El 29 de enero de 2021, a el Tribunal de Distrito de Birobidzhan de la Región Autónoma Hebrea tiene previsto anunciar su sentencia en el caso contra Yelena Reinó-Chernishova. El fiscal todavía no ha solicitado una pena para nuestra hermana.

Yelena Reinó-Chernishova

• Año de nacimiento: 1968 (Maloy, región de Irkutsk).

• Datos biográficos: Estudió la Biblia con los testigos de Jehová en la década de los noventa. Eso la motivó a dejar el ejército y a esforzarse por mejorar su matrimonio. Se bautizó como testigo de Jehová en 1998.

• Aunque su esposo no comparte sus creencias, apoya su decisión de ser testigo de Jehová. A Yelena le gusta jugar fútbol y voleibol.

El 29 de septiembre de 2019, las autoridades de Birobidzhan presentaron cargos contra Yelena Reinó-Chernishova.

Agentes del Servicio Federal de Seguridad registraron la casa de Yelena. A pesar de que eso asustaría a cualquiera, Yelena dice que Jehová la ayudó a mantener la calma. Ella recuerda: “Le oré a Jehová sin parar pidiéndole que me diera tranquilidad y valor, que me ayudara a comportarme con dignidad y a no fallarle. Cuando registraron mi casa, todo el mundo fue amable”.

El juicio le ha hecho mucho daño a Yelena y su familia. En julio de 2020, su esposo tuvo un ataque al corazón, el tercero que sufre. Además, las autoridades no permiten que Yelena salga de Birobidzhan y congelaron sus cuentas bancarias.

Algo que ha ayudado a Yelena a ser fuerte es pensar en cómo han aguantado la persecución otros siervos de Jehová. Ella nos cuenta: “Me gusta leer sobre hermanos y hermanas que han sufrido registros en sus casas y persecución por ser testigos de Jehová. Han pasado por tantas dificultades y los han maltratado tanto..., pero han aguantado con mucha valentía”. Otra cosa que la ha ayudado es leer la Biblia regularmente y meditar en ella.

Durante todas estas pruebas, a Yelena le gusta pensar en las palabras de Isaías 30:15, que en parte dice: “Su fuerza dependerá de que mantengan la calma y demuestren confianza”. Ella explica: “Siempre me acuerdo de este versículo. No tengo palabras para darle las gracias a Jehová por haberme permitido conocerlo. Mi corazón está en paz. Confío totalmente en Jehová, mucho más que antes. Estoy segura de que él nunca me va a abandonar”.