El 11 de diciembre de 2014 el Tribunal Regional de Rostov (Rusia) tomará una decisión respecto al recurso de apelación que se presentó por el caso en el que se declaró culpables a 16 Testigos de la ciudad rusa de Taganrog. Los acusados fueron juzgados por organizar reuniones religiosas pacíficas y asistir a ellas.

La pesadilla que vivieron estos Testigos comenzó en el 2011, cuando las autoridades locales entraron en sus casas de forma violenta para registrarlas y grabaron con cámaras ocultas sus reuniones religiosas. Más tarde se presentaron cargos en su contra. Tras un juicio de quince meses, el tribunal de Taganrog condenó a siete Testigos el 30 de julio de 2014. El juez impuso multas elevadas a los siete acusados y a cuatro de ellos los sentenció a largas penas de prisión. Sin embargo, enseguida los eximió de pagar las multas y canceló las penas de cárcel. Basándose en tecnicismos, el juez no condenó a los otros nueve Testigos acusados, pero sostuvo que habían participado en actividades extremistas. Los 16 Testigos han apelado para ser totalmente absueltos de los cargos.

El fiscal también ha presentado un recurso de apelación. Exige que, una vez termine la audiencia, el Tribunal Regional de Rostov encarcele a los cuatro ministros religiosos. También pide que el tribunal anule el veredicto con el que se absolvió a los otros nueve Testigos y los condene por “extremismo”.

Vasiliy Kalin, un portavoz del Centro Administrativo de los Testigos de Jehová de Rusia, declaró: “Espero que el Tribunal Regional de Rostov se dé cuenta de que este juicio es una farsa, de que estas 16 personas son víctimas de opresión religiosa y de que ya han aguantado demasiado. Por eso, confío en que serán exoneradas de todos los cargos”.