El 7 de abril de 2020, la Fiscalía General de Bielorrusia rechazó la solicitud de Rusia de extraditar a Nikolái Majálichev y decidió ponerlo en libertad. Nikolái estaba muy contento de salir de la cárcel justo a tiempo para celebrar la Conmemoración de la muerte de Jesucristo junto con sus compañeros de creencia en Bielorrusia.

El 21 de febrero de 2020, Nikolái viajaba desde Rusia a Bielorrusia para visitar a unos amigos. La policía bielorrusa lo detuvo cuando revisó su pasaporte y vio que su nombre estaba en la lista internacional de los más buscados de Rusia, acusado de organizar actividades de una organización “extremista”.

Tres días después, las autoridades bielorrusas lo arrestaron mientras decidían si sería extraditado a Rusia para enfrentar los cargos presentados contra él en enero de 2019. Esta fue la primera vez que se detenía a un testigo de Jehová en otro país por una orden judicial rusa.

Durante el tiempo que estuvo detenido, Nikolái se mantuvo activo en sentido espiritual, y eso le ayudó a tener una actitud positiva. En el mes de marzo les dio clases bíblicas a cuatro personas y predicó 198 horas.

Sabemos que nuestros hermanos de Rusia seguirán confiando en que Jehová los ayudará y será su refugio en tiempos de angustia (Salmo 142:5).