursal de los Testigos en Mozambique continúa organizando la distribución de alimentos y la reconstrucción de las casas dañadas. Seguiremos haciendo todo lo posible por brindar ayuda espiritual y consuelo a las víctimas”.

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